domingo, 20 de julio de 2025
Opinión/ Creado el: 2014-03-11 08:15

Una mayoría sin dolientes

Mientras unos celebran haber sido favorecidos con el voto de las minorías en la pasada contienda electoral, otros seguimos intranquilos porque en el proceso se volvió a presentar la compra y el manoseo de votos, pero sobretodo porque la abstención, ¡con más del 57%!,

Escrito por: Redacción Diario del Huila | marzo 11 de 2014

superó de largo todas las preferencias de los votos potenciales. Si los elegidos, después de su fiesta, se ponen a revisar este alto porcentaje de desinterés popular, tendrán que coincidir que se sigue reflejando una grave y creciente inconformidad que, con el voto en blanco y una apatía de más del 90% de los compatriotas residentes en el exterior, pone en entredicho su representación popular.

No es democrático ni patriótico que nuevamente, después del brindis, los aplausos y los discursos sobre tierras prometidas, ninguno de los nuevos parlamentarios colombianos se pregunte qué hacer para responder y buscar atender a ese rechazo contundente de los abstencionistas, el grueso nada despreciable de los vencedores sin rostro… y sin palabra, que es lo peor. ¿Será que en el Congreso de la República no se han dado los suficientes motivos para aumentar la participación democrática en las elecciones? ¿Será que después de revisar los guarismos, de sumar y restar, de analizar los cocientes, de determinar las curules para ponderar las alianzas, habrá un reposo en la euforia para cuestionarse muy en serio la efectividad de sus propuestas programáticas, contundentes, así como el impacto ético y moral de sus comportamientos?

¿Este nuevo Congreso – que apenas en parte se renovó- sabrá reponerle al pueblo colombiano la deuda del parlamento actual que no fue capaz de ayudar a reformar la salud, la justicia, la educación y el agro como pilares del bienestar colectivo? ¿Veremos a los parlamentarios electos visitando periódicamente a sus representados no en la comodidad de las capitales departamentales sino desde la misma provincia, donde más se originan las demandas y las expectativas de la gente? ¿Sabrán tener el suficiente criterio y coraje para legislar con transparencia e independencia ideológica frente al rezago inquietante de alrededor de 30 parlamentarios que los politólogos y analistas señalan como herederos del paramilitarismo? ¿Permitirán que se revelen y publiquen tanto la financiación de sus campañas como el desarrollo de su gestión parlamentaria? ¿Habrá por fin renovación?

Cuando gana la abstención, pierde la democracia y es más incierta la paz social.