viernes, 18 de julio de 2025
Opinión/ Creado el: 2014-01-03 03:13

Pensando con el deseo

El nuevo año comienza como siempre con los firmes propósitos de mejorar. Enero es un momento para definir objetivos, pues nos permite de manera individual hacer un balance de lo hecho y lo que se dejo de hacer, para con el deseo, definir el punto al cual queremos llegar. Lo que casi siempre pasa, es que no hay plan de ruta.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | enero 03 de 2014

Lo mismo ocurre o debería ocurrir con las ciudades, se deberían trazar planes a largo plazo, que sean refrendados anualmente, que permitan definir el punto de llegada, y aún más importante trazar qué camino tomar, qué herramientas llevar y qué tiempo se necesita. En este ejercicio epistolar, ya que escribir es más fácil, echemos un vistazo macro a Colombia.

Encontramos inmediatamente que las cargas no están balanceadas y que el país en medio de un ambiente de libre comercio exterior como el actual, tendrá que recomponer el peso de sus ciudades. En un país centralista, de puertas cerradas, era justificable que los centros industriales estuvieran en medio de sus montañas y no cerca al mar; lo cual de inmediato avizora un cambio en la balanza industrial de Colombia, pues ciudades puerto como Barranquilla le quitaran peso sin duda a ciudades como Medellín en el desarrollo industrial. Por otro lado, el pacifico en PAZ, valga la redundancia, podrá salir del olvido al cual ha sido condenado en este país. La región del pacifico en el continente es muy prospera, llena de ciudades como Panamá, Lima, San Francisco, Acapulco, y Los Ángeles entre otras que muestran la perdida de oportunidad en Colombia. Y para finalizar la región de la Orinoquia debería ampliar la frontera agrícola Colombiana con tierras menos costosas y con tecnología que permita productividad como lo ha hecho Brasil en su Amazonía.

En ese orden de ideas, Neiva debería definir su papel y construir su futuro como ciudad de servicios nodales. Si los dirigentes de la región lo permiten y lo promueven, el papel de Neiva debería ser logístico. La competitividad económica hoy no es industrial, muestra de ello es Walmart que es de las empresas más prósperas en el mundo y no manufacturan; la riqueza está en la logística; un caso de éxito es Singapur, pero requiere de otra columna. Permitir de una mejor manera el paso de los productos de Bogotá, los Llanos, el Huila, Caquetá y Putumayo hacia el pacifico de manera terrestre y y de los últimos 4 hacia el Caribe por vía fluvial es el futuro de esta ciudad-región, y el entendimiento de esto nos debe llevar a exigir a nuestros dirigentes que todos sus esfuerzos sean canalizados en este sentido. La descentralización es un fenómeno que viene, y la capital del sur de Colombia será Neiva. De allí la importancia de la doble calzada de Girardot a Pitalito, de las tres (3) vías al mar que siguen a paso tortuga, la navegabilidad del Magdalena y el desarrollo de centros de servicios logísticos para carga. Hoy llevar un contenedor de 20 pies cúbicos le cuesta a un industrial de Bogotá $2400 dólares hasta Buenaventura por la ruta de la línea (única vía al pacifico). Y llevarlo de allí a Singapur le cuesta $1800 dólares. Así que con mejores vías, servicios de hotelería, centros logísticos amplios y tecnificados, no cabe duda habría una mayor probabilidad de tener un mejor futuro para el Huila en general. 

Neiva tiene a su alcance la posibilidad de ser partícipe del surgimiento de la sociedad de las redes y el espacio de los flujos. Pensando con el deseo, deseo una Neiva nodal.