Los escombros en Neiva son un problema cultural
Las escombreras ilegales pululan por los barrios de Neiva dándole un aspecto de ciudad sucia y desaseada. Las escombreras están por todas partes. Se observan en lotes privados, en la vía pública y hasta en las orillas de los ríos Magdalena, Loro y Las Ceibas. Una de las más grandes escombreras está en la desembocadura de Las Ceibas, el río que surte de agua al acueducto de la ciudad. Y este problema se presenta a pesar de que existe una escombrera habilitada en el relleno sanitario “Los Ángeles”.
Los responsables, en primer lugar, son los dueños de las demoliciones grandes o pequeñas que contratan a los zorreros o a los volqueteros para que se lleven los escombros y dispongan de ellos a como se les dé la gana. Los culpables son, entonces, los zorreros y los volqueteros que van tirando los escombros donde les quede más cerca o donde mejor les parece.
Durante un solo día, en una escombrera ilegal del barrio Timanco, los observadores contabilizaron la llegada de 20 volquetas cargadas de ladrillos, tierra y bloques de cemento. Y las autoridades ¿qué hacen? Pues parece que no mucho, porque en otro recorrido por la ciudad se encontraron escombreras hasta en las zonas verdes de los barrios que están destinadas para parques y sitios de recreación.
Los otros responsables, pues, son las autoridades ambientales y de policía que, aunque conocen que existen más de treinta botaderos ilegales de escombros parece que lo que hacen es muy poco para incautar las zorras y los vehículos que se dedican a esta clase de actividades. Perfectamente podrían instalar cámaras de video para hacer la cacería a los infractores y aplicarles sanciones ejemplarizantes. La mala costumbre de botar escombros donde mejor les parezca, repito, la tienen los dueños de zorras tiradas por caballos, unos cuantos volqueteros y más de 80 conductores de motocarros que cobran 20.000 pesos por cada viaje.
El conductor de un motocarro aseguró tranquilamente que “Botar basura es buen negocio, de eso hemos vivido por años”. Y, aparentemente, a nadie le importa que nuestra ciudad sufra la fea imagen del abandono y el descuido, luego todos los neivanos somos responsables por no denunciar a las autoridades de policía a los malandros que nos están llenando la ciudad con escombros y basuras.
Es un tema de urgencia manifiesta que la Alcaldía implemente un sistema eficaz para el manejo integral de los escombros que están afectando el entorno paisajístico y ambiental de la ciudad. La ausencia de un sistema de esta naturaleza impide regular el manejo de los escombros y agudiza la problemática social, ambiental y hasta afecta la salud económica del Municipio.
A la Autoridad Ambiental le compete hacer control y seguimiento de los sitios donde se realiza disposición ilegal, no solo de escombros, sino también de residuos comunes y animales muertos, porque las personas que aún no tienen conciencia cívica ni ambiental, contribuyen a incrementar estos sitios, convirtiéndolos en basureros crónicos.
Sería bueno saber cuántos comparendos ambientales han sido impuestos este año en Neiva, por parte de la policía, en cumplimiento de sus labores de control al manejo de los residuos sólidos o la disposición indebida de escombros.
Con el fin de fortalecer la acción de vigilancia por el cumplimiento del comparendo ambiental, la administración municipal debe ordenar la capacitación de los agentes de la policía para hacer mucho más efectiva su labor.
Además, debe exigirse al operador del aseo, Ciudad Limpia, para que haga la limpieza de estos basureros, ya que la labor de recolección de residuos y el barrido de las vías públicas, corresponde al operador del servicio de recolección de basuras de la ciudad.
La implementación del comparendo ambiental permite sancionar a personas sorprendidas en flagrancia cometiendo delitos ambientales y, con el concurso de la policía, deben realizarse operativos para evitar la disposición inadecuada de residuos.
El comparendo y las sanciones drásticas contribuirán al incremento de la conciencia en las personas, que se refuerza con el conocimiento de las normas mediante campañas que se realicen puerta a puerta, en colegios y barrios, además de la concientización de los infractores, quienes deben asistir a charlas de capacitación.
Las empresas operadoras del servicio de aseo en otras ciudades, son las encargadas de prestar el servicio de recolección, transporte y disposición de escombros, para que los residuos no sean arrojados clandestinamente en áreas públicas y para que los escombros originados por remodelaciones de vivienda que no requieren licencia de construcción.
Este servicio tiene un costo para el usuario ya que no hace parte de la tarifa de recolección contemplada mensualmente. Sin embargo, ninguna empresa cobra por la recolección de una cantidad inferior al metro cúbico de escombros.
En ciudades como Medellín, las Empresas Varias de la capital antioqueña tiene una de las tarifas más altas en este servicio, que oscila entre los 20 y 41 mil pesos por metro cúbico, pero incluye la recolección de escombros, colchones, muebles y enseres, otro tipo de residuos sólidos y desechos vegetales.
En Bogotá como en Cali, existe una línea única de atención, el número 110 donde se solicita el servicio. En el Distrito Capital la recolección de este tipo de material cuesta, después del primer metro cúbico, entre 10 y 20 mil pesos, por metro cúbico adicional.
Un vocero de la Secretaría de Ambiente, señaló que muchos lotes privados en Neiva son usados como escombreras y que con el apoyo de la Policía ya fueron selladas y recuperadas 10 escombreras ilegales. Pero hizo énfasis en que la limpieza de la ciudad costaría cerca de 4.000 millones de pesos.
La Alcaldía no puede seguir invirtiendo recursos para limpiar las escombreras ilegales, que en pocos días están de nuevo colmatadas. Lo que sí debe hacer la administración municipal es estudiar la posibilidad de instalar una planta para convertir los escombros en materiales de construcción.
Además, debería hacerse sembrados de pasto, de árboles y de plantas ornamentales en los sitios que se limpien. El papel de la comunidad es indispensable para evitar que se arrojen nuevamente escombros en los sitios que se vayan recuperando ambiental y paisajísticamente. Con el decidido apoyo de la comunidad le podemos cambiar la cara a la ciudad apoyando a la Alcaldía de Neiva para realizar un trabajo que se debe hacer a la mayor brevedad posible. Si nos unimos, más rápido tendremos una ciudad limpia, verde, sostenible y para mostrar.