sábado, 19 de julio de 2025
Opinión/ Creado el: 2020-10-28 02:51

CIDALIA E INÉS

Escrito por: Redacción Diario del Huila | octubre 28 de 2020

Por Margarita Suárez

Infortunadamente el coronavirus es realidad y se está llevando a gente valiosa. En el Huila figuran 585 fallecidos por Covid-19. Lamentamos la muerte de todos, en especial de aquellos seres que tuvimos la fortuna de conocer. Han viajado a la eternidad ciudadanos ejemplares que dejan huella en los corazones de la gente, como Carlos Fajardo y Cidalia Falla, por nombrar los más recientes.  Carlos Fajardo fue un gran líder gremial, adalid del programa que inicialmente se denominó “Operación Sonrisa” para ayudar a niños con labio leporino a superar su deformidad y poder sonreír, comer y vivir más felices. Una gestión admirable. Sobre Cidalia Falla de Rosero tengo los mejores recuerdos. Profesional en bacteriología, persona amable, simpática, servicial, generosa y con gran don de gente. La conocí a través de su hermana Inés Falla Morera, mi inseparable gran amiga, fallecida hace nueve años víctima de un infarto, quien siempre permanecerá en mí corazón. Las hermanas Falla, tanto Inés como Cidalia, Elizabeth a quien visitamos en su casa de Barranquilla en compañía de Inés, así como Nubia y Anastasia, se han destacado como personas muy especiales, al igual que Carlos, quien es mi amable vecino. A ellos, a su señora madre Maud, y a Mauricio, mi más sentido pésame. También envío mis condolencias al hijo de Cidalia, el médico anestesiólogo Alfonso Rosero Falla.  Y por supuesto a los tres hijos de Inés, que quisieron tanto a la tía Cidalia y se convirtió en una madre para ellos cuando falleció nuestra querida Inés. Andrés Felipe “Pipe”, quien reside en París, ciudad que en compañía de él disfrutaron plenamente Cidalia e Inés, un mes antes de fallecer esta última, escribió en Facebook una nota muy sentida y ha publicado hermosos videos del paseo por Europa de las hermanas que hoy se reencontraron en la eternidad. Me impactaron sus palabras y en especial donde dice: “Tía, te cuento una confidencia, mi mamá tu cómplice, me había dicho cuando yo tenía pocos años que, si algo le llegara a pasar a ella, allí estarías tú para ayudarnos, y así fue, te convertiste en una madre para mí, y una abuela para mi sobrina… El dolor es muy grande, solo me reconforta imaginarte con mi mamá en estos momentos. …. Se me fue mi segunda madre”.