Víctimas rechazan nombramiento de nueva secretaria para la Paz
Que una ex combatiente de la otrora guerrilla Farc fuera nombrada la nueva Secretaria para la Paz, en Neiva, no calló del todo bien en algunas personas de este sector poblacional. Piden que sean analizadas las “barreras” sobre ese proceso de articulación.

Mucho revuelo ha causado en Neiva la designación de Smith Duarte Cano como directora de la Oficina de Paz y Derechos Humanos, entidad que según lo expresado por el alcalde electo, se convertirá en una secretaría.
Esta sería la primera Secretaría para la Paz que tiene el Huila, pero además, una de las primeras, también, a nivel nacional que será liderada por una excombatiente de la otrora guerrilla Farc.
El nombramiento por parte del nuevo mandatario de Neiva, Gorky Muñoz Calderón, se dio el 7 de noviembre, pero la Mesa Municipal de Víctimas, y también, la instancia a nivel departamental, están consensuando emitir un comunicado en rechazo.
“Sentimos tristeza, vacío y desilusión. Rechazamos el nombramiento de ella” manifestó Derly Pastrana, Coordinadora de la Mesa Municipal y Departamental de Víctimas.
La defensora de los derechos humanos también entregó un balance de avance en la reparación, según las acciones adelantadas por la Administración Municipal de Rodrigo Lara Sánchez y Gobernación Departamental, a cargo de Carlos Julio González Villa.
Resaltó el compromiso de ambos mandatarios y todo su gabinete; lo más destacado y las acciones pendientes que quedan figurando ahora en la agenda de los nuevos mandatarios.
El miércoles 13, hicieron presencia 140 personas en Centro de Atención y Reparación de Víctimas, CRAV, entre líderes, representantes y demás, en una entrega de cuenta por parte de la alcaldía de Neiva a la Mesa Municipal.
¿Cómo les fue a las víctimas en el proceso de reparación en las Administraciones de Lara y González Villa?
Con la administración de Neiva teníamos un capítulo específico en el Plan de Desarrollo, ‘La Razón Son las Víctimas’. Tenemos una satisfacción de un cumplimiento del 80% en todas las medidas de asistencia y atención. Se refleja la participación y la articulación que tiene la Administración con la Mesa Municipal, que es nuestro espacio autónomo y representativo en el municipio.
Y en el tema departamental, estamos ajustando el balance del cumplimento que lo tendremos para el 27 de noviembre, haciendo el seguimiento del Plan de Acción Territorial, PAT, Huila. Verificaremos y lo presentaremos frente al gobernador saliente y el electo.
¿Qué cosas consideran que les quedaron pendientes?
En Neiva tenemos algo de debilidad en la caracterización. Es muy importante conocer la realidad de cuántas son las víctimas que están en el municipio, en cuáles comunas es donde más personas hay de este grupo poblacional, y el fortalecimiento empresarial.
Yo creo que esta administración nos cumplió con unidades productivas, más de 250 nuevas y más de 60 fortalecidas. Creo que lo que hace falta es la empleabilidad y más fortalecimiento empresarial.
En el departamento, tenemos pendiente unos proyectos productivos agrícolas, ese fue un compromiso que quedó dentro del PAT, pero que no se está reflejando. Eso lo vamos a dejar como solicitud ante la Procuraduría. También, tenemos pendiente un proceso de caracterización, empleabilidad y fortalecimiento empresarial.
Y entre los aspectos a destacar, ¿cuáles figuran?
El compromiso y la voluntad política que se ha venido dando dentro de estos dos gobernantes, con los complementos de asistencia y atención que les emana la ley, con sus secretarios. A veces las personas creen que una administración debe cumplirles completamente con lo que dice la ley, pero no son solamente nuestros mandatarios, sino que también debemos elevar el eco a nivel nacional. Porque el que da una reparación integral es el Gobierno Nacional.
No hay palabras para agradecerles.
Esto es un valor que le pedimos a los nuevos gobiernos, que se haga articulado con las mesas.
¿Qué le piden las víctimas a los nuevos gobernantes?
Como coordinadora departamental en la Mesa de Víctimas, y coordinadora de Neiva, quiero llamar la atención sobre un proceso al alcalde electo, el señor Gorky Muñoz, que se siente a escucharnos por esa elección que hizo de la nueva coordinadora de la Oficina de Paz, que ha tenido antecedentes de grupos armados.
No es rechazarle la oportunidad laboral, sino que sienta que nosotras las víctimas, y más de este grupo al que perteneció la nueva coordinadora, nos duele, no hemos sanado ni hemos sido atendidas. No hemos tenido verdad. Rechazamos contundentemente este proceso.
Muchas trabajaron con él en su campaña, que no nos humille de esa manera.
Sabemos que todo ser humano tiene una oportunidad, pero a nosotros todavía no nos ha sanado el dolor de la guerra.
¿Qué piensa la Mesa Municipal de la nueva Secretaría Para la Paz, que antes era una oficina?
Es muy importante y eso era de los compromisos por los que siempre ha luchado la Mesa, tener un espacio autónomo, una Secretaría que le dé la cara a las víctimas y que sea independiente de otras secretarías.
Esa Secretaría puede presentar proyectos y generar acciones a nivel nacional, para fortalecer y tener más recursos en el municipio, que es el que más víctimas alberga en Huila. Queremos que se concluya en proyectos productivos, oportunidad laboral y educativa, como también mejoramientos de vivienda.
La educación no solamente en el Sena, sino que puedan entrar a una universidad sin tantos amarres ni barreras.
¿De la titular de la cartera, que hace días se dio el nombramiento, ustedes qué conocen y qué rechazan?
Sentimos tristeza, vacío y desilusión. Rechazamos el nombramiento de ella, no el hecho de que puede ser profesional, que tiene un proyecto de reconciliación y que tiene un conocimiento. Lo que rechazamos es la no articulación del nombramiento, porque esta es una oficina de conciliación, reconciliación, resiliencia, paz, que es donde vamos a estar; y conocemos que fue de un grupo al margen de la ley, ha venido haciendo un proceso más con desmovilizados que con víctimas.
Queremos que el señor alcalde, con el respeto que él se merece y con el que nosotros también nos merecemos, que miremos las barreras que tenemos en la articulación de este proceso.
Nosotros conocemos es lo que dicen los medios de comunicación. El grupo al que ella perteneció es el más sanguinario y del que más víctimas hay el departamento. Hablo también directamente como una de ellas, de la tragedia de mi vida… y eso duele.
¿Cómo cree la Mesa que se pueda construir paz y qué entienden por ello?
Nosotros lo hemos socializado mucho, dentro de la Mesa Departamental tenemos líderes que son seguidores de izquierda, derecha, centro, pero acá somos una sola familia donde compartimos nuestras diferencias. Para nosotros la paz se construye desde nuestros corazones, es reivindicar a estas personas y es construcción dentro de las comunidades, no desde un escritorio.
A nosotros no nos han dado un proceso de atención psicosocial, la reparación está en el limbo.
La jefe de cartera de la Secretaría para la Paz no hace parte del Acuerdo Final, si ella les pidiera perdón ustedes, ¿cambiarían de postura?
Yo creo que a las personas hay que darles una segunda oportunidad, no perdón, porque el único que perdona es Dios. Y eso es: que realmente nos miren a los ojos, si le miramos voluntad de ayudarnos a luchar por nuestros derechos y reivindicar a muchas familias, sin arrogancia y con humildad, de trabajo social y comunitario, yo creo que las víctimas no tenemos el odio de no poder trabajar o articular.
Lo que sí exigimos es respeto, compasión y solidaridad por lo que hemos vivido.
Mesas de Participación
Las Mesas de Víctimas hacen parte de los espacios que el Estado ofrece a la población para garantizar la incidencia en las políticas que los afectan. Son también los espacios institucionales de representación de la población afectada por el conflicto para la interlocución con el Estado, en todos los niveles territoriales (municipal, departamental, distrital y nacional), y su fin es la incidencia en la construcción, ejecución y control de las políticas públicas para ese grupo poblacional.
También, son espacios legales de representación de esa comunidad y, como tal, parte fundamental del Sistema Nacional para la Atención y Reparación Integral. Las Mesas de Participación no son asambleas, o de sus organizaciones; a pesar de que sus integrantes son postulados por Organizaciones, una vez son elegidos y forman parte de una mesa, representan a la totalidad de víctimas presentes en el municipio, el distrito, el departamento, o la Nación.
Por ser espacios institucionales, las Mesas están sustentadas en la Constitución Nacional, como desarrollo de los principios de la democracia representativa y participativa, y la tutela especial a poblaciones vulnerables; por otra parte, responde a la jurisprudencia que desarrolla el derecho a la participación de la población víctima del conflicto armado. Además, se sostienen en los postulados de la Ley 1448, su Decreto reglamentario 4800 de 2011 y en la Resolución 0388 de 2013, que adopta el Protocolo de Participación Efectiva, así como en las demás normas y jurisprudencia complementaria.