Leidy Caupaz, la emprendedora que se le midió a la metrología
Servimetrol SAS es el nombre del laboratorio de metrología que hoy busca posicionarse en los mercados regional y nacional. Es una de las nacientes empresas huilenses que han recibido el apoyo del Fondo Emprender.

Emprendimiento, innovación y perseverancia. Con esas tres palabras podría definirse a Leidy Constanza Caupaz, la joven huilense que desde hace cuatro años viene dando vida a una empresa de metrología establecida en Neiva, con el fin de ofrecer sus servicios en una zona del país donde son necesarios, pero no fáciles de encontrar.
Esta ingeniera electrónica, quien logró convertirse en emprendedora SENA, decidió constituir Servimetrol SAS, un laboratorio especializado en calibración y mantenimiento de equipos de medición de presión y temperatura. Aquellos que, aparentemente, sólo se usan en industrias relacionadas con el sector minero, pero que, en la práctica, pueden hallarse en las más diversas áreas.
Se trata de un negocio prometedor, en el cual Leidy ha puesto todo el empeño necesario; desde el mismo instante en el que concibió su propuesta de negocio, la presentó al Fondo Emprender del SENA, consiguió parte de los recursos requeridos para formar la empresa y, finalmente, obtuvo la condonación de la deuda, gracias a los resultados alcanzados.
“La idea nació cuando hice mi pasantía en Alcanos del Huila. Yo era la ingeniera encargada de los procesos metrológicos y el tema comenzó a interesarme. En un principio, fue muy duro. Lloraba y me preguntaba: ‘Por qué me metí en esto’. Pero, reaccioné, porque sé que ésta es una oportunidad que no se le da a todo el mundo”, afirma.
En efecto, esta huilense, nacida hace 31 años en La Plata, ha incursionado en un negocio que no es muy común en esta zona del territorio colombiano, pese a que son muchas las empresas que demandan ese tipo de servicios.
De acuerdo con los expertos en la materia, la metrología está presente en las mediciones que con fines de investigación adelantan universidades y laboratorios, en la actividad de organismos reguladores, en la industria militar, en la producción y en el comercio. Su aplicación abarca campos tan diversos como la ciencia, la medicina y la industria farmacéutica, la construcción, la metalurgia, la minería, la actividad pesquera y la alimenticia, los sectores del cuero y los textiles, así como el rubro del plástico y el de la madera, entre muchos otros.
Por el país
Servimetrol ha ido expandiéndose poco a poco y con mucho esfuerzo ha traspasado las fronteras huilenses y ha llegado a otros departamentos, como Santander y Tolima.
Son diversas las compañías que han recibido sus servicios, algunas de ellas de la talla de Hotel Chicalá, Mecánicos Asociados SA, Oameu,Parko Services, Postobón y Transgastol. Hasta allí ha llegado Leidy con la empresa que hoy se ha convertido en parte fundamental de su proyecto de vida.
“Éste es otro caso de éxito de la cultura de emprendimiento generada desde la Regional Huila del SENA. Un proyecto orientado a la prestación de servicios de medición del sector minero-energético e industrial y una emprendedora que rompe el paradigma de género en la creación de empresas”, apunta el director Regional del SENA en el Huila, Luis Alberto Tamayo.
Según el funcionario, éste es el ejemplo de una joven emprendedora, quien logró condonar los recursos apropiados (cerca de 80 millones de pesos), por su visión, su pasión y su disciplina, cualidades que se tradujeron al lenguaje de la convocatoria.
“Leidy cumplió todos los compromisos expresados en el plan de negocios: Ingresos, creación de empleo y adecuada inversión. Con esta nueva generación de jóvenes emprendedores y nacientes empresarios, garantizaremos el futuro de la región”, dice Tamayo.
Sin duda, Leidy y Servimetrol se convierten en modelo de empuje, de innovación, de oportunidad y de aporte al desarrollo regional, de la mano con el SENA.
“Además de ejecutar los tradicionales procesos de formación, con incorporación de competencias del más alto nivel, hemos demostrado que para cerrar las brechas sociales, económicas y culturales, es necesario hacer emprendimiento. Eso se consigue a través de nacientes empresarios, que tengan clara la importancia de la innovación”, acota el subdirector del Centro de la Industria, la Empresa y los Servicios, Fermín Beltrán.
De acuerdo con su versión, en el Huila la entidad estatal ha logrado promover la creación de fuentes de empleo, a través de 96 empresas constituidas con el impulso del Fondo Emprender, estrategia que ha puesto alrededor de 6 mil 046 millones de pesos en la región.
Buen ejemplo
“Servimetrol está funcionando, generando empleos, desarrollo, oportunidad. Leidy es una niña muy joven que decidió crear un laboratorio de metrología. Al comienzo todo el mundo se asombró; la gente preguntaba: ‘Hasta dónde va a llegar’. Hoy está cerrando negocios con empresas como Mecánicos Asociados, con el sector petrolero y está en la senda de la acreditación. Es una venta de servicios tecnológicos del más alto nivel y ella lo está haciendo”, considera Beltrán.
Así es… En la actualidad, Servimetrol está generando tres empleos directos y trabaja bajo los lineamientos de las normas técnicas de calidad (NTC ISO 9001 y NTC ISO 17025), pues el propósito es seguir abriéndose paso en el mercado regional y también en el nacional.
Ahora, con una preocupación menos, pues Leidy no tendrá que reintegrar el dinero que recibió del Fondo Emprender, recursos que le permitieron adquirir la mayor parte de las máquinas del laboratorio, importadas de Dinamarca.
“Hace un año supe que la deuda me había sido condonada. Sentí mucha felicidad; lloré de la alegría. Para mí, el Fondo Emprender ha sido una oportunidad muy grande. Si todas las personas la aprovecharan sería magnífico”, comenta.
Evidentemente, a esta huilense la mueve el anhelo de seguir creciendo como empresaria; pero, además, guarda la ilusión de constituir una fundación para chiquillos desamparados.
“Quiero ayudar a los niños de la calle, pobres y desamparados, que no gozan de educación, alimentación, salud, consuelo ni apoyo emocional; pienso que es nuestra responsabilidad trabajar por ellos y ayudar a construir una nueva sociedad”, expresa, con la seguridad que demuestra en cada una de sus acciones y de sus palabras y con la convicción de que aún son muchos los esfuerzos que debe hacer para materializar sus sueños.
“Hacer empresa es complicado”, asegura, a la vez que reflexiona: “Se viven muchos altibajos. Es entonces cuando hay que decirse: ‘Si llegué hasta acá, por qué no puedo llegar más allá, encontrar el punto de equilibrio y posicionar la empresa. Si llegué hasta acá, tengo que mirar más allá’. Y es en ello en lo que estoy”.