miércoles, 04 de junio de 2025
Enfoque/ Creado el: 2014-03-16 02:30

Las elecciones del parlamento

Necesitamos una reforma de nuestro sistema electoral que nos garantice que solo colombianos educados, honestos y pulcros puedan acceder a los cargos de dirección del Estado.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | marzo 16 de 2014

En la pasada tertulia realizamos un foro interno para analizar los resultados de las pasadas elecciones donde se consolida un nuevo mapa político del país. Lideraron la reunión José Vicente Ortiz, Félix Trujillo, Julio Enrique Ortiz, y nuestro coordinador Germán Liévano.

Al Congreso elegido llegan figuras de peso que permiten vislumbrar que volverán al Capitolio debates políticos de fondo. Están: el expresidente Álvaro Uribe, los expresidentes de la Constituyente de 1991, Horacio Serpa y Antonio Navarro, y figuras que se han ganado respeto entre la opinión como Jorge Enrique Robledo, Viviane Morales, los hermanos Juan Manuel y Carlos Fernando Galán, Claudia López e Iván Cepeda.

Pero, por otro lado, es el Congreso en el que se consolidan controvertidas tendencias que mantienen prendidas las alarmas sobre la salud de la democracia en Colombia. En las elecciones se presentó una abstención de más del 50% y como siempre observamos que nuestra democracia y específicamente nuestras elecciones están permeadas por el fenómeno de la monetización y la compra–venta de votos tan común en estas época de elecciones, porque los políticos gastan grandes sumas para toda la logística, las pancartas, publicidad en prensa, radio y televisión, el transporte, el almuerzo, los pregoneros y finalmente el dinero para los electores. Porque los costos se han disparado y los límites de financiación son olímpicamente violados. Una curul para el Senado requiere de una inversión de al menos $5000 millones; para la Cámara calculan $3000 millones. La pregunta que nos hacemos los ciudadanos de a pie es cómo es el retorno de esta inversión; de dónde provienen estos dineros. La respuesta es simple, vía contratación. Aquí es donde viene la corrupción, en la adjudicación a dedo de los contratos donde se obtiene el retorno de la inversión hecha, o sea lo que popularmente en este gobierno llamamos mermelada política.

¿Quiénes son estos personajes que se adueñan de los contratos del Estado? Pues tenemos varios clanes familiares que se encuentran posesionados y ampliamente financiados por grupos paramilitares, algunos en la cárcel, por lo que sus herederos políticos asumen las curules de sus padres con las más altas votaciones, proporcionales a los votos comprados. De las 268 curules en disputa, 102 en el Senado y 166 en la Cámara, 26 serán ocupadas por congresistas que repetirán legislatura y que están siendo investigados de manera preliminar en la Corte Suprema de Justicia por sus presuntos vínculos del pasado con grupos armado ilegales. Rodrigo Uprimny Yepes, director del Centro de Estudios de Derecho, Justicia y Sociedad (Dejusticia), aseveró que los congresistas investigados por parapolítica elegidos para la legislatura 2014-2016 son una demostración de que existen “enormes debilidades del sistema electoral que permiten que esos vínculos entre la política y organizaciones criminales persistan”.

Los colombianos estamos agotados y aburridos con esta “comedia democrática” donde una clase política mafiosa permeada por el narcotráfico y bandas delincuenciales logra o intenta adueñarse  de las elecciones para desfalcar al Estado colombiano. Necesitamos una reforma de nuestro sistema electoral que nos garantice que solo colombianos educados, honestos y pulcros puedan acceder a los cargos de dirección del Estado.

Desde temprana edad, nuestro querido Sergio Yunes, que en paz descanse, fue consciente de la importancia de reformar el sistema electoral y elaboró su tesis de grado sobre la conveniencia del voto obligatorio en Colombia, y estuvo personalmente aquí en el Botalón explicándonos las bondades del sistema que funciona muy bien en varios países, entre ellos la República del Perú. Ya es hora de que reformemos el sistema de votación a través del uso de internet, las redes sociales y los teléfonos celulares con el fin de dar transparencia y efectividad al sistema. Es solo observar cómo han resuelto el problema en otros países como Finlandia donde los candidatos suben su hoja de vida a internet para que sea consultada por los electores, y estos votan a través de internet por los mejores.

Regionalmente se mantuvieron las expectativas políticas según las encuestas previas que demuestran que nuestro departamento es mayoritariamente de derecha, consolidándose la figura de Ernesto Macías como representante del Centro Democrático, la nueva tercera fuerza electoral del país. La curul de Jorge Eduardo Géchem Turbay, el veterano y avezado gran elector de la región, está todavía en disputa y hacemos votos para que el Huila no pierda esa opción. Es sorprendente y preocupante que ninguno de los exsecuestrados por la guerrilla, y que enarbolaron las banderas de la paz, haya alcanzado sus propósitos. En la Cámara, estrenaremos jóvenes con grandes ambiciones y solo queda pendiente que no se vayan a producir demandas por supuestas inhabilidades de algunos de los elegidos.

Hacemos votos porque los elegidos  recuerden que sus curules les permiten y obligan para con todos los habitantes de la región para que se restablezca la confiabilidad en la institución parlamentaria que persiste amenazada por la corrupción.

Los invitamos a escucharnos en la emisora Radio Surcolombiana (1090 AM) a las 9:00 de la mañana todos los domingos y también pueden visitar nuestra página www.tertuliaelbotalon neiva.com.

Rincón del Botalón

GABRIEL RODRÍGUEZ DUQUE

Diario del Huila, Neiva