El único municipio del país sin hospital
Los altamireños llevan más de 10 meses sin este servicio. Un habitante del municipio murió a 50 metros del centro de salud.

Todo lo que ocurre en Altamira es insólito. A decir verdad, este municipio parece un corregimiento de 4300 habitantes.
Pero no, es un pequeño municipio del centro del Huila que ahora pasa por una de sus mayores crisis de salud: no funciona su hospital desde hace más de 10 meses y como si fuera poco, ya se murió por falta de atención, el primer enfermo.
El hecho ocurrió hace tres meses. Un habitante del pueblo, enfermo de várices murió desangrado a 50 metros del hospital San Roque de este municipio, según relató Neftalí Valencia López, concejal de Altamira.
“Un amigo murió desangrado porque no hubo quien le prestara los primeros auxilios. El señor Alfonso, eso hace como unos tres meses”, relató.
Este hecho fue el detonante de una profunda crisis que todos los habitantes de este municipio vienen soportando.
Las peticiones
Según el concejal Valencia López, ya son muchas las solicitudes que le han hecho al alcalde Alfonso Lizcano Romero, quien les ha hecho promesas pero no se ha logrado el propósito inicial que es lograr la prestación del servicio de salud en el municipio.
De acuerdo con la versión del cabildante, lo que ha hecho la administración es contratar por algunas medias jornadas un médico para que atienda consultas, mientras tanto los pacientes graves, a la hora que sea son llevados a Guadalupe (10 kilómetros de distancia), Tarqui (11 kilómetros) o Garzón (25 kilómetros).
“No podemos pensar que nos atienden 15 o 16 pacientes cuando somos 4300 habitantes. No podemos esperar más. Si llegamos a tener una calamidad, no podemos decir vayamos a Guadalupe o Tarqui a que nos atiendan allá, ese no es nuestro municipio, y además no podemos arriesgar vidas si esos pueblos quedan lejos del casco urbano”, dijo Valencia López.
Las razones
De acuerdo con lo que explican algunos concejales según la administración del municipio, no hay disponibilidad de recursos para sostener una planta de personal en un municipio con una pequeña cantidad de habitantes.
El hospital en estos momentos solo cuenta con una enfermera y la aseadora, que son de planta y la mayoría de tiempo están desocupadas.
“Nosotros hemos enviado advertencias a organismos porque este no es un problema de ahora. Hace unos dos años atrás ha venido en crisis la salud, pero es que ahora tocó fondo”, recalcó Neftalí.
Lo que buscan los concejales es que se preste el servicio las 24 horas. Por eso piden que el ministro de la Protección Social, el secretario de Salud del Departamento y el alcalde logren una solución concreta a esta problemática.
Mientras se logra una solución, las mujeres embarazadas, los servicios de odontología y las urgencias son atendidos en los municipios vecinos.
“Lo que necesitamos es que haya una solución inmediata. Si la tutela no es favorable nos vamos a medios internacionales porque esto tiene que tocar fondo”, concluyó el concejal.
El liderazgo en el municipio
El municipio de Altamira está ubicado en el centro del Huila. Un candidato a la alcaldía en esta población con 900 votos puede llegar a ocupar el principal cargo del pueblo. El potencial electoral es de 1900 sufragios.
El concejo municipal cuenta con siete concejales. Neftalí Valencia López dice que con 84 votos ganó las elecciones, aunque los sufragios fueron pocos, es complicado estar entre los electos pues es difícil persuadir a los altamireños. Claro, él solo invirtió $30.000 en la campaña.