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Venezuela: ¡es la economía imbécil!

Bill Clinton hizo célebre esta expresión al replicarle a G. Bush padre por qué ganaría las elecciones presidenciales en EE.UU como una demostración de que es la economía la que mueve al mundo y no la política cargada de promesas y demagogia para ganar consensos, que hoy se hace evidente en la crisis que vive Venezuela.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | enero 26 de 2015

Bill Clinton hizo célebre esta expresión al replicarle a G. Bush padre por qué ganaría las elecciones presidenciales en EE.UU como una demostración de que es la economía la que mueve al mundo y no la política cargada de promesas y demagogia para ganar consensos, que hoy se hace evidente en la crisis que vive Venezuela.

Asistimos a la crisis de un modelo paternalista dependiente del petróleo que Chávez llamó Socialismo del siglo XXI. Desde junio de 2014 el crudo venezolano perdió 61% de su valor (US $99,11 cayó a US $39,19 a enero de 2015), la más baja desde hace 5 años cuando se inició la crisis del 2008. El petróleo representa para Venezuela el 96% de sus divisas, por lo cual el presidente Maduro inició una gira por naciones petroleras y países amigos, desde el 5 de enero para buscar aliados e intentar detener la caída de los precios: Rusia, China, Irán, Arabia Saudita, Qatar y Argelia, a fin de planear una estrategia que controle la oferta del petróleo, que resultó frustrada por la negativa de estos a reducir la producción puesto que algunos de ellos han diversificado sus economías y están en capacidad de soportar esta caída. Solo logró hipotecar más su economía con China al recibir US $20.000 millones y a su regreso con las manos vacías encuentra su país en recesión desde final de año, con una inflación del 64% (la más alta del mundo), escasez de alimentos y medicinas. Una favorabilidad para Maduro que cae al 22% y una oposición que se aglutina alrededor de la Mesa de Unidad Democrática que llama a la “marcha de las ollas vacías” contra el hambre y por el cambio como expresión de la indignación y la desesperanza, la inseguridad y la represión, liderada por Capriles, Corina Machado y el alcalde metropolitano de Caracas Antonio Ledezma.

Ni el control cambiario impuesto a las divisas extranjeras ha evitado que los precios de la canasta familiar se eleven o que el capital salga del país. Mientras, el gobierno sigue buscando culpables en que excusar su inexperiencia en los asuntos de la Nación. Han implementado medidas que lejos de aliviar la crisis, la profundizan, como al fijar “precios justos al consumidor”, lo que realmente acaba por exacerbar la escasez, el desempleo y el inconformismo. Las tímidas medidas anunciadas por Maduro en su Informe de Gestión 2014, donde anuncio que mantendría la tasa de cambio más fuerte (Bs $6,3 por dólar) para la importación de alimentos y medicinas así como unificar las tasa de 12 y 52 Bolívares por dólar pretendiendo acabar con el mercado paralelo de divisas, un aumento del salario mínimo del 15% desde el próximo 1 de febrero y dejar claro que es hora de subir el precio de la gasolina, US $0,02 por litro (la más barata del mundo), con lo cual se llena el tanque de un automotor con menos de un dólar, mientras que en Colombia por solo 1 galón hay que pagar más de US $4), dicho subsidio le cuesta al país US $12.500 millones anualmente.

 

Según el último informe del Foro Económico Mundial (FEM), Venezuela es macroeconómicamente inestable, posee altos niveles de inflación, deuda pública e institucionalidad débil, así como altos niveles de corrupción, ineficiencia del gobierno y el mercado no funcionan debido a la mala asignación de recursos. El informe destaca que el venezolano calificado no es bien remunerado mientras los militares venezolanos (100 mil miembros) reciben incrementos salariales sustanciosos, con un incremento del 500% desde 1999, lo que significa que un general gana hasta 4 veces el salario de un director de hospital o un profesional, con lo cual busca mantener a los militares en el bolsillo dispuesto a reprimir la inconformidad popular. Con más interrogantes que respuestas, acompañado de salidas disparatadas, como aquello del “autosuicido colectivo de la economía del país”, “el tetacampeón José Rujano” en referencia al tetracampeón de ciclismo venezolano, y reconocer la sensible caída de los precios del petróleo, tendrán que “parar de inmediato los regalos petroleros” como lo demanda el gobernador del Estado Miranda, Henrique Capriles. Para el caso de Cuba equivale a US $12 mil millones anuales como contraprestación por la Misión Barrio Adentro y el resto por la Alianza Energética Petrocaribe.

 

Según analistas el pronóstico es sombrío, se espera una inflación del 92,8% en 2015, el empleo formal 59,5% y el informal de 40,5% y una tasa de desempleo de 6,7% que podría incrementar la recesión económica reconocida por el Banco Central, que reportó caídas en la tasa de crecimiento en los últimos tres trimestres del 4,8%, 4,9% y 2,3%. Estaría cerca de la estanflación (recesión más inflación). Tambalean los subsidios establecidos en el artículo 2, parágrafo 2° de la Ley Alimentación que incluye el ticket de alimentación para quienes devengan hasta 3 salarios mínimos, además del subsidio habitacional y salario diario.

 

La precaria coyuntura económica que vive Venezuela impacta nuestro país, limitando el comercio por la restricción de divisas y el esquema de su tasa de cambio que dificulta los pagos a los exportadores colombianos. El presidente de Fenalco, Guillermo Botero, afirma que de nada sirve un incremento en los salarios dado el acceso restringido a la canasta básica, amén de que: “A Venezuela no se le puede vender porque no paga”. Agréguese que tenemos una frontera de 2.219 Km, y ciudades que recalentadas por el contrabando, como Cúcuta y la Guajira y los más de 4 millones de colombianos residentes en ese país que inician el retorno en búsqueda de empleo y oportunidades perdidas.

 

El modelo populista apoyado en la renta petrolera y en los designios del Todopoderoso ha hecho crisis y por ello habría que replantear la afirmación del fallecido presidente Chávez, que delirante ofrecía apoyo a China, segunda economía más poderosa del mundo: “Aunque somos un país pequeño, somos un gigante petrolero y China no tiene las reservas necesarias para satisfacer sus necesidades… Dios puso el petróleo que China necesita para los próximos 200 años en Venezuela” (R. Mosquera, Colombia Frente a los Escenarios del Pacífico: 161). Y por el contrario Nicolás Maduro quien como hijo calavera despilfarro el capital político heredado, nunca se formó como estadista ni se rodeó de un equipo técnicamente capacitado para sembrar la renta petrolera, darle solidez a la economía venezolana, hoy invoca hoy a su mentor el “Chávez nuestro que estás en el cielo, en la tierra, en el mar y en nosotros los y las delegadas” oración del III Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela (2 de septiembre de 2014), para que venga en su ayuda y lo salve, ya no del imperialismo yankee, sino del desplome de los precios del petróleo y de la oposición que podría movilizar las masas inconformes incluso del chavismo, pues no volverán los US $100 por barril del hidrocarburo. Un Maduro resignado así lo reconoce: "He hecho un conjunto de iniciativas para favorecer en sustitución de importaciones y optimización de uso de divisas, porque son menos divisas. De 96 dólares el barril a 40 dólares. Pero nunca nos faltará Dios. Dios proveerá". Estaríamos cerca de una situación revolucionaria donde"Los ’de abajo’ no quieren y los ’de arriba’ no pueden seguir viviendo a la antigua" como señaló Vladimir Lenin.