Oportunidad o amenaza
German Lievano R.

Cuando el lector emprenda el recorrido por estas líneas seguramente se estará cumpliendo en todo el territorio nacional la esperada actividad del Plebiscito, una jornada de particular importancia histórica para la nación en la cual esperamos que de manera muy conciente estemos todos participando. En nuestra Tertulia del Botalón , respetuosos de las distintas inclinaciones ideológicas y políticas de sus miembros no buscamos ni esperamos una posición unánime. Hace unos días le dimos una oportunidad a las dos tendencias predominantes para que expresaran sus puntos de vista y en la columna del Botalón se expresó la argumentación por el SI. Esta semana invitamos a un reconocido defensor del NO, tanto que fue columnista invitado para defender esta posición en las propias páginas de este medio. Se trata del Dr. Hugo Tovar Marroquín abogado penalista de amplio conocimiento en nuestra región. Ha sido concejal, diputado, Senador , Juez Superior, profesor universitario autor de varios libros y por último se ha dedicado al litigio independiente. Su última actuación ha sido en la demanda instaurada contra el anterior Alcalde de Neiva Pedro Suárez por la contratación del Estadio de Fútbol que desembocó en una catastrófica situación. Nosotros le pedimos al Dr Hugo que nos expusiera la parte conceptual de la Seguridad Nacional y Soberanía como fundamentación de una política de Estado pero a última hora el conferencista nos modificó su enfoque para que en vez del tema original se expusiera su punto de vista sobre el Acuerdo de Paz. Respetuosos como somos de la libertad de opinión le dimos la oportunidad a nuestro amigo y expositor para que se extendiera en el tema . En ello nos ilustró sobre algunos conceptos básicos de territorio, de Estado y de soberanía, con una minuciosa relación histórica de los principales eventos en nuestra república resaltando como ha predominado la violencia como instrumento en la resolución de conflictos desde el siglo pasado. Sólo cuando cesó la vigencia de la Constitución de Rionegro y por ende la batalla entre centralistas y federalistas, comenzó a disminuir la intensidad del conflicto civil gracias a la aceptación de la constitución del 86 de Núñez que sin embargo fue impotente para evitar la generación de otras guerras intestinas como la Guerra de los Mil Días . Ello fue el caldo de cultivo para que la República fuera impotente para evitar la pérdida de Panamá por cuenta de la política del Big Stick ( Gran Garrote) del estado norteamericano . Después volvimos a perder territorio en la frontera con Venezuela con las islas de Los Monjes en desafortunado episodio del Presidente Roberto Urdaneta quien cedió ese estratégico territorio sin disparar un solo tiro y sin gastar siquiera una discusión, todo mediante una nota diplomática. Al llegar a nuestra historia actual salpicada de nuevo por la violencia partidista y atizada por la intromisión del narcotráfico en todo el tejido social, reconoce el Dr . Tovar que una situación que agravó y prolongó todo el conflicto armado fue la persistente negativa para admitir que se trataba de un conflicto armado y no simplemente la irrupción de un grupo terrorista o de bandoleros como se intentó vanamente demostrar durante muchos años. Ello fue sostenido de manera injustificada por el Dr Uribe y fue precisamente uno de los mayores enfrentamientos con el Dr Santos cuando al iniciar éste su gobierno admitió la existencia del conflicto armado y por consiguiente así se abría la posibilidad legal de entrar a negociar . Este fue un aporte valeroso del Dr Hugo teniendo en cuenta su vocería del Centro Democrático. Finalmente se planteó que las principales amenazas para la soberanía nacional provenían del diferendo fronterizo con Nicaragua y Venezuela lo cual es muy cierto pero aunque no se analizó a profundidad se explicó la cadena de errores colombianos en el manejo con Nicaragua ante la Corte de la Haya. Y a estas amenazas nuestro interlocutor agregó que para su opinión la otra gran amenaza era el Acuerdo para la Paz firmado con las Farc, basado en las implicaciones jurídicas que para La Constitución podrían significar y además en su convencimiento de que el Estado era incapaz de cumplir los compromisos adquiridos. Esta opinión fue controvertida pero respetada en el ámbito de la libre expresión que se acepta en la Tertulia. Solamente podemos agregarle que de acuerdo a la historia las grandes amenazas se pueden convertir en las grandes oportunidades, tanto para las empresas como para las naciones. Ojalá eso sea así.