Hace 67 años nació Jairo Morera Lizcano
Primer alcalde popular que tuvo Neiva. Lizcano alcanzó tal distinción al obtener 15.781 votos.

Por Jorge Eliécer Peña Artunduaga
Nieto de Bonifacio y María Felina por el lado paterno y de José Antonio y Rosario por el lado materno, hijo de Neftalí y Rosario y el mayor de sus hermanos Armando, Alberto y Miguel, se convierte en el primer alcalde de Neiva por elección popular el 1 de junio de 1988.El año próximo se cumplirán 30 años cuando venció al prestigioso abogado Diógenes Plata Ramírez (11.987 votos) y al actual gerente de Electrohuila economista e hijpo ilustre de Las Granjas (10286). El ganador alcanzó 15.781 votos.
Jairo, de ascendencia altamireña, fue hecho y moldeado al igual que sus hermanos como un buen bizcocho con cariño. Por la violencia desatada a raiz de la muerte de Jorge Eliécer Gaitán, fueron amenazados y debieron abandonar Altamira y radicarse en Florencia donde nació Jairo el 11 de mayo de 1950.A los ocho meses por un flebitis recibe tratamiento en Bogotá, sale adelante, varios famiiares desean adoptarlo pero crece con sus padres en un hogar humilde, es bautizado y su abuela Rosario y su tío Arsenio son sus padrinos. Pequeño organizaba procesiones en el mes de mayo, cargaba la vírgen y hablaba, lo hizo cuando estudiaba en la Ricardo Borrero Alvarez y continuó en la Calixto Leyva, allí termina la primaria en 1962. Entre sus compañeros recordamos a Emilioy Fernando Orozco, Salim Polanía, Guillermo Tovar, José William Torres, Daniel Francisco Alvira con quienes compartía su afición por el ciclsmo.
Egresa como bachiller del Salesiano en 1968 donde comparte aula con tres futuros alcaldes de Neiva, el negro Jorge Enrique Muñoz Guzmán y Edgar Luna Méndez nombrados decreto y Luis Alberto Díaz Méndez por elección. También fueron condiscípulos Francisco Ramirez, el exalcalde de Gigante y diputado Jorge Eliécer García Sandoval, Julio César Pascuas y Antonio María Cortés. Adelanta en la Unversidad Externado de Colombia estudios de Economía los que comparte con su actividad política que ya ejercía desde sus 18 años en las juventudes liberales.
Traigo a estas páginas el primer capítulo de mi obra sobre Jairo Morera Lizcano, me honra haberme desempeñado en su aministración como su asesor educativo.
“Regresaba de Ibagué ese 3 de enero de 1991 y al aproximarnos a Neiva, cocretamente por los lados de Busiraco escuché la voz inconfundible de Jairo Morera Lizcano. Inmediatamente le dije a Esther mi esposa y a mis hijos, murió Jairo Morera. La emisora sintonizada era Micrófono Cívico y no había duda que Jairo ya no pertenecía a este mundo pues este medio radial se caracterizó por estar muy cerca de su administración y en sus archivos reposaban docenas de grabaciones con la voz de un hijo de un padre transportador y una madre campesina- como siempre pregonaba. Cerré mis ojos y evoqué momentos al lado del exalcalde víctima de un cáncer que privó al Huila de un parlamentario, de un gobernador, de un ministro.
Lo ví como secretario general de la Cámara de Representantes atender a sus paisanos venidos de las más recónditas veredas, ayudarles a conseguir partidas importantes para acueductos, alcantarillados, educación, salud, vivienda, recreación y vías, o cuando en una sola pieza no permitió que Rocío Durcal, abandonara el coliseo sin antes cumplir con su actuación, así mismo, se le vio inaugurar el Pueblito Huilense todos nosotros vistiendo trajes típicos y orgullosas desfilando a Carmen Adriana Hennessy, Omaira Curiel, Esneira Barreiro, Maritza Polanía, Myriam Plazas, Martha Inés Alarcón, Alicia Pórtela, o también cuando se condolió por la matanza de los estudiantes de la Plaza de Tianamem, cómo no recordar acompañándonos la noche del asesinato de Galán. Desconcertado, incrédulo y estupefacto por la suerte del país.
Lo vi en el Concejo de Neiva, luchando por los intereses de la ciudad; también en la Asamblea del huila, ejerciendo como su presidente, adelantar debates siempre pensando en el desarrollo del departamento, otra acción de recordar es revisando y entregando la pavimentación del anillo vial central y la ruta de buses.
Otros recuerdos son cuando con ocho puntos de su cirugía, se dio a la tarea de entregar a punto de caer la obra en el barrio Jorge Eliécer Gaitán, entregando Mira Río y ciento de lotes con servicios y vivienda mejorada. Lo ví exclamando el 24 de mayo del año anterior dejo jirones de mi propia vida a la ciudad de mis amores. Lo ví llamando a lista en la Cámara de Representantes y cuando aspiró a ser representante exclamar a partir del 20 de julio no llamaré a lista sino que rresponderé a ella. Lo ví abrazando a Jairito y entre sus brazos tomar a María del Pilar Lo ví llamámdonos desde Bogotá en sus gestiones oficiales, leerle los titulares del Diario del Huila y la evaluación permanente de los trabajos realizados. También se le vio recorrer los centros docentes, ver con angustia la situación de los barrios marginados, la erosión en varios de elllos, el desempleo que agobiaba a la ciudad y la satisfacción del deber cumplido.
Recordé la noche del 31 de mayo cuando en compañía de su gabinete, asesores y otros amigos departimos en los Tres Barriles de propiedad de Jorge Lara Bonilla. Lo vimos con su vaso de jugo y nosotros cerveza en mano, lo apreciamos enérgicamente satisfecho con la aureola de quien cumple y confiaba en el futuro. Fue la última vez que lo ví y siempre lo recordaré con su boina.
Ocasionalmente hablamos por teléfono. All ingresaral recinto para su adios final me pareció escucharla voz dirigiéndose a mis Marías, a quienes dedicó sus mejores discursos.
La institución educativa que lleva el nombre del primer alcalde popular de Neiva, en mi calidad de asesor educativo y con el apoyo del alcalde Morera Lizcano, conseguimos con Hocol la construcción de las dos primeras aulas. Solicité al concejal Aníbal Charry González presentar un proyecto de acuerdo para colocarle el nombre del exalcalde a la Escuela La Acacias. El proyecto fue aprobado.
Hoy, la institución educativa Jairo Morera Lizcano, ubicada en la Comuna 8 está dirigida por el Licenciado José Paúl Azuero. Por esto y mucho más es que siempre estará en la memoria de los neivanos el nombre de Jairo Morera Lizcano.