El campo será protagonista de la paz: Géchem Sarmiento
Considera que el campo debe ser tan productivo para que cada vez se necesite traer menos cosas de afuera.

Jorge Parga Vanegas
Diario del Huila
Con la misión y el concepto claro de que la Agencia para el Desarrollo Rural, será el pilar fundamental del proceso de mejoramiento productivo del campo colombiano, asumió funciones el presidente de esta entidad estatal, el abogado Carlos Eduardo Géchem Sarmiento.
Su visión de académico e investigador de la problemática social del país, le permitirá fijar las metas para convertir al campo en protagonista de paz, con ventajas competitivas, seguridad y condiciones para propietarios.
Géchem ponderó las potencialidades del Huila en materia de proyectos productivos y dijo que su compromiso será trabajar con las autoridades locales y organizaciones campesinas, para contribuir igualmente a la recuperación y mejoramiento de las vías terciarias.
A instancias del DIARIO DEL HUILA, el funcionario enunció las líneas gruesas de lo que será su tarea como primer presidente de la Agencia Rural para el Desarrollo Rural.
¿Cómo concibe la política de desarrollo agrario del país frente a los retos que impone el posconflicto?
El campo va a ser el gran protagonista de la paz. Los desafíos que tenemos de cara a ese escenario son enormes. Hay que trabajar por un campo seguro, de propietarios, productivo y con cadenas de comercialización que respeten al campesino y le ayuden a crecer con competitividad. Tenemos que acercar al productor con el comercializador directo y disminuir la influencia del intermediario. Ese es un gran desafío. Tenemos que aprovechar la tecnología para que el productor sepa cuánto vale su producto, en dónde se está comercializando mejor, qué se debe producir de acuerdo con la demanda nacional e internacional y toda esa otra información que los hace competitivos y los ayude a progresar a través de la inteligencia de mercados. Tenemos que trabajar en asistencia técnica, en distritos de riego, en adecuación de tierras y en mejorar los casi 130 mil kilómetros de vías terciarias por los que salen los productos.
- En ese sentido, ¿cuál será su principal desafío en la presidencia de la Agencia para el Desarrollo Rural?
Nosotros tenemos que volver altamente productivo el campo colombiano, para hacerlo atractivo. Vamos a mirar en forma inteligente las ventajas competitivas de cada región para aprovecharlas en beneficio del país. No todos sirven para todo. En Colombia no hay tierra mala ni actividad mala lo que hay es desorientación en algunos sectores productivos. Vamos a orientar esos sectores de manera que todos ganemos.
¿Cómo será la estructura administrativa y operativa de esta entidad, y cuántas regionales se van a crear?
Será una estructura liviana y eficiente en donde prime el conocimiento y el compromiso con el campo sobre cualquier otro criterio. Buscamos conformar una entidad en la que nuestros funcionarios, además de los conocimientos requeridos y el compromiso indispensable, cuenten con altas dosis de sentido común. El campo colombiano requiere funcionarios con inteligencia, conocimiento, experiencia y sentido común.
Además de la compra de tierras, ¿qué otros frentes atenderá esta Agencia?
El gobierno del Presidente Santos decidió modernizar la estructura estatal que atiende los problemas del campo. En ese orden de ideas decidió liquidar el Incoder, que contaba con una estructura pesada y poco eficiente, y crear varias agencias. La compra y titulación de tierras quedó en cabeza de la Agencia de Tierras. La Agencia de Desarrollo Rural, es decir, en la que me encuentro trabajando, se dedica a apoyar en asistencia técnica, impulso a proyectos productivos y, en general, todo lo relacionado con la adecuación de tierras. Allí, por ejemplo, el riego es esencial, pues, el agua es la fuerza del campo.
¿Qué proyectos podrían comprometer su gestión en favor del departamento del Huila?
Tres temas esenciales. El primero es priorizar las ventajas competitivas del Huila, hay que tener claro en donde están las fortalezas. Por ejemplo, el sur del departamento tiene un potencial en frutales, café y panela o, por ponerle otro caso, en el occidente hay vocación lechera, ni que decir del potencial en piscicultura. Cuando se tiene claro eso se sabe en qué hay que invertir.
El segundo tema es una nueva concepción integral del campo. Los proyectos no pueden seguir siendo parciales, se requiere que contemplen asistencia técnica, adecuación de tierras y, por supuesto, comercialización. Los hombres y las mujeres del campo deben recibir un apoyo integral, para que puedan ser competitivos a nivel nacional y mundial.
Finalmente, el tercer compromiso es el trabajo mancomunado con las autoridades locales y las organizaciones de campesinos. Todos encontrarán una mano amiga, una entidad seria y comprometida con el desarrollo del campo. Haremos nuestro mayor esfuerzo para asistir, apoyar y llevar a buen término los proyectos que beneficien a la población rural del Huila.
Actualmente, se presenta una escasez de mano de obra en la zona rural, atribuida en parte a la mala orientación de los subsidios que el Gobierno otorga a sectores pobres de la población que van a las ciudades y se ocupan en actividades como el mototaxismo y el comercio informal, ¿qué hacer para que estas personas regresen al campo?
Si tenemos un campo seguro, en paz, con acceso a la salud y a la educación, con proyectos productivos sostenibles que generen empleo de calidad vamos a hacer un campo atractivo y con posibilidades de progreso. Eso, sin lugar a dudas, va a atraer a todos esos campesinos que han tenido que migrar a las ciudades en busca de oportunidades.
Dirigentes del sector agropecuario se quejan de que la importación masiva de alimentos como arroz, fríjol y maíz, entre otros, está perjudicando la producción nacional, ¿en ese tema, tendrá injerencia la Agencia Rural para el Desarrollo?
Ese no es un tema que directamente sea competencia de la Agencia Rural. Sin embargo, le puedo decir que nuestra misión es que el campo sea tan productivo que cada vez se necesite traer menos cosas de afuera.
Se habla que sólo el 5 por ciento de los campesinos en Colombia, tiene acceso al crédito, ¿cree que esa percepción puede cambiar con los programas de la Agencia?
La idea es que los proyectos productivos que impulsemos se apoyen en todas las posibilidades de financiación que tengamos desde el Gobierno para sacarlos adelante. Hay que trabajar en varios frentes y en colaboración con varias entidades públicas. Hay que otorgar créditos, hay que dar asistencia técnica, hay que ayudar a cofinanciar proyectos. En conclusión, hay que trabajar para poner a disposición del campesinado toda la infraestructura administrativa y financiera con que cuenta el estado colombiano.