“El fútbol colombiano está en picada, enfermo”: Esteban Jaramillo
La gente no va a los estadios algunas veces por la superposición de horarios con partidos europeos. A las 3 de la tarde juega el Barcelona y a la misma hora está jugando Alianza Petrolera con Equidad.

Más de treinta años comentando fútbol lo confirman como un experto, una autoridad en el análisis. Por eso hay que detenerse a reflexionar sobre su diagnóstico: “el fútbol colombiano (que no es la selección Colombia) está en picada, tiene muchas enfermedades, sufre un estancamiento y una época muy alarmante y difícil”.
¿Ejemplos?
Malas canchas, malos árbitros, jugadores mañosos que fingen faltas, se tiran al piso, se revuelcan, árbitros comprometidos con dudas en sus comportamientos, muchos viejos en los equipos, algunos rindiendo pero otros que se arrastran penosamente y que no se explica uno cómo no se retiran.
La gente no va a los estadios algunas veces por la superposición de horarios con partidos europeos. A las 3 de la tarde juega el Barcelona y a la misma hora está jugando Alianza Petrolera con Equidad, y obviamente la gente ve primero al Barcelona y por eso usted ve a los peladitos en la calle con la camiseta del Barcelona, del Real, de River por Teo en Argentina, la camiseta del Mónaco, y ya se ha perdido ese fervor y ese afecto por los equipos colombianos.
La Dimayor se ve obligada a hacer una reingeniería que la gente reprueba, porque parece tener más tintes proselitistas y políticos en su interior de favorecimiento a determinados equipos para llevarlos por decreto a la "A" sin que haya una sana competencia.
¿No pasa lo mismo en toda Latinoamérica?
Hay un libro que les quiero recomendar que se llama "Juego Sucio" y explica toda la podredumbre que tiene el fútbol. Tiene una entrada que es muy morbosa y hasta atractiva, dice: "Si a usted le gusta el fútbol y defiende el fútbol no compre este libro".
Resulta que ahí le cuentan a usted un montón de cosas sobre la actividad futbolística en Sudamérica y qué es lo que está pasando, hay mucha corrupción, los dirigentes tienen unos carros lujosísimos; exagero si digo que viajan en Rolls Royce pero los equipos viven quebrados.
¿No vieron al presidente de Jaguares (Nelson Soto Duque) en una foto en El Tiempo sacando pecho y mirando como prócer, mientras su equipo obligado a entrenar estaba fraguando una huelga porque no les pagaban?
¿Los males son del patrocinador?
Yo no creo hombre. Yo miro todo eso con microscopio. Yo creo que es la incapacidad de ciertos dirigentes, porque hay unos buenos y muchos bastante modestos.Se preocupan por ellos y no por los equipos. Lo que pasa es que hay dirigentes que llegan a un equipo y lo convierten en la guaca de turno, la caja menor, y se olvidan que ese equipo es de la gente y no de ellos.
Otra cosa: ¿ustedes no han notado que hay un jugador que lo señalan por borracho de un equipo, lo separan por la indisciplina en el plantel y al campeonato siguiente está en otro equipo y luego en otro y siempre se le señala por lo mismo?
¿Ustedes no han visto que hay como 14 jugadores de fútbol que están adelantando cursos como técnicos y de los 14 por lo menos el 50 por ciento han sido señalados a lo largo de sus carreras por indisciplina, por falta de seriedad competitiva, por hacer roscas, por precipitar la salida de los técnicos, por hacer paros disimulados, y van a ser los técnicos del futuro?
¿Está así de corrompido y de complicado el fútbol colombiano?
Yo no puedo asegurar qué tan corrompido, pero sí está en un estado de mediocridad muy alarmante, y lo ve usted reflejado en las asistencias a los estadios, la calidad del espectáculo.
Los técnicos dirigen como viven. "Pecoso" es un hombre trabajador, luchador, aguerrido, y transmite ese espíritu aguerrido a los jugadores, dice que no es lavaperros de nadie y no se deja mandar por periodistas y directivos.
En cambio, lo de Millonarios yo lo resumo en tres o cuatro palabras: Pobreza administrativa, incapacidad dirigencial, es lo que tiene a Millonarios en la olla.
¿Cómo volverse a enamorar del fútbol colombiano?
Es muy difícil en Colombia hacer directivos de carrera porque hoy manda el que pone la plata sobre la mesa, pero que haya mayor seriedad en eso, y que ellos se sienten serios cuando deliberen en la Dimayor y no a pelear o manejar conflictos personales.
Que busquen el saneamiento del fútbol colombiano en todas las áreas y en todas las estructuras para poder sacarlo adelante, pero eso no se logra de la noche a la mañana.
Yo me pregunto el porqué del respeto universal por Colombia, a nivel de selección, y por qué el descrédito de nuestro fútbol?
¿No hacen falta más equipos profesionales?
Aquí hay un problema muy serio, y en eso sí quiero hacer un poco de periodismo de denuncia.
"Piscis" Restrepo (técnico de la Selección Colombia Sub-20) está pidiendo que de nuevo reimpongan la normativa que implica la llegada de un jugador Sub 19 obligatoriamente en cada partido, eso lo volvieron una burla porque había casos en los cuales un jugador entraba y al minuto lo sacaban, por cumplir la norma.
Pero hay una norma que castra la posibilidad futura de los jugadores. No puede ser que en Colombia un pelado de 20 años está liquidado para el fútbol, porque hay una normativa de la Federación que hace campeonatos nacionales de menores de 19 años y los pelados de 20 que no tienen experiencia no son inscritos.
¿Cómo puede encontrar usted un chino de 20 años en la calle, buen jugador de fútbol que le diga a usted, déjeme jugar, déjeme entrenar para ver si yo puedo jugar. No, es que vamos a traer a fulano.
Es que ese es otro mal del fútbol colombiano, es que los empresarios hacen mucho daño. Entonces llega un jugador a un equipo, y cuando llega la oferta del exterior o de otro equipo son capaces los caraduras estos de decirle: "baje el rendimiento, propicie su salida, hágase odiar para podermelo llevar". Es un absurdo, cuando es que no se roban al jugador como le pasó al Quindío una vez.