Atrasado el ordenamiento de Río del Oro
La situación actual de los ríos es alarmante, por esta razón se han propuesto procesos de ordenamiento que las empresas encargadas no han ejecutado a tiempo.

Claudia Ortiz
Diario del Huila
Los últimos 17 años han sido los más calurosos de la historia. Los científicos han demostrado que los humanos somos quienes estamos provocando el temerario calentamiento global.
Frente a esta situación, muchos de los países deberán preocuparse y estar preparados para otra clase de amenazas a parte del terrorismo, ya que la sed del mundo, es algo que se avecina ligeramente y que aunque parezca increíble, gran cantidad de personas lo viven día a día sin ser tomados en cuenta por el resto de la población mundial.
Acercándonos más a lo que somos, en el departamento del Huila ha habido ciertas afectaciones que son realmente lamentables para nuestra existencia. Con el paso del tiempo y debido a la conglomerada contaminación, son varios los recursos naturales que tenemos por el momento, ya que se han ido perdiendo lugares grandiosos como lo es el caso del Volcán-nevado Puracé (Cauca y Huila); desapareció como nevado en 1940, Volcán Sotará (Cauca y Huila); desapareció como nevado en 1948, y finalmente el Volcán Pan de Azúcar (Cauca y Huila); desapareció como nevado en 1960.
En las quebradas y ríos de la ciudad de Neiva se produce contaminación por aguas servidas, producto de los asentamientos humanos a lo largo y ancho de las cuencas hidrográficas. La cascarilla de arroz arrojada a campo abierto y los desechos químicos utilizados en el control de las plagas de este cultivo, constituyen también una fuente de alta contaminación de las aguas de la cuenca del río Las Ceibas y del tramo del río Magdalena que cruza esta zona, además de esto, Neiva resulta relevante en la ciudad la progresiva contaminación del aire.
En este momento y centrándonos más en lo que se posee en la capital bambuquera, se está desarrollando lo que se llama El Plan de Ordenamiento y Manejo de la Cuenca Río Ceibas, Río del Oro y Río Frio, que pertenece al municipio de Rivera. Este ordenamiento significa que primero tiene que haber una etapa de un diagnóstico, es decir, un reconocimiento de cuál es la situación actual de toda la cuenca del río del Oro. Este diagnóstico debe hacerse desde su nacimiento hasta su desembocadura.
Este contrato fue entregado a la empresa Impro mediante la suma de 1´500.000 millones de pesos, empresa que debió entregar el proceso de ordenamiento en el mes de diciembre, claramente ya se le venció el plazo para la entrega de este plan de manejo, y hasta ahora, donde se tiene conocimiento, se está terminando la etapa de diagnóstico, lo cual quiere decir que no se ha hecho la formulación.
Existen unos recursos en los cuales las responsabilidad es hacer un diagnóstico que diga la situación de todos los problemas, fortalezas de esta cuenca, es decir, estudios de biodiversidad, estudios de suelos, estudios de zonas de amenazas y vulnerabilidad de riesgo, los conflictos por uso del suelo, los cuales están relacionados del uso del suelo por la invasión de la ronda, «ya sabemos nosotros que hay mucha población que está localizada en las áreas de ronda que sabemos nosotros que hay una normatividad, que tiene como función no solo la protección de la cuenca sino también la protección de las poblaciones», señaló la profesora Leyla Rincón, concejal de la ciudad de Neiva.
Bien se sabe hay poblaciones que no respetan estas zonas y claramente cuando estamos en épocas de invierno se ven gravemente afectadas, todas estas afectaciones solo se dan cuando no se respetan las rondas. El tema de desbordamiento, la avalancha y toda este situación y en el caso de río del Oro hay una problemática rural principalmente por el tema de deforestación.
«En la parte humana son las invasiones de zona de rondas, estos sitios que no son adecuados a la dinámica natural del río, entonces en este momento se está en ese proceso de formulación, proceso del cual informará la corporación que aunque la encarada es la empresa Impro, de todas maneras es la corporación la que tiene que hacer la veeduría y la interventoría», añadió Rincón.
La problemática definitivamente la miramos por la parte urbana, es lamentable como ha sido abordada toda la cuenca, por los asentamientos que se encuentran en el lugar, hecho que es ilegal. «Por esta razón existe también un instrumento que tiene la administración que desde el Concejo aprobábamos las políticas de asentamiento, entonces el municipio en estos momentos también está adelantando la implementación de esa política que consiste precisamente en hacer una valoración, revisión, barrio por barrio, para determinar aquellas viviendas que son leales e ilegales» puntualizó la concejal Leyla Rincón.
El objetivo de todo lo que se vienen adelantando es garantizar que el río vuelva otra vez a su retornar un poco a las condiciones de lo que en alguna época fue, es difícil volver a tener las condiciones en las que se encontraba hace 30 años.
Problemática con la empresa
La empresa Impro, debía entregar en diciembre del 2016 los resultados del trabajo, sin embargo eso no se cumplió. Desde entonces se viene de aplazamiento en aplazamiento; luego de faltar a la fecha del año pasado, pidieron dos meses más y ya es Junio y la empresa no ha hecho entrega de los reportes correspondientes.
Las autoridades correspondientes exigen a la empresa la pronta entrega de los resultados de la intervención. Dentro de esta zona de contrato están tres comunidades indígenas, lo cual quiere decir que ellos como empresa deben hacer la consulta previa, se entiende que cuando el proceso requiere ciertas exigencias como estas, el proceso se torna lento al tratar con indigentes, ya que son quienes tienen ciertas prioridades por parte del gobierno Nacional. En cambio las comunidades campesinas, las comunidades rurales, no tienen ese instrumento de protección constitucional pues esta participación no se hace con la rigurosidad que si requiere la norma para las comunidades indígenas.
El río del Oro y otras cuencas cuentan con un plan de manejo de 60.000 hectáreas o sea, que acobija otras micro cuencas que desembocan en el río magdalena es hasta río Frío, donde grandes áreas en las que se encuentran haciendas de alrededor de 200, 400 hectáreas, a esto se le suma de que con los dueños de estas propiedades no se ha trabajado y no se han tenido en cuenta, cosa que hace que el proceso participativo no haya sido tan riguroso como debe ser por razones de descuido, porque estos no han sido convocados para darles a conocer que están en un proceso de ordenamiento y debido a esto se pasan por alto hasta humedales.
Debido a esto, si no se hace un diagnóstico en detalle difícilmente se podría garantizar y definir un plan de manejo porque el objetivo de este plan de manejo es que se defina el uso del suelo, se garanticen unos planes que permitan la restauración de los ecosistemas, solución de conflictos de usos de suelo, y adicional a esto se necesita comprar unas áreas de protección, como ocurrió con la cuenca del río la Ceibas, se necesita comprar 15.000 y ya se compraron 8.000 y esa zona que ya se adquirió es realmente una zona que se está recuperando de manera positiva. Entonces eso mismo le ocurre a la cuenca del río de Oro, donde también se tiene que comprar las zonas de ronda, una granaría para dejarla exclusivamente como protección y así lograr nuevamente una recuperación del río, pero este proceso se ve muy corto para todo lo que se debe realizar.