Visibilidad y concertación ciudadana, los retos del cabildo
Las divisiones internas también han menguado el trabajo del Concejo; oponerse a ultranza o votar en bloque para salvar o hundir una propuesta dependiendo de quien la presente, da cuenta del nivel de inmadurez política y ausencia de criterio de algunos concejales; tal fraccionamiento interno alcanzó los mayores niveles en tiempos cercanos a la elección de mesa directiva 2021.

La burbuja en la que vive el Concejo de Neiva se hizo más evidente en medio de las sesiones virtuales generadas por el confinamiento obligatorio. Su distanciamiento con la ciudadanía, (que viene desde hace varios años) se agudizó durante el segundo periodo, tiempo en el que a pesar de realizar importantes debates o de dar trámite a proyectos de interés ciudadano, persiste la brecha con las comunidades de base.
Para algunos cabildantes su presencia en los barrios repartiendo mercados u ofreciendo “ayudas”, puede representar un acto de generosidad como buenos samaritanos, sin embargo, la corporación como tal sigue con el reto de entrar en la dinámica de construir ciudad a partir del liderazgo de propuestas generales de la mano de las organizaciones, gremios, prensa y comunidad, para lograr impactar contundentemente a través del trabajo normativo y de control.
Son al menos ocho años en los que la corporación vino en declive por cuenta de los escándalos de corrupción, malas prácticas y desprestigio generado por la mayoría de sus integrantes. El reto no es fácil, y el actual Concejo deberá comprometerse mucho más en optimizar su trabajo y recuperar la confianza ciudadana, en medio de condiciones tan adversas como la pandemia y la recesión económica, que dicho sea de paso, terminaron eclipsado a la mayor parte de la clase política de la región.
Las divisiones internas también han menguado el trabajo del Concejo; oponerse a ultranza o votar en bloque para salvar o hundir una propuesta dependiendo de quien la presente, da cuenta del nivel de inmadurez política y ausencia de criterio de algunos concejales; tal fraccionamiento interno alcanzó los mayores niveles en tiempos cercanos a la elección de mesa directiva 2021.
Apuestas como la modificación de su reglamento interno, no sesionar los domingos o implementar los descuentos de pago a los ausentistas, son un buen inicio. Sin embargo, estas son condiciones básicas que ya deberían estar por descontado desde hace muchos años. En esencia, la corporación debe volcar la mayor parte de sus esfuerzos a interpretar las necesidades de la ciudadanía y acompañar el Plan de Desarrollo para promover que se haga realidad. También generar una cultura de transparencia desde cada una de las acciones, procesos, intervenciones y proyectos en los que tiene que ver el cabildo, de manera que se convierta en un referente de buenas prácticas y uso eficiente de los recursos públics.