Urgen ampliar línea de crédito ‘Colombia Agro Produce’

Dignidad agropecuaria hizo un llamado al Gobierno Nacional con el fin de aumentar el cupo de crédito para medianos productores debido a la crisis que padece el país por la covid-19.

“La pandemia por coronavirus condujo al gobierno del presidente Duque y al ministerio a su cargo, a sacar una línea especial de crédito conocida como ‘Colombia Agro Produce’ con unas tasas de interés, plazos y condiciones de pago y acceso muy favorables para los productores agropecuarios”.

Asimismo, el Gobierno Nacional destinó recursos por un billón quinientos mil millones de pesos, distribuidos por cupos para pequeños ($600.000), medianos ($600.000) y grandes productores ($300.000).

“En el país, acceden al crédito agropecuario un promedio de 900.000 productores, de los cuales, unos 10.000 son grandes, 80.000 medianos y el resto pequeños productores. Los recursos para los grandes productores se agotaron rápidamente y alcanzaron para menos de 100, los de los medianos, aunque más lento en su colocación, también se agotaron y solo lograron cubrir a 1.860 productores y, el cupo de los pequeños no está cubierto aún, pero, es normal que así sea, dada la gran cantidad de ellos que lo hacen en el trascurso de varios meses. Así ha sido históricamente”.

Descrita esta situación solicitan que amplíen el cupo de crédito para que al mismo puedan acceder una gran cantidad de productores medianos que tramitaron créditos, presentaron documentos y fueron aprobados por la banca, pero, al momento de solicitar los recursos a FINAGRO, estos se habían agotado.

“Por esa razón, le estamos solicitando se dé la posibilidad a quienes tienen créditos aprobados, de acceder a esos recursos para adelantar las tareas que vienen adelantando en varios sectores café, panela, cacao, arroz, maíz, soya, sorgo y otros productos que deben tenerse a la mano el próximo semestre, para alimentar a los colombianos o para generar las divisas que tanto va a necesitar el país”.

Serias dificultades del sector

De otro lado, el pasado 18 de mayo el Comité Ejecutivo Nacional de Dignidad Agropecuaria Colombiana sostuvo una reunión con el ministro de agricultura Rodolfo Zea Navarro. 

“En dicha reunión se habló sobre créditos, deudas y las dificultades del sector agropecuario frente a la pandemia del Covid-19. Uno de los temas que trató, además de lo anterior, fue la preocupación con las importaciones de papa pre frita congelada, que podrían llegar desde países como Bélgica, y que hacen parte del TLC suscrito con la Unión Europea”.

La preocupación del sector agro son las importaciones de papa pre frita congelada, que podrían llegar desde países como Bélgica.

El ministro aseguró no tener noticias de contingentes de papa que pudieran competir con la producción nacional.  Sin embargo, hace algunos días el gerente de Fedepapa, Germán Palacio, alertó sobre la importación de papa desde Bélgica, que llegaría a competir con la producción nacional. 

“El año pasado Colombia importó 54.000 toneladas de papa pre frita congelada, que equivale a 135.000 toneladas de papa fresca. De mantenerse la tendencia, si en este 2020 ingresaran las 65.000 toneladas previstas por Fedepapa, se estarían desplazando 160.000 toneladas de papa producida por campesinos colombianos”. 

La producción de papa en Colombia se realiza, en su mayoría, por pequeños productores. Se estima que 100.000 agricultores siembran 125.000 hectáreas concentradas en su mayoría en los departamentos de Cundinamarca, Boyacá, Nariño y Antioquia; que, además, al inicio de la pandemia, tuvieron que soportar precios de ruina en la venta del producto y hoy están agobiados por las deudas que no dan espera.  

“Con el ingreso de la papa belga, los especuladores hacen su ‘agosto’, pues tienen la excusa perfecta para reducir precios -que en muchas ocasiones ni siquiera permiten la recuperación de los costos de producción- y que termina afectando a la mayoría de los paperos que venden su producción en las plazas de mercado y están a merced de la oferta y la demanda y la especulación”.  

La pandemia ha puesto en graves dificultades a los papicultores que producen más de 2,7 millones de toneladas; cifra suficiente para abastecer el mercado interno de papa fresca y la demanda de la industria y que, pese a las adversidades, siguen produciéndose. 

“Las cifras oficiales muestran que el consumo de alimentos de los colombianos ha disminuido debido a la crisis de ingresos.  Este fenómeno no es solamente colombiano, hace parte de un fenómeno mundial, muestra de ello, es que se estima que Bélgica tiene un 1 millón de toneladas para la exportación, papa que no ha podido vender y que puede usando el TLC con la Unión Europea poner, en parte, en Colombia. Sería un desastre para los papicultores si el gobierno acepta que sea el país el que termine siendo receptor de parte de esa producción”.  

Finalmente, indican que no es posible que en medio de la crisis se beneficien y abran las puertas a las importaciones, cuando el país cuenta con trabajo y productos suficientes para alimentar a Colombia.

“Urge renegociar los tratados de libre comercio, de manera que, si vamos a relacionarnos con el mundo, sea en condiciones de beneficio mutuo, y no solo para ganancia de importadores y especuladores con los alimentos.  La primera medida para salvaguardar el ingreso y las condiciones de vida de los papi-cultores es evitar el ingreso de importaciones de papa desde Europa o de cualquier país que amenace nuestra producción”.