miércoles, 10 de septiembre de 2025
Regional/ Creado el: 2020-10-10 06:46

Ronaldo, el drama de un desempleado en plena pandemia

El covid-19 llegó al departamento del Huila dejando diferentes afectaciones, uno de ellos es el duro escenario que tuvo que vivir Ronaldo y su familia luego de quedar desempleado, pues toda su vida se dedicó a ser conductor de buses intermunicipales.

La pandemia del covid-19 trajo muchas consecuencias, una de la más grande es el desempleo. (Imagen representativa)

Escrito por: Redacción Diario del Huila | octubre 10 de 2020

Catalina Durán Vásquez

La pandemia del covid-19 trajo muchas consecuencias, una de la más grande es el desempleo, sobre todo en Neiva que sigue siendo la ciudad con más desempleo en el país.

Consecutivamente Neiva ostenta el primer lugar a nivel nacional en desempleo. Registró durante el trimestre móvil junio – agosto 34,0 puntos porcentuales p.p., al aumentar su tasa en 19,9 p.p. en comparación con el periodo del 2019, de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE.

Durante junio-agosto, en Neiva la tasa de informalidad registró 48,2%, es decir -5,8 p.p.; y presentó la tasa más alta de desempleo juvenil 46,1%, +23.9 p.p. (hombres: 42,2%-mujeres: 50,7%).

Decidió irse a realizar labores de agricultura a la finca de su padre. (Imagen representativa)

Para Ronaldo Suarez* la situación ha sido muy difícil pues llevaba más de 10 años trabajando como conductor de buses intermunicipales y la pandemia del covid lo dejó sin su trabajo, primero porque el sector transporte quedo totalmente paralizado y muchos de ellos fueron despedidos porque no había como seguir pagándoles su sueldo.

“Es muy triste está situación, toda mi vida me he dedicado a manejar bus y de un momento para otro quede sin nada, sin cómo alimentar a mi familia, yo siempre le he pagado los estudios a mis hijos y ahora no tuve como, es bastante desalentador…además, tengo obligaciones con los bancos y aunque al inicio dieron algunos plazos ya todas las cuotas se me acumularon, no sabía que ponerme hacer, los patrones decidieron no seguir contando con mis servicios pues no había como pagarme”, sostuvo Suarez.

Con el transcurrir de los días, Ronaldo decidió irse para la finca de su papá ubicada en el municipio de El Pital a realizar trabajos de agricultura para ver que le podía mandar a su familia que quedó en Neiva a la espera de buenas noticias.

Ronaldo y su familia ya llevan más de 3 meses viviendo de las tareas del campo. (Imagen representativa)

“Yo estaba muy desesperado, así que decidí irme para donde mi papá a ver que ingresos podía generar, mi papá ya estaba muy acabado con los años, aparentemente se veía bien, estuve casi un mes ahí con él, cuando de un momento para otro mi papá se agravó y lamentablemente murió, fue un dolor muy grande, cuando por fin pensé que las cosas se estaban mejorando, Dios decidió llevarse a mi papá”, dijo Ronaldo.

La partida de su papá fue uno de los momentos más dolorosos para su vida, pues siempre estaba pendiente de su padre aunque ya no viviera con él, Ronaldo ya no sabía que hacer pues se fue a buscar a su padre para encontrar un refugio y días después solo había soledad absoluta en la finca.

En ese momento Ronaldo decidió hablar con su familia para que todos se fueran a vivir a la finca, pues el ahora sentía que debía hacerse a cargo del rancho que había dejado su padre.

“Yo hablé con mi esposa y mis dos hijos para que nos fuéramos a vivir al rancho que era de mi papá pues él ahí tenía unos cultivos de café y alguien tenía que hacerse cargo de eso, al momento de hacerles mi propuesta ninguno estuvo de acuerdo, pero al final mi familia entendió y se trasladaron conmigo para la finca, al principio fue muy duro pues ellos siempre han estado acostumbrados a la ciudad y de un momento para otro tener que acoplarse al campo, fue difícil…”, indicó.

Ronaldo y su familia ya llevan más de 3 meses viviendo de las tareas del campo, aunque el sector transportador ya se reactivó casi en su totalidad por ahora el seguirá haciéndose cargo de la finca que dejó su padre, y esperan en algunos meses poder regresar a la ciudad.

“Yo creo que este resto de año estaré aquí en el rancho, las cosas han ido mejorando poco a poco, aunque no como me lo esperaba pero hay que afrontar la realidad, la cosecha fue buena y me dejó algunos ahorros para poder seguir brindándole el próximo año estudio a mis hijos, pues sueño con verlos graduados en la carrera profesional que cada uno escogió”, sostuvo.

El próximo año él espera volver a la ciudad a buscar mejores condiciones de vida, a que sus hijos continúen con sus estudios, cumplir con los compromisos bancarios los cuales no ha podido suplir durante estos meses de pandemia; como también buscará la forma de poder estar pendiente de la finca en la que vivió por tantos años su padre y que en tiempo de pandemia fue la que le permitió no tener que pasar por necesidades más grandes en su hogar.