sábado, 19 de julio de 2025
Regional/ Creado el: 2014-04-03 09:07

Ahorro programado para morirse

Enterrar un muerto en Pitalito se constituye en toda una odisea para las familias de bajos recursos por el aumento en los precios de tumbas en tierra en el único sitio autorizado: “el Parque Cementerio el Campanario”.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | abril 03 de 2014

A partir de los primeros días del mes de abril, “solo los ricos tienen derecho a morirse en Pitalito”. Todo por el aumento en los costos exequiales que subieron un 400%  en el arrendamiento por cuatro años de la tumba  más económica en el único campo santo habilitado, con el que cuenta la segunda ciudad del departamento del Huila, el parque cementerio “El Campanario” que pertenece a  empresarios privados.

A partir del 1 de abril, la tumba en tierra más económica ubicada en sitio destinado para los NN en medio de un guadual y con la posibilidad de inundación tiene un costo seiscientos  mil pesos y la más costosa ubicada al lado de la capilla tiene un valor de siete millones de pesos.

De acuerdo con voceros de las empresas funerarias, lo que implica el entierro con la ubicación del cuerpo  en el sector de los NN tendría un costo de dos millones de pesos, precios que  ponen en aprietos a los familiares del fallecido para conseguir los recursos porque además del dolor y la tristeza por la muerte de un ser querido, se tiene que acudir a la solidaridad para darle “Un entierro digno” a la persona fallecida.

 

No hay alternativas

Atendiendo  fallo  de acción de tutela del Juzgado Tercero Administrativo de Neiva, la Administración Municipal de Pitalito emitió la Resolución 253, a través de la cual se ordena el cierre definitivo y se prohibieron la inhumación de cadáveres en el viejo cementerio de propiedad de la parroquia de San Antonio de esta ciudad, único cementerio público.
Aplicando la medida desde el mes de abril del 2013 no se pueden realizar entierros de cadáveres en ese lugar,  se autoriza únicamente la realización de visitas, labores de mantenimiento y acciones judiciales que no tengan relación con inhumación de más cuerpos.

Muchas personas compraron tumbas en concreto en el cementerio de la parroquia San Antonio pero a raíz de la orden judicial no pueden utilizarlas.

Así las cosas en Pitalito no hay alternativas al momento de morirse, todos tienen que ir a parar al parque cementerio “El Campanario” que es una empresa privada.

Frente a este oscuro panorama, la comunidad reclama acciones por parte de la administración municipal, que permitan la apertura  de un cementerio público que brinde a bajo costo condiciones dignas para las personas de bajos recursos de Pitalito, sin endeudarse, acudir a créditos o la limosna puedan enterrar  sus muertos.

Diario del Huila conoció que los cementerios de los municipios de Isnos y Timaná están ad portas  de ser cerrados tras comprobar el impacto nocivo de contaminación producto de lixiviados por la descomposición de los cadáveres.