Primera Semana Santa en La Plata con beato
La imagen del padre Pedro María Ramírez, ha causado un gran fervor del catolicismo en la Villa de San Sebastián.

Desde el ocho de septiembre del 2017, fecha en la que fue beatificado por el papa Francisco el sacerdote huilense Pedro María Ramírez, en la ciudad de Villavicencio, miles de feligreses han visitado los restos del Mártir de Armero, que yacen en una urna de cristal en la parroquia San Sebastián del municipio de La Plata.
Por estos días de reflexión, sin duda alguna el número de fieles ha aumentado de manera considerable, muchos porque han dado testimonio de milagros que han recibido por intermediación del beato Pedro María Ramírez, mientras que otros por curiosidad acuden a observar los restos del mártir.
Los devotos del presbítero Ramírez Ramos, aprovechan esta Semana Mayor, para elevar sus peticiones en busca de un milagro, peregrinos que se han desplazado desde varias regiones del país, quienes han seguido los testimonios relatados por centenares de católicos que hoy gozan de favores recibidos por el beato.
Fernando Floriano, párroco administrativo de la iglesia de San Sebastián de La Plata, Huila, es uno de los sacerdotes que ha vivido en carne propia aquellos testimonios y milagros, de muchos devotos, prodigios que ha hecho crecer la fe católica, no solo de los huilenses, sino de muchos colombianos que visitan de manera constante las reliquias del padre Pedro María Ramírez.
“Nosotros somos privilegiados con la beatificación del padre Pedro María Ramírez, el fervor ha crecido y eso significa que cada día nuestros files buscan de Dios, los milagros que he podido escuchar de nuestros feligreses por intermediación del beato Pedro María Ramírez, son testimonios que llegan al alma, que nacen del corazón de los que han recibido favores” relató.
Para concluir, por estos días de la Semana Mayor, la parroquia San Sebastián del municipio de La Plata, considerada la cuarta ciudad del Huila, ha diseñado una programación especial para conmemorar la vida, el calvario y la muerte a la que fue sometido por el Imperio Romano, el rey de los judíos, Jesús de Nazaret.