Podrá seguir trabajando al lado de su hija con síndrome de Down
María del Carmen Muñoz, fue una de las beneficiarias de 2 millones de pesos para su unidad productiva, la cual le otorgó ayer el Fondo Crear.

María del Carmen Muñoz, es una desplazada por la violencia del departamento de Putumayo. Desde allí surgió la idea de ser comerciante de ropa y lencería, por la necesidad de estar siempre en la casa acompañando a su hija con síndrome de Down, pues requiere de atenciones y cuidados necesarios por su condición congénita.
En sus inicios, invirtió 1 millón de pesos para comprar ropa en las fábricas de la ciudad de Bogotá y posteriormente venderla a sus amigos y demás personas que conocían el local, ubicado en su propia casa porque no podía aceptar otras ofertas de empleo para no descuidar a su pequeña hija.
“Me siento muy satisfecha de estar haciendo mi trabajo desde casa y poder ver a mi niña allí”, aseguró.
Materiales nacionales
Actualmente, María del Carmen ya no revende, sino que diseña exclusivamente toda la ropa y lencería como blusas, vestidos, toallas de todos los tamaños, bordados, salidas de baño, entre otras y los manda a coser a satélite – personas que cosen al por mayor-.
Los materiales como tela y accesorios, los compra en Bogotá de muy buena calidad y 100 % colombianos, porque ella afirma que hay que apoyar la mano de obra del país.
“No me gusta nada que tenga que ver con la China o de otro país, porque el cliente exige calidad, que no se le destiña la prenda y que no le salga mota. Las personas se sienten satisfechas con uno”, dijo.
Aprendió a ser empresaria
María del Carmen manda hacer el trabajo en talleres porque no tiene los recursos económicos para comprar una máquina de coser, una bordadora y una fileteadora para hacer esa labor, y de esa manera ampliar más su emprendimiento.
Debido a las necesidades en equipos para su trabajo, conoció y se inscribió en el Fondo Crear, un programa dirigido para personas vulnerables que no cuentan con oportunidades de acceder a un crédito. Allí, los instructores del SENA le brindaron bases para fortalecer su negocio como atención al cliente, como incursionar en plataformas digitales, innovar y rediseñar una prenda.
Ayer ella recibió una gran noticia: fue una de las personas con unidades productivas que fueron beneficiarias del préstamo a una tasa de interés del 0,95 mensual a través de Infihuila y la Secretaría TIC y Competitividad de la Alcaldía de Neiva.
Para comprar equipos
“Este fondo, especialmente diseñado para personas vulnerables que no cuentan con oportunidad de acceder a un crédito, muchas veces caen en el ‘gota a gota’, que lo que hacen es aprovecharse del esfuerzo y el trabajo de la gente de bien”, sostuvo el alcalde de Neiva, Rodrigo Lara Sánchez.
A la entrega de los créditos asistió con su hija Jhoana Rocío Zapata Muñoz, la que siempre está a su lado en cualquier circunstancia y recibió por parte del mandatario el cheque de 2 millones de pesos, recursos que serán invertidos en una máquina de coser.
“Estoy muy agradecida con el alcalde que hizo esa capacitación porque no sabía llevar bien la contabilidad, cómo innovar, cómo hacer otras cosas importantes para mi unidad productiva”, indicó María del Carmen.