OMS advierte que el mundo entró en “nueva y peligrosa fase” de la pandemia
El director general del organismo indicó que “mucha gente está evidentemente cansada de quedarse en casa" y los países están deseosos por reabrir la economía, pero remarcó que el coronavirus "se sigue esparciendo con velocidad, todavía es mortal y mucha gente todavía es vulnerable”

La Organización Mundial de la Salud alertó que el mundo entró en una fase peligrosa de la pandemia de coronavirus, a medida que reabren los países que establecieron medidas de confinamiento o restricciones para frenar la propagación de la enfermedad.
“El mundo entró una fase nueva y peligrosa”, declaró el jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una conferencia de prensa virtual. El dirigente explicó su preocupación por el levantamiento de las medidas.
“Mucha gente está evidentemente cansada de quedarse en casa. Los países están deseosos de reabrir su sociedad y su economía. Pero el virus se sigue esparciendo con velocidad, todavía es mortal y mucha gente todavía es vulnerable”, repasó.
Las muertes reportadas por COVID-19 superaron ayer las 450.000 en todo el mundo, según el recuento diario la organización.
Tedros subrayó que la pandemia se está acelerando y destacó que este jueves se reportó un nuevo récord de nuevos casos, con más de 150 mil contagios confirmados a nivel mundial, que llevan el total a más de 8,3 millones de diagnósticos positivos. Más de la mitad de los nuevos casos provinieron del continente americano.
“Las medidas de salud pública que reducen la transmisión requieren una implementación estricta y sostenida. La COVID-19 ha demostrado que nadie está a salvo hasta que todos estemos a salvo”, indicó.
Ante el descenso de casos en Europa y varias ciudades de Estados Unidos, varias autoridades han emprendido las medidas de desconfinamiento, pero dichas decisiones también han sido tomas en regiones donde la curva todavía está en aumento.
Rastreo
El director de la OMS pidió a los países que se enfoquen en los pilares básicos contra la pandemia: rastreo de casos, aislamiento, testeo y cuidado de cada paciente.
Las muertes reportadas por COVID-19 superaron ayer las 450.000 en todo el mundo, según el recuento diario la organización.
De la docena de países más afectados, la curva más preocupante es la de India, que continúa su tendencia ascendente y hasta ahora ha reportado 380.000 casos, con un aumento diario de 13.500 personas infectadas.
Brasil es el país con el mayor número diario de casos confirmados, que en la víspera fueron más de 32.000, una tendencia que si prosigue le hará alcanzar el millón de infecciones este fin de semana.
El segundo récord de casos diarios corresponde a EEUU, con más de 23.000 en la última jornada.
Un hombre reacciona junto el ataúd de su padre, que murió de la enfermedad coronavirus (COVID-19), antes de que lo entierren en el cementerio de Vila Formosa, el más grande de Brasil, en Sao Paulo.
Pandemia imparable en Brasil
Entre tanto, Brasil superó ayer el millón de casos diagnosticados del nuevo coronavirus, al llegar a 1.032.913, con un récord de más de 54.000 contagios en las últimas 24 horas, informó el Ministerio de la Salud.
El número de decesos en el segundo país más afectado del mundo por la covid-19 alcanzó los 48.954, con 1.206 desde el jueves, precisó el ministerio en su balance diario.
El récord anterior de casos diarios era de 34.918, el 16 de junio. Pero según una nota oficial del ministerio, el número vertiginoso de este viernes (54.771) se debe a “una inestabilidad en la rutina de exportación de los datos reportados” por las secretarías regionales de Salud.
Por otra parte, este es el cuarto día consecutivo en el que se registran más de 1.000 muertos en 24 horas.
Con esos números, Brasil igualó a Estados Unidos en la penosa estadística de coronavirus, que los tiene como únicos países en el mundo que han superado el millón de contagios y, en ambos casos, con la pandemia aún en plena expansión.
En Brasil, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la situación es más grave, pues la pandemia aún no cede y el país está próximo del invierno austral, un período en que circulan todas las enfermedades respiratorias estacionales que, sumadas al COVID-19, pueden agravar la situación hospitalaria.
Brasil sigue siendo el segundo país más afectado del mundo, por detrás de Estados Unidos, que, según estadísticas de la Universidad Johns Hopkings, una referencia sobre la evolución del coronavirus en el mundo, tenía al día de hoy 2,21 millones de casos confirmados y 118.967 fallecidos.
El millón de casos en Brasil fue superado cuando se cumplen 100 días del momento en que la OMS declaró oficialmente la pandemia, el pasado 11 de marzo.
Brasil tenía entonces apenas 52 enfermos confirmados y la primera muerte fue registrada una semana después.
Desde marzo, la escalada ha sido virulenta, si bien ahora muchos especialistas creen que la pandemia comienza a estabilizarse.
Sin embargo, esa estabilización se da por encima de los 1.000 muertos por día y sin señales de que vaya a comenzar el descenso de un pico que, en el caso de Brasil, algunos expertos señalan que en realidad será más parecida a una “meseta”, la cual será atravesada a lo largo de algunas semanas.
De todos modos, por las propias dimensiones de Brasil, en cuyo territorio cabe casi toda Europa, y por las diferencias climáticas entre sus estados, los científicos coinciden en que habrá distintos picos regionales y no solamente uno a nivel nacional.
El número relativo de fallecimientos es de 233 por millón de habitantes (frente a 358,8 en Estados Unidos), pero con fuertes disparidades regionales.
En números absolutos, Sao Paulo es el estado con más muertos (12.232), con un promedio de 266 por millón de habitantes. Le sigue Rio de Janeiro con 8.595 fallecidos, aunque es el primero en términos relativos (498 por millón de habitantes).
Otros estados del norte y del nordeste se sitúan encima de los 400 muertos por millón de habitantes.