Neivanos quedaron nadando en las calles
Varias vías de la capital del Huila, colapsaron por la lluvia que se generó en horas de la madrugada y parte de la mañana de ayer.

Durante las horas de la mañana de ayer, era común ver motocicletas y automóviles varados en las calles de Neiva debido a las inundaciones que se generaron en diversos puntos de la capital huilense.
La carrera Primera ubicada en la Comuna Uno de la ciudad, hizo pasar un mal rato a quienes habitan, trabajan o estudian allí debido a la gran cantidad de agua que abarcaba la vía y que les impedía movilizarse con tranquilidad.
Las mujeres que salían maquilladas, arregladas y en tacones, tuvieron que dejar a un lado la vanidad para meter los pies dentro del agua sucia que cubría la calle para lograr tomar la ruta de bus que les servía. Los hombres que iban en sus motos, llegaron a su destino con gran parte de su vestimenta empapada y algunos, en el peor de los casos no alcanzaron a llegar pues su moto se apagó a la mitad del camino.
Los carros que transitaban a gran velocidad, llenaban de agua estancada a los que se escampaban de la lluvia en los andenes y esperaban la ruta de bus que necesitaban, los que iban a una velocidad prudente, corrían de riesgo de quedarse en medio del aguacero y del rio que pasaba por debajo de sus automóviles.
La misma situación se vivía debajo del puente elevado del barrio Los Cámbulos, donde varios carros quedaron parados por la cantidad de agua que hacía imposible el paso, algunas motos se apagaron y decenas de personas tuvieron que bajarse y empujar su medio de transporte para esperar a que el motor se secara.
Los motociclistas debían levantar sus pies para no llenarse de agua, mientras que varios policías prevenían a quienes pretendían tomar esta vía sobre la gravedad del asunto pues hasta tarros de plástico flotaban en las intensas aguas que cubrían el pavimento.
Alcantarillas rebosadas, sistemas de evacuación de aguas lluvias tapados y probablemente, vías mal diseñadas, son algunos de los problemas que aquejan a los habitantes de la capital del departamento del Huila cada vez que llueve. Este hecho trae consigo inconvenientes para movilizarse, transportarse y hasta para manejar sus vehículos particulares por las inundaciones que se presentan en las vías neivanas.