Llantas obsoletas invaden calles de Neiva
Son decenas de neumáticos los que ya cumplieron su vida útil y han sido “tirados” en los separadores ubicados en la avenida Circunvalar.

A la altura de la avenida Circunvalar con carrera 2 A, algunas de las personas que desempeñan sus labores, se encuentran incomodos por la cantidad de llantas que han sido abandonadas en el separador ubicado en este punto de la ciudad y que no han tenido desde hace varios meses una disposición especial para ellas.
Algunas de las personas que trabajan en el sector, expresaron que varios “talleres de la cuarta” son los responsables de esta amenaza al medio ambiente que al parecer lleva cerca de 3 meses en este punto de la ciudad.
Criaderos de zancudos, contaminación ambiental y que no haya una disposición específica en la capital huilense para este tipo de desechos, son algunas de las acciones que preocupan a quienes tienen cercanía con estos neumáticos de motos, vehículos y bicicletas que sin dejar rastro, fueron depositadas allí sin tener un culpable exacto.
Así mismo, se pudo evidenciar como en algunos tramos del río Magdalena también hay varias llantas desechadas que se encuentran llenas de bolsas plásticas, basura y agua, lo cual puede significar un foco importante de reproducción de ratas y zancudos como el transmisor del dengue y el virus del chikunguña, el cual se encuentra en por estos días generando preocupación en la población colombiana.
Germán Darío Rodríguez, secretario de Medio Ambiente, expresó que “no está permitido hacer este tipo de acumulaciones en ningún punto de la ciudad” pues quienes comercializan llantas deben tener convenio con otras empresas dedicadas a la recolección de neumáticos usados.
Según el artículo 15 de la Resolución 1457 del 2010, se impuso a las autoridades municipales y ambientales, en el ámbito de sus competencias, el deber de:
a) "Fomentar el aprovechamiento y/o valorización de llantas usadas.
b) Apoyar el desarrollo de programas de divulgación y educación dirigidos a la comunidad y de campañas de información establecidas por los productores, con el fin de orientar a los consumidores sobre la obligación de depositar las llantas usadas según los sistemas de recolección selectiva y gestión ambiental".
Del mismo modo, el artículo 66 la Ley 99 de 1993, dispone que las autoridades municipales, distritales o metropolitanas tendrán la responsabilidad de efectuar el control de vertimientos y emisiones contaminantes, disposición de desechos sólidos y de residuos tóxicos y peligrosos, dictar las medidas de corrección o mitigación de daños ambientales y adelantar proyectos de saneamiento y descontaminación.
Por lo anterior, la comunidad neivana no tiene conocimiento acerca de cuál es el punto de la ciudad adecuado para hacer la disposición final de este tipo de desechos, “porque hasta Ciudad Limpia pasa por acá y no se llevan esas llantas” manifiesta uno de los trabajadores de la avenida Circunvalar con carrera 2 A donde se encuentra el mayor número de neumáticos abandonados.
¿Cómo contaminan las llantas usadas?
Riesgo de incendio. Un incendio de llantas puede causar impactos adversos al medio ambiente y a la salud pública, por los compuestos que las conforman. Una vez que se están quemando las llantas es difícil apagar el incendio. La combustión incontrolada de las llantas a temperaturas relativamente bajas (menos de 1092°C) tiende a producir cantidades importante de hidrocarburos no quemados (humo negro espeso) y emisiones nocivas para la atmosfera y la calidad del aire de la ciudad. Se han identificado 38 compuestos emitidos al aire, con un potencial dañino debido principalmente a la exposición a hidrocarburos, metales, gases y vapores inorgánicos.
Se ha demostrado que las emisiones al aire, provenientes de la quema de llantas a cielo abierto son muy tóxicas, incluso muta génicas, ya que incluyen contaminantes tales como partículas, monóxido de carbono (C0), bióxido de azufre (SO2), óxidos de nitrógeno (NOx),compuestos orgánicos volátiles (COV), hidrocarburos aromáticos polinucleares (PAH), dioxinas, furanos, cloruro de hidrógeno, benceno, bifenilos policlorados (PCB) y metales como arsénico, cadmio, níquel, zinc, mercurio, cromo y vanadio.
Además se pueden generar cantidades significativas de líquidos y sólidos con contenidos químicos dañinos derivados de la fundición de las llantas, que pueden ser potenciales contaminantes del suelo, agua superficial y subterránea.
Proliferación de fauna nociva. La definición de fauna nociva se aplica a aquellas especies animales, que por condiciones ambientales o artificiales (provocadas por el hombre y sus acciones), incrementan su población llegando a convertirse en plaga, vectores potenciales de enfermedades infecto-contagiosas o causantes de daños a las actividades o bienes humanos al no poder ser regulada por mecanismos naturales. Este tipo de fauna prolifera en lugares donde se han alternado ecosistemas y existen pocas o nulas condiciones de salud.