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Internacional/ Creado el: 2019-11-12 12:05 - Última actualización: 2019-11-12 12:06

México concede asilo político a Evo Morales

El anuncio lo hizo ayer el canciller mexicano, Marcelo Ebrardm, quien aseguró que recibió la solicitud formal y verbal de Morales.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | noviembre 12 de 2019

El gobierno de México informó ayer que concedió asilo político a Evo Morales, quien renunció a la presidencia de Bolivia el domingo; el alto funcionario mexicano indicó que el país azteca se lo concedía por considerar que "su vida y su integridad corren peligro", anunció el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.

La ministra del Interior "Olga Sánchez Cordero ha decidido concederle asilo político al señor Evo Morales (...) su vida y su integridad corren riesgo", agregó Ebrard.

El canciller añadió que el gobierno mexicano aceptó el pedido "por razones humanitarias" de manera inmediata y por considerar que "la vida e integridad" física del político boliviano corren riesgo.

Explicó que el gobierno mexicano informará al Senado sobre la situación en Bolivia y que se notificará al Ministerio del Exterior de Bolivia de la oferta de asilo con el objetivo de conseguir el salvoconducto para que Morales viaje a México.

Ebrard declinó responder preguntas de la prensa sobre cuándo sería probable que Morales viaje a México y si el gobierno mexicano estaría enviando un avión oficial a Bolivia.

Por lo pronto, estructurar un gobierno provisional es la misión que tiene en sus manos el Senado de Bolivia, donde el partido del expresidente Evo Morales posee mayoría plena, tras haber presentado renuncia tanto este como las demás autoridades que formaban la cadena de sucesión constitucional.

La Constitución boliviana establece que la sucesión recae inicialmente en el Vicepresidente de la República, luego en el titular del Senado y después en el titular de la Cámara de Diputados, pero todos ellos renunciaron con Morales.

El principal escollo para elegir al sucesor provisorio de Morales es que los opositores que presionaron por su renuncia no tienen los senadores necesarios para instalar una sesión en la cámara alta.

En ese órgano legislativo el Movimiento Al Socialismo (MAS, el partido de Morales) cuenta con 25 senadores frente a 11 pertenecientes a una variopinta oposición.

Para elegir Presidente provisorio el Senado tiene que reunir primero quórum, es decir, de acuerdo a su reglamento interno, la mitad más uno de los 36 senadores, es decir 19 legisladores.

La idea de los abogados del movimiento civil que presionó la salida de Morales, como el constitucionalista Luis Vásquez, es instalar la sesión y “en tiempos de crisis, como estamos viviendo, la sucesión se aplica ipso-facto al siguiente, no necesita ni de una ley ni de una resolución basado en un principio de continuidad”.

Como “no puede existir vacío de poder”, lo que corresponde es que “directamente” debe asumir la senadora Jeanine Añez, que forma parte de la oposición a Morales, como presidenta del Senado y, consecuentemente, como presidenta de Bolivia, según el concepto de sucesión constitucional.

Añez reivindicó su derecho a asumir la presidencia de Bolivia. “Ocupo la Segunda Vicepresidencia y en el orden constitucional me correspondería asumir este reto con el único objetivo de llamar a nuevas elecciones”, afirmó en entrevista a la televisora privada Unitel.

La dimisión del vicepresidente Álvaro García; de la presidenta del Senado, Adriana Salvatierra; y del titular de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, provocó evidentemente un vacío de poder en el país.

La incógnita de quién sucederá en la presidencia a Morales podría tardar en ser develada, como están puestas las cosas.

No cede tensión

La renuncia de Morales dejó a Bolivia entre el vacío de poder y la pelea por la sucesión.

La secretaría general de la OEA rechazó "cualquier salida inconstitucional" y reclamó al Poder Legislativo tomar cartas en el asunto de cara a la organización de nuevos comicios tras los realizados el 20 de octubre, impugnados por la oposición y por el organismo regional con sede en Washington.

La oposición denunció un fraude electoral tras la interrupción abrupta de la publicación de los resultados del escrutinio de conteo rápido en momentos en que comenzaban a anticipar una segunda vuelta, creando una situación de facto en Bolivia a partir de aquel momento.

En un comunicado, la oficina del secretario general de la OEA, Luis Almagro, pidió al Poder Legislativo de Bolivia reunirse "en forma urgente" para "asegurar el funcionamiento institucional y nombrar nuevas autoridades electorales que garanticen un nuevo proceso electoral".

Morales envió ayer un tuit desde la región cocalera del Chapare donde se encuentra refugiado en el centro del país desde su sorpresiva dimisión el domingo, horas después de convocar a nuevas elecciones ante las irregularidades electorales "graves" denunciadas por los observadores de la OEA. Acusó de "racistas y golpistas" al exmandatario Carlos Mesa y al líder regional de derechas Luis Fernando Camacho.

El exmandatario aymara de 60 años enfrentó una avalancha de renuncias de altos funcionarios, en algunos casos después de que les quemaran sus casas, y la presión decisiva de militares y policías, que acabaron reclamando su dimisión.

En La Paz hubo menos bloqueos en las calles que en días precedentes, pero también escaso servicio de transporte público. La red de teleféricos quedó paralizada, lo que obligó a miles de trabajadores a caminar largas distancias para llegar a sus trabajos.

Muchos comercios permanecieron cerrados por temor a los saqueos que se desataron la noche del domingo en algunos barrios de la zona sur de La Paz y en la vecina ciudad de El Alto.

Tras la renuncia de Morales, la policía detuvo a la presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), María Eugenia Choque, y a otros responsables de ese órgano por orden de la Fiscalía, que investiga irregularidades cometidas en las elecciones.

"Al momento tenemos 25 aprehendidos" entre miembros del Tribunal Supremo Electoral y los tribunales electorales regionales, por órdenes emitidas por la fiscalía, indicó el comandante de la policía, general Yuri Vladimir Calderón.