Lustradores continúan padeciendo la crisis que ha dejado la pandemia
Alrededor de 14 lustradores en Neiva han tenido que vivir meses difíciles a raíz de la pandemia del covid-19, pues anteriormente sus ingresos diarios eran de 35.000 mil pesos, hoy en día no superan los 12.000, mantienen la esperanza de que el panorama de su oficio mejore con el pasar de los días.

Catalina Durán Vásquez
Los habitantes y visitantes del Parque Santander en Neiva solían visitar los lustre zapatos que se ubican en este lugar, pero desde que llegó la pandemia, es decir hace más de 7 meses su situación ha sido bastante compleja pues su único sustento es el que puedan lograr en el día brillándole los zapatos a los transeúntes del Parque.
Rodrigo Montenegro Rodríguez, un hombre humilde, dedicado hace más de 36 años a lustrar zapatos en Neiva, de los cuales hace 26 años lo hace en la caseta del parque Santander expresa el difícil panorama que vive hoy en día más de 14 familias que viven de esta profesión.
Alrededor de 14 lustradores en Neiva han tenido que vivir meses difíciles a raíz de la pandemia del covid-19. (Foto archivo)
“En este lugar también se ubica mi hermano, y mis dos sobrinos y la situación ha sido bastante dura, nosotros no tenemos ayuda de nada, aunque algunos compañeros recibieron lo del bono solidario y lo del IVA eso es muy poco para la crisis económica que nos ha tocado vivir en estos meses, yo por ejemplo no he recibido absolutamente nada, duré 70 días encerrado en mi casa mirándome las caras con mi esposa y mis hijas, desesperado porque no sabía cómo darles de comer por eso me toco violar la cuarentena y salir a pedir limosna, hasta estuve detenido en el CAI de la policía por andar violando las medidas, fueron unos meses bastantes duros…” indicó Montenegro Rodríguez.
Él pudo volver con su banquito, betún, trapo y cepillos junto a su hermano Reinaldo Montenegro hace 4 meses al Parque a continuar brillando zapatos, con la esperanza de que las personas llegaran a solicitar sus servicios como de costumbre, pero para sorpresa de todas estas familias que se ubican en este sector concurrido de la ciudad no ha sido así, son pocos los clientes que por esta época desean lustrar sus zapatos, pues debido al miedo al contagio del coronavirus los ha espantado y ya no visitan a los lustradores.
“Quiero aprovechar este espacio para decirle a todas las personas que nosotros estamos acá trabajando, esperándolos para que vengan a lustrar sus zapatos, estamos usando las medidas de bioseguridad para que nos cuidemos entre todos de este terrible virus; nosotros antes de la pandemia nos hacíamos entre 35.0000 mil y 40.000 mil pesos, y ahora en este tiempo el que mucho hace es 12.000 mil pesos y así es bastante difícil sobre llevar esta situación”, sostuvo
Aunque ellos han tratado de tomar sus propias medidas de bioseguridad los clientes son pocos. (Foto archivo)
Aunque ellos han tratado de tomar sus propias medidas de bioseguridad, usan tapabocas, han señalizado las bancas con cintas amarillas para que los clientes mantengan la distancia y ahora el alcohol y el gel antibacterial hacen parte de su kit diario para embolar.
“La Policía nos dejó ubicar en el parque y eso hay que agradecerlo, pero teniendo las medidas de bioseguridad y lo hemos hecho, mantenemos la distancia entre clientes y usamos tapabocas”, concluyó.