Las muertes por coronavirus en EE.UU llegaron a 130.248
El total de contagios se acerca a los tres millones; aunque los decesos diarios siguen por debajo de los récords de meses anteriores, el número de casos confirmados no para de crecer en el país y sólo en las últimas 24 horas se registraron 54.999

Estados Unidos alcanzó ayer la cifra de 2.931.142 casos confirmados de Covid-19 y la de 130.248 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
Este balance a las 20:00 hora local (00:00 GMT del martes) es de 54.999 contagios más que el domingo y de 357 nuevas muertes.
La cifra de casos diarios volvió a superar los 50.000 arrastrada por los brotes en estados del sur y del oeste como Florida, Texas, California, Arizona y Georgia tras un fin de semana en el que se reportaron menos contagios.
Nueva York, sin embargo, se mantiene todavía como el estado más golpeado en Estados Unidos por la pandemia con 397.649 casos confirmados y 32.219 fallecidos, una cifra solo por debajo de Brasil, el Reino Unido e Italia.
Tan solo en la ciudad de Nueva York han muerto 23.201 personas.
A Nueva York le siguen la vecina Nueva Jersey con 15.229 muertos, Massachusetts con 8.198 e Illinois con 7.026.
Otros estados con un gran número de fallecidos son Pensilvania con 6.754, California con 6.427, Michigan con 6.221 y Connecticut, con 4.335.
En cuanto a contagios, California es el segundo estado solo por detrás de Nueva York con 271.013, seguido por Florida con 206.447 y Texas es el cuarto con 203.389.
Se calcula que Estados Unidos llegará al mes de octubre con unos 175.000 muertos.
El balance provisional de fallecidos -130.248- ha superado ya la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia.
El presidente estadounidense, Donald Trump, rebajó esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50.000 y los 60.000 fallecidos, aunque en sus últimos cálculos auguró hasta 110.000 muertos, un número que también se ha superado.
Por su parte, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que Estados Unidos llegará al mes de octubre con unos 175.000 muertos.
Casos en La Florida
Florida tardó tres meses en llegar a los 100 mil casos de COVID19, pero en las últimas tres semanas la cifrá se duplicó y ya superó los 200 mil. La cifra de muertes, en tanto, asciende a 3.778. Si bien es cierto que se realizaron más pruebas, las cifras crecieron de manera exponencial, lo que sugiere que la presencia del virus ha crecido en el estado más allá del incremento en los testeos.
Y la cifra podría ser mucho mayor. El propio Gobernador reconoció que “podemos tener 10 veces más casos de los que conocemos”. Esa frase también espeja otra realizada a nivel nacional, esta vez por el director del Centro de Control de Enfermedades, Robert Redfield.
“Nuestra mejor estimación ahora es que por cada caso que es reportado hay en realidad otras diez infecciones”, dijo el funcionario nacional el 25 de junio. De esta manera, la cifra de contagios en el país podría oscilar alrededor de los 30 millones de casos, casi un 10 por ciento de la población.
No obstante, DeSantis insistió en que el porcentaje de positivos con respecto a los testeos en el estado se ha mantenido relativamente estable. “Alrededor de un 15 por ciento”, graficó.
DeSantis se expresó desde uno de los bastiones republicanos más fuertes de la Florida, la comunidad de retirados The Villages: una suerte de club de campo de lujo en el que conviven más de 50 mil adultos mayores. Esta población de riesgo celebró las palabras del gobernador, quien les confirmó que los más afectados en esta nueva ola de contagios son los jóvenes de entre 20 y 40 años, que suelen no presentar síntomas severos.
Pero no todos concuerdan con el gobernador. Hoy el alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez, tradicionalmente un gran aliado de DeSantis, desestimó la teoría del gobernador. Lo contradijo sin decirlo al ordenar el cierre de restaurantes y gimnasios, retrocediendo así el proceso de reapertura.
Las autoridades de Miami cerraron las playas durante las celebraciones del 4 de julio para evitar las aglomeraciones de personas.
Decisiones en educación
Entre tanto, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE) informó que ya no permitirá la permanencia de estudiantes extranjeros en el país si sus clases pasan a ser dictadas en forma online en el próximo semestre debido a la pandemia de coronavirus.
“Estudiantes con visas de no inmigrantes F-1 y M-1 que estén enrolados en escuelas que operen completamente en forma online no podrán cumplir su carga requerida de clase de esta forma y permanecer en los Estados Unidos”, indicó la oficina gubernamental en un comunicado.
De acuerdo a las legislación vigente, quienes tienen una visa F-1 realizan estudios académicos mientras que los que poseen una M-1 realizan estudios vocacionales.
Así, los estudiantes anotados en estos programas “deberán abandonar el país o tomar las medidas correspondientes, como por ejemplo transferirse a instituciones que dicten clases en forma presencial, para mantener su estatus de legalidad”, de acuerdo al comunicado.
“Si no lo hacen, podrían enfrentarse a consecuencias migratorias que incluyen, sin limitarse a ello, el inicio del procedimiento de deportación”, agrega.
Estados Unidos -el país más golpeado por el coronavirus, con más de 130.000 fallecidos- suspendió también hasta finales de 2020 la entrega de visas de trabajo para proteger el empleo.