Las fuertes lluvias los tienen “al borde del colapso”
Cuando comenzaron a caer las gotas de agua, la preocupación fue aumentando, al igual que el nivel de agua en las casas de los habitantes del asentamiento La Isla.

Por: Juan Manuel Macias Medina
La isla es un asentamiento ubicado en el sur de la ciudad de Neiva, en la parte posterior del barrio El Limonar. Este sector de la capital está habitado por desplazados de distintos municipios del departamento del Huila, que buscando una mejor calidad de vida llegaron a este sitio, sin embargo, lo que encontraron fue un pantanal que arrasa con sus viviendas cada vez que llueve intensamente en Neiva.
Al entrar al barrio, se lograba percibir inmediatamente la impotencia de sus habitantes y la desolación que se apoderó de cada rincón del sitio. Don Edilberto Riaño, habitante del asentamiento La Isla, invitaba con desesperación que siguiéramos a su casa, pues llevaba más de 12 horas sacando agua de su humilde vivienda en la que vive en compañía de sus familiares.
Habitantes del asentamiento La Isla, exigieron a la administración ser reubicados.
“Llevo desde las 3 de la mañana sacando agua de la casa, empezó a llover y a las dos horas ya el agua estaba en toda la casa. Nosotros no dormimos, me tocaba tener duro esta parte de la cocina−señaló− porque la quebrada se la intentó llevar”, detalló preocupado el habitante, quien logró consolidar una “brigada” de emergencia con todos los que viven en su vivienda, para lograr recuperar lo poquito que el afluente les dejó.
“Quiero decirles a las autoridades que por favor nos ayuden, también a las personas que nos colaboren porque estamos pasando por una situación muy dura”, manifestó el habitante al que ya le quedaba muy poco brillo en sus ojos.
Fue una verdadera tragedia
Carlos Felipe González, presidente del asentamiento La Isla, pidió a las autoridades que sean pertinentes a la hora de tomar decisiones, según el habitante, cuando comienza a llover, en estos asentamientos no se puede dormir. “A las 12 comenzó a llover, y yo no pude dormir yo siempre vivo alerta y en mi posición de presidente, trato de mantener comunicados a todos los habitantes para que en estos casos estén preparados”, sostuvo González.
González, pidió a la administración una reubicación inmediata, antes de que ocurra una tragedia de mayor magnitud.
Don Edilberto Riaño consolidó una “brigada” de emergencia con todos los que viven en su vivienda para lograr recuperar lo poquito que el afluente les dejó.
“A las 3 de la mañana yo salí a avisarle a las personas que la quebrada se había desbordado, pero eso no da tiempo de nada, las personas no pueden hacer nada, por eso le decimos al alcalde que por favor nos ponga atención y nos reubique”, dijo con preocupación el líder comunitario, que con los brazos cruzados se instaló en el lado más afectado del asentamiento por si algún miembro de la comunidad llegara a necesitar de su ayuda.
El Lago y La Primavera, otros asentamientos afectados
Los asentamientos El Lago y La Primavera están ubicados en el mismo sector que La Isla, por tal motivo, también resultaron seriamente afectados por la creciente de la quebrada, ocasionada por las torrenciales lluvias en la ciudad. Allí, las afectaciones no fueron menores, la preocupación de los habitantes que aclaman ayuda es tema de conversación en las 13 familias que viven a la ladera del afluente.
“Cuando llueve la quebrada siempre se crece, pero esta vez creció mucho, tanto que quedamos con el agua a las rodillas, se nos dañaron los colchones, la nevera, y todo lo que alcanzara el agua”, dijo angustiada Cecilia González, habitante del asentamiento La Primavera, quien resultó afectada por las lluvias.
El asentamiento La Primavera no hace alusión a su nombre, pues sus habitantes dicen que de no tener una pronta solución todo terminará en tragedia. “Necesitamos ayuda, nosotros también somos personas, queremos que vengan las autoridades y miren como la creciente nos dejó las cosas y que tengan un poquito de compasión con nosotros”, señaló González, una mujer a la que pareciera que la fuerza para sacar a baldados el agua de su casa, se le hubiera acabado.
En el asentamiento La Isla no pueden dormir tranquilos, están a la espera de una nueva creciente.
Reporte de las autoridades sobre daños por las lluvias en la ciudad
Según reporte de la Secretaría de Gestión del Riesgo de Neiva, en la ciudad, se presentaron varias inundaciones a lo largo de la capital por la emergencia natural del domingo. “Hemos estado atentos, haciendo seguimiento al caudal de los ríos, afortunadamente ya bajó el caudal”, indicó Armando Cabrera, jefe de la cartera.
Así mismo, la oficina encargada de evaluar este tipo de emergencias, manifestó que en el asentamiento La Isla, se reportaron 74 daños y necesidades. En este asentamiento, según información de líderes comunales, viven alrededor de 400 personas que conforman 90 familias.
La Oficina de Gestión del riesgo también informó que se realizaron 28 censos en los asentamientos La Primavera y El Lago. Los colchones, enseres y vestuarios fueron, según el censo de las autoridades, las pérdidas materiales a raíz de la ola invernal; sin embargo, los residentes de este sitio dicen que el daño de los colchones y los electrodomésticos no es nada en comparación a la tristeza que genera ver con sus propios ojos, lo que durante toda una vida han conseguido con sus propias manos.
Afectaciones materiales dejaron las torrenciales lluvias en la ciudad de Neiva.
Afectaciones en otros sectores
También en otros puntos de la ciudad, se registraron emergencias causadas por las lluvias.
En el barrio Las Palmas en la Carrera 54 # 20-29 dónde habita un adulto mayor, éste se vio damnificado por la inundación de su vivienda.
De otro lado en el sector de Moscovia, un arroyo se llevó un vehículo que transitaba por allí. El conductor logró salir del vehículo y no se vio afectado.
Y en el barrio Colmenares en la Calle 70 # 1a-73, se registró el rompimiento de un tubo. La emergencia dejó varias viviendas afectadas.
Al término de la tarde de ayer, más de 150 familias afectadas, habían sido censadas por las autoridades locales.