Salomón: de la iglesia a la cárcel
Era, según las autoridades, el líder de una pandilla que llevaba su mismo seudónimo. Tapa: así lo llamaron desde niño y así lo conocen en el mundo de la delincuencia en Neiva.

Este Salomón no es un rey ni profeta ni ha construido templos. Este Salomón está en la cárcel y lo llaman Tapa. Sus apellidos son Valencia Astudillo y la justicia lo investiga. Es señalado de ser el líder de una pandilla al suroriente de la calurosa ciudad de Neiva y de varios actos delictivos. De su cuello cuelga un escapulario y en algún tiempo asistió a la iglesia de los mormones.
Tiene 25 años y el rostro con una barba bajo amenaza de crecer. Fue capturado el 3 de agosto de 2013 y su imagen se pintó en un retrato hablado. Lo señalaron de ser el responsable de haber dispuesto el petardo que estalló en un vehículo recolector de basuras de la empresa Ciudad Limpia la noche del 21 de junio del mismo año. Un testigo lo habría visto dejando el explosivo en el barrio las Acacias II sobre las 10:10 p.m. y le describió sus características a las autoridades. Además era investigado por otros delitos como hurto calificado y agravado, tráfico y porte de armas de fuego, terrorismo, homicidio, tentativa de homicidio y lesiones personales.
El mayor de 7 hermanos
Salomón Valencia Astudillo vivió en una casucha de madera y plástico en una invasión de la comuna 8 de Neiva, zona suroriental de la ciudad con problemas de pobreza extrema, delincuencia y alto consumo de psicoactivos por parte de los jóvenes. Habitó ese pequeño hogar con sus seis hermanos menores, su madre y su padre. Sus progenitores había llegado de Florencia, Caquetá.
“Pudo ser un buen joven”, expresó un hombre que lo conoció cuando asistía a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos días- de los mormones-. Asistía solo o con su familia. Luego no regresó y más tarde apareció en los titulares de prensa como uno de los ´bandidos′ que había protagonizado un enfrentamiento de pandillas, del cual resultó gravemente herido.
Siempre con muchas necesidades, su hogar además tuvo más problemas cuando su papá, conductor, fue enviado a la cárcel por transportar cocaína y años después los abandonó. Tapa tendría aproximadamente 20 años. Por otro lado, Salomón no terminó sus estudios de bachillerato y dejó embarazada a una joven del sector donde vivía. Hoy, tiene dos hijos con ella. Tapa le dijeron desde niño en su casa de piso de tierra y así es conocido por sus vecinos, amigos y ahora por los organismos de seguridad y de justicia.
En juicio
Perdió su libertad cuando fue señalado por la Fiscalía por el petardo el carro recolector y ya completó nueve meses tras la rejas de establecimiento carcelario de Rivera. Pero ese no es el único caso en el que está involucrado. La semana anterior estuvo en juicio oral por el robo a una compraventa el 4 de nero de 2013. En la audiencia estuvo acompañado de sus familiares. Tiene dos hermanos y cuatro hermanas. Por otro lado, el administrador del establecimiento comercial lo reconoció.
Al parecer, llegó a bordo de una motocicleta a la prendería La Esmeralda Verde en la calle diez con carrera tercerta, centro de la capital huilense, junto con otro sujeto. El desconocido, que llevaba un casco y lentes oscuros, amenazó al comerciante con un revólver calibre 38 largo. Mientras tanto, Tapa habría roto los vidrios y agarrado los paños de oro con pulseras, dijes y cadenas. Las investigaciones de la Policía Judicial lo relacionaron con alias Balín, Jesusito, Nene y Luigi: “sujetos peligrosos”.
En la diligencia arrugaba el ceño y estiraba la boca. También revisaba documentos y escuchaba atento al fiscal y a los testigos que lo acusaban. El delito: hurto calificado y agravado y fabricación, tráfico y porte de armas. El monto del robo asecendió a 14′833.000 pesos correspondientes a 180.9 gramos de oro. Una pariente solicitó que no se le tomaran fotografías.
Policías también testificaron y lo culpan gracias a las entrevistas que han realizado y a investigaciones que dicen haber realizado antes de que aparecieran los testigos presenciales del acto delictivo. En agosto de 2013, el comandante de la Policía Metropolitana dijo que era cabecilla de la banda de Los Tapas y que sembraba el terror en el barrio Los Alpes, el mismo donde fue capturado.
Salomón Valencia Astudillo vestía de rojo en la última cita con el juzgado penal que lleva su caso, el mismo color que al parecer usaba el rey Salomón de la biblia en la prenda que se colocaba encima de su túnica. Sin embargo, Tapa no tiene corona. Sí un prontuario.
Petardo en vehículo de Ciudad Limpia
El explosivo fue activado al interior de un vehículo de la empresa de aseo Ciudad Limpia cuando uno de sus funcionarios lo lanzó mientras iba camuflado en una bolsa de basura. El hecho se presentó en la comuna 8 de Neiva, exactamente en el barrio Las Acacias II sobre las diez de la noche del 21 de junio de 2013. Cuatro personas resultaron heridas en la alteración de orden público que, en su momento, fue leída como un intento de ataque a policías del sector. Salomón Valencia Astudillo fue capturado como presunto responsable.