Muerte de adolescente enluta a familia neivana
El hijo de una pareja de reconocidos profesionales de la capital huilense perdió la vida ayer en su vivienda del condominio campestre Altos de la Pradera. Las exequias serán en el que fue su colegio: el Salesiano San Medardo.
En la mañana de ayer la muerte llegó al condominio campestre Altos de la Pradera y se le llevó la luz de una joven pareja. Perdieron a su hijo a tempranas horas del día. Tenía solamente quince años. De su vida quedará el recuerdo en las fotografías que desde niño le tomaron y la mente de quienes conocieron su sonrisa.
Al conjunto residencial donde vivía con sus padres llegaron patrullas de la Policía Nacional y ambulancias. Las sirenas de los vehículos de emergencia despertaron la avenida que de Neiva conduce al corregimiento de Vegalarga, sector oriente de la ciudad en la que predominan las ciudadelas. Allí atravesaron la entrada adornada con sombreros y rabo e’gallos por la temporada de fiestas sampedrinas.
El hijo de la arquitecta Liliana Quintero, quien hizo los planos de las casas del condominio, y del ingeniero civil, Juan Vargas, cursaba décimo grado en el Colegio Salesiano San Medardo de Neiva. En esta institución educativa al parecer siempre se destacaba por su rendimiento académico. Sus compañeros de clase aún no salen del asombro. Los restos mortales están siendo velados por familiares y amigos y a las tres de la tarde le darán el último adiós en la que fuera su centro de estudios.
