Lo encontraron y lo mataron

Un hombre que se dedicaba a las labores del campo, identificado como Jairo Nelson Pérez, fue ultimado a bala en la noche del jueves anterior en el centro poblado del Salto de Bordones, en el municipio de Isnos. Los hechos sucedieron hacia las 7:00 p. m. en una fuente de soda, a donde se había dirigido la víctima mortal luego de haber compartido con sus amigos y familiares en la celebración del nuevo año, sin saber que lo estaban buscando para asesinarlo. 

Jairo Nelson Pérez se encontraba tomándose unas cervezas cuando arribaron al establecimiento comercial cuatro sujetos, que según versiones de algunos allegados del occiso, lo habían estado preguntando. Al observar que se trataba del  agricultor uno de ellos desenfundó un revolver se le acercó y a quemarropa le propinó cuatro disparos, dos en la cabeza y los otros dos en el tórax.

Jairo Nelson murió en el acto, quedando sentado en la silla donde se encontraba mientras el victimario y sus acompañantes salieron del establecimiento como si no hubiera pasado nada.

El crimen fue reportado al Cuerpo Técnico de Investigaciones de la Fiscalía, que acudió a hacer la inspección de la escena del crimen y el levantamiento del cadáver. Cumplidas las diligencias fue llevado hasta la morgue en el cementerio local para que se le realizara la necropsia por parte funcionarios de Medicina Legal.

El cadáver del labriego era esperado en la tarde de ayer por sus familiares para llevarlo en un vehículo de la Funeraria Capillas de la Paz hasta su residencia en la vereda El Jardín y brindarle las honras fúnebres.

En el sector reina la zozobra. Nadie sabe quiénes ni por qué lo asesinaron, solo que lo estaban buscando, lo encontraron y lo mataron. Hasta el día de hoy ni el frente 13 de las Farc o algún otro grupo delictivo que opere en esa región se atribuyen el homicidio.