sábado, 13 de septiembre de 2025
Judicial/ Creado el: 2014-09-04 08:55

Contralora de Neiva no agredió a funcionaria

En fallo de primera instancia, la Procuraduría Regional del Huila absolvió a la Contralora de Neiva Alba Segura de Castaño, quien estaba siendo investigada por presuntamente haber agredido de forma física a una funcionaria de la entidad.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | septiembre 04 de 2014

De acuerdo con el fallo emitido por la Procuraduría Regional esta semana, “no se encontró responsable disciplinariamente del Cargo único formulado en su contra”.

El órgano de control, realizó una investigación al caso expuesto por la señora Luz Mary Orjuela Rengifo, encontrando serias inconsistencias en su queja, pues extrañamente, el hecho habría ocurrido el 18 de abril de 2012 y fue denunciado 2 años después. En este sentido, en el alegato de conclusión se expresa: “… se puede colegir que los hechos que denuncia la quejosa, no existieron, pues de lo contrario, no habría suscrito el compromiso de convivencia, tres días después del supuesto suceso”.

Además de esto, los testimonios presentados por los testigos de la señora Orjuela, no coincidían en sus versiones, ya que no fueron testigos de los hechos y por tanto la Procuraduría concluye que “se generan serias dudas sobre la existencia de la conducta endilgada, la que de conformidad con los principios que regula el debido proceso disciplinario, debe resultar en favor de la implicada.”

“Resulta incuestionable que estamos en presencia de una duda razonable sobre la existencia del hecho y con mayor razón sobre la responsabilidad y en este orden de ideas en la medida que la duda favorece al acusado, no queda otra alternativa diferente que absolver a la investigada”, puntualizó el fallo.

Discrepancias con sindicato


Según conoció este diario, la funcionaria que presuntamente fue agredida hace parte del sindicato de la entidad, con el cual se han generado serias discrepancias a raíz de la interpretación unilateral de la asociación sindical para tomarse unos permisos sin el cumplimiento de los requisitos legales, en medio de la negociación de un pliego de solicitudes, en el pasado mes de marzo.
A raíz de esta frustrada negociación, la contralora ha sufrido una serie de ataques en los cuales la han calificado como “terrorista laboral” y varias denuncias ante el ente de control disciplinario.