Capturada intentó hurtarse un bebé
Una mujer fue capturada por vecinos del barrio Trinidad de Pitalito, minutos después de haberle arrebatado a una madre su recién nacido.
El insólito caso se registró cuando la joven Yuli Tatiana Puentes Correa había acabado de salir del Hospital Departamental San Antonio con su bebé de tan solo una semana de nacido y se dirigía hacia su residencia.
A pocas cuadras del centro asistencial en el sector del barrio Trinidad, aprovechando la soledad del sitio, fue abordada por una mujer que tras intercambiar unas cuantas palabras accedió a amenazarla con una jeringa que contenía una sustancia de color rojo parecida a la sangre, y que según le dijo la atacante, estaba contaminada con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH). La mujer intimidó a la madre con inyectársela si no le entregaba el niño.
La agresora sin pensarlo dos veces despojó a la madre de su bebé y emprendió la huida. Yuli Tatiana corrió desesperada pidiendo auxilio en el vecindario, logrando la solidaridad de la comunidad que inició la persecución de la presunta secuestradora que fue alcanzada a pocas cuadras del sitio donde se produjo el rapto del infante.
“Uno de los vecinos la siguió en una moto y la alcanzó. Luego fue rodeada por la comunidad que la obligó a pasarle el niño a su verdadera madre. A esa muchacha le volvió el alma al cuerpo cuando regresó el niño a sus brazos”, dijo Carlos Rodríguez, residente del sector donde ocurrieron los hechos.
La aprehendida fue presentada a las autoridades que procedieron a su captura. En el bolso que llevaba la mujer le fue encontrado un revólver de juguete y la jeringa con la sustancia aún sin determinar, con la que intimidó a la víctima.
Iniciado el proceso de judicialización se constató que la autora del rapto del menor era Libia Nancy Valencia, de 35 años de edad, natural de la ciudad de Pasto (Nariño). La mujer fue presentada ante el Juzgado de Control de Garantías para que responda por el delito de secuestro; el juez le ordenó medida de aseguramiento en establecimiento carcelario.
No es el primer caso
En Pitalito la comunidad y las autoridades están en alerta máxima frente a este tipo de acciones. El viernes último se había registrado el intento de rapto de otro menor. En esa ocasión el bebé y su progenitora fueron rociados con una sustancia que los dejó en estado de inconciencia.
Para su fortuna fueron auxiliados por vecinos de la carrera Cuarta con calle Séptima, quienes los llevaron hasta la Unidad de Urgencias del Hospital Departamental San Antonio en donde fueron atendidos y se recuperan satisfactoriamente.
