El descenso: la cruz con la que inicia el Huila la temporada 2018

Pamela Ch. Perdomo
Diario del Huila

El técnico argentino Néstor Craviotto continuará al frente del equipo y tendrá la responsabilidad junto al presidente Juan Carlos Patarroyo, de armar una nómina competitiva para el 2018. El cuadro opita arrancará último en el descenso junto a los dos equipos que asciendan de la B.

Los locales iniciarán el torneo de apertura de la Liga Águila 2018 con una lucha a la que todos los equipos le temen: El descenso.  

El capítulo en el 2017 condenó al Cortuluá a acompañar a Tigres en la segunda división el próximo año. Durante estos dos semestres «el fantasma de la B» desapareció para América de Cali luego de seis años de mala racha, puesto que  salvaron la categoría y actualmente se mantiene en mejor  posición que el Huila después de ser un supuesto rival de poca preocupación. Sin embargo los escarlatas lograron ingresar a los cuartos de final, oportunidad que  el escuadrón opita desaprovechó al dejar ir victorias importantes en condición de local, y aunque terminó su papel con  victoria en la última fecha ante el descendido Tigres, no le alcanzó para avanzar a la siguiente fase.

A pesar de que el Atlético Huila terminó en la casilla número ocho de la tabla del  descenso en la finalización del campeonato, el mal promedio de los últimos tres años lo mantienen en la tan indeseada posición y arranca con los mismos puntos de los ascendidos, ya que  a estos se les otorga el mismo puntaje del último en la tabla en este caso los del Huila, que empezará con  90 puntos y con la lucha por la permanencia en la máxima categoría del futbol colombiano.

A nivel nacional

Los dos equipos que asciendan de la B tendrán lucha directa contra el Atlético Huila, Alianza Petrolera, y Once  Caldas que son los más comprometidos respecto al tema. Con solo tres puntos de diferencia en la tabla, el blanco blanco de Manizales, quien tiene a sus espaldas una copa libertadores,  espera mejorar su juego y luchar con memoria ganadora por la permanecía en la primera A.

El sistema de campeonato del fútbol colombiano siempre ha castigado a los equipos recién integrados. El país define al equipo que baja a la B por el acumulado de los puntos de los últimos tres años; es decir, su promedio. Sin embargo, al que llega de la B le dan el puntaje del último de la A. Así ocurre desde el año 2015. Este sistema es muy similar al del fútbol argentino, país que lo implementó, con algunas variaciones a lo largo de la historia. El espíritu de ese sistema era evitar que uno de los equipos grandes descendiera. Hoy día, cinco ligas de Suramérica, entre ellas Colombia, tienen promedio. Así funciona el sistema de descenso en la región.

El sistema del campeonato en Colombia tiene una particularidad bastante insólita porque sin importar que un equipo caiga a la segunda división, puede salir campeón de la Liga. La única desventaja que tendría el equipo que logre el título y se vaya para la B es que no obtendrá el cupo a la Libertadores, y este cupo será entregado al club que ocupe la mejor posición en la tabla de reclasificación y no haya clasificado a este torneo. Colombia es el único país del área que hereda peor puntaje a ascendidos.           

A nivel continental

El de Argentina es un sistema muy similar al colombiano, donde el descenso por promedio se comenzó a utilizar hace 34 años. Hoy se mantiene por lo que los cuatro últimos de esa tabla se van al nacional B. Se tienen en cuenta los puntos de las temporadas anteriores.

En Chile este año hay descenso por promedio en el torneo, que está en una transición de ser semestral a anual. Se tienen en cuenta la temporada 2016-17 y el torneo de Transición, de seis meses, actualmente en disputa.

Respecto a Bolivia, se puede decir que el fútbol está en reorganización razón por la cual no hay descenso directo en esta temporada. Algunas de las novedades son que van a aumentar de 12 a 14 equipos en la categoría A y el último de la tabla acumulada del año jugará una promoción contra el ganador entre los subcampeones del nacional B y de la Copa Simón Bolívar, un torneo regional.

En Brasil no hay promedio y se juega con el mismo sistema de las principales ligas europeas. Son 20 equipos, 38 fechas, todos contra todos. Los cuatro últimos del torneo se van para la B, con este sistema, incluso, han caído varios grandes, como Palmeiras. El año pasado bajó Internacional de Portoalegre, hoy líder de la segunda división en el fútbol de ese país.

Frente al sistema de Paraguay, se puede decir que es por promedio de las últimas tres temporadas situación que da de baja a dos equipos. 

En Uruguay hay promedio, pero solo con los puntos de los dos últimos años y los recién ascendidos dividen sus puntos por los partidos que han jugado en la A, sistema que el que bajan tres equipos. Y en Venezuela se juegan dos torneos por año, el descenso es por el acumulado de los dos semestres.

Novedades del Atlético Huila 

Hasta este viernes 30 de noviembre trabajará la plantilla actual ya que en el mes de diciembre se cumplirá el contrato de un grupo de jugadores del Atlético Huila que continuarán en la institución, es el caso del experimentado portero Breiner Castillo de 39 años de edad, el uruguayo Mateo Figoli de 33 años y el argentino Sergio Almirón de 32 años.

Las directivas estudian varios casos de jugadores que no tuvieron un buen semestre en la institución como el lateral Dayron Benavides de 26 años, los volantes Leonardo Lázaro de 24 años, Juan Camilo Vela de 24, José David Leudo de 24 años, Víctor Castillo de 30 y el delantero Yessi Mena de 28 años de edad. El volante Andrés Ricaurte es pretendido por varios equipos del fútbol Colombiano, entre ellos Atlético Junior y Deportivo Medellín. La primera semana del mes de enero está programada la pretemporada.