“Tener regiones fuertes siempre es una noticia positiva”
La codirectora del Banco de la República, Ana Fernanda Maiguashca, habló con DIARIO DEL HUILA con respecto al impacto del incremento de la cartera morosa del campesinado colombiano en el sistema financiero. En su más reciente visita a Neiva pronosticó un crecimiento de la economía en 2014 entre 4,8 y 5 por ciento.

¿Cómo va la situación de la economía nacional en lo corrido del año?
Este año va tener una dinámica muy importante, el primer trimestre creció a una tasa del 6,4%. Este es un dato impresionante, fue una sorpresa positiva. No la estábamos esperando ni en el Banco ni la mayoría de los analistas del mercado. Se sentía un ambiente positivo pero cuando vimos la cifra, está por encima de lo que se esperaba.
¿Qué se espera al finalizar el 2014?
El equipo del Banco aún no ha sacado su revisión de las proyecciones pero posiblemente va a estar por debajo del cinco por ciento. Originalmente el equipo técnico tenía una proyección de 4,3% que creo se revisará al alza por la dinámica del primer trimestre. No obstante, no creemos que vaya a seguir creciendo al mismo ritmo, vamos a tener una desaceleración y cerraremos el año alrededor del 4,8 o 5 por ciento.
Teniendo en cuenta que se están llevando a cabo unos Diálogos de paz, ¿cuál sería el escenario de la economía nacional en un posible contexto de postconflicto?
Esa pregunta sigue siendo muy difícil porque todavía, en virtud de cómo se han conducido las negociaciones, no es claro qué van a implicar los acuerdos. Es complicado imaginar cuál va a ser ese escenario de postconflicto. Supongo que lo que sí va a requerir es una apertura en el sentido de que más actores tienen que entrar en el proceso democrático y eso va a exigir, sobre todo, que el resto de los ciudadanos entren a escuchar esas voces porque precisamente lo que estamos pidiendo es que dejen de actuar en un ámbito de violencia para que lo hagan en uno democrático. Probablemente eso va a traer unos requerimientos de más gasto público. Al final del día, este proceso democrático acaba definiéndose en cómo se distribuyen los presupuestos.
¿Al interior del Banco de la República ya se está analizando ese posible escenario?
No, esa es una información con la que el Banco no cuenta. Se harán los estudios cuando sea pertinente pero todavía no es el caso.
¿Cómo ve la situación que se plantea para Colombia y las naciones latinoamericanas a partir de la iniciativa de los países del BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) con el nuevo Banco de Desarrollo?
Francamente me parece que no es un tema que realmente genere un cambio estructural. En términos generales los bancos de desarrollo deberían llenar alguna falla de mercado. Me parece que genera más riesgos -como es el caso de Brasil- de que se produzca un impulso muy guiado por el gasto público que puede llevar a unas condiciones artificiales en la economía que no la dejan salir por sí sola. No creo que tenga un impacto gigante sobre la región. Brasil es un país muy particular, muy distinto a nosotros que nos parecemos más a Chile, a Perú o incluso a México que viene tan jalonado por la economía norteamericana.
En ese sentido, ¿ese banco tendría alcances en la economía colombiana?
No creo que a nosotros en particular nos genere un efecto muy importante. Considero que está muy bien pero no veo que aquí haya una falla de mercado que corregir.
El precio del dólar en los últimos días ha estado a la baja, ¿qué está haciendo el Banco de la República al respecto?
El Banco está implementado políticas para comprar reservas internacionales que es lo que nos parece prudente en un escenario en el que hay un mayor nivel de vulnerabilidad porque estamos teniendo nuevos capitales ingresando, capitales que pueden abandonarnos en algún momento cuando cambien las condiciones de liquidez internacional. En esa medida tener un buen colchón es una idea prudente e inteligente en la que trabajamos. La política de acumulación de reservas no tiene un objetivo de buscar un tipo de cambio u otro pero se esperaría que tenga algún impacto.
En cuanto a la inflación, ¿cuál ha sido el comportamiento durante lo corrido del año y cómo terminará en diciembre?
La inflación ha ido convergiendo de nuevo a su meta. El año pasado cerramos en 1,94%, por debajo del tres por ciento. Así como no nos gusta cuando estamos por encima del 3%, tampoco nos parece estar por debajo porque incluso ese 1,94% está por fuera del rango meta, que está entre el dos y cuatro por ciento. En lo corrido de este 2014 hemos observado una convergencia de nuevo al tres por ciento. Lo que se espera al término de 2014 es que cerremos dentro del rango y sin mayores alertas.
Hablando específicamente del Huila, ¿cómo ve la economía del departamento?
Nosotros hemos visto que ha habido alguna diversificación en búsqueda de nuevos productos que creo van a abrir posibilidades posteriores para la región y que ojalá se mantenga la actividad productiva en la línea de examinar ambientes más competitivos. Se ha ganado en espacios para productos que son cultivados en el Huila y son más competitivos que otras regiones, en café, por ejemplo. Se han hecho esfuerzos por investigación en otros ámbitos pecuarios y eso va a ser importante sobre todo si el país logra un salto en infraestructura para poder llegar a nichos de crecimiento que sean importantes a largo plazo.
De acuerdo a esa dinámica que está teniendo el departamento, ¿cómo le aporta a la economía nacional?
Tener regiones que sean fuertes, que han encontrado nichos de producción sólidos, que crezcan con una dinámica propia, siempre es una noticia positiva para la economía nacional. Sobre todo nos quita toda la presión que se ha generado de sentir que hay que recurrir a subsidios que no son sostenibles, presionan el gasto público, son ineficientes y que al final no van a generar mejores condiciones de vida para las regiones.
Cartera vencida y subsidios al campo
El pasado miércoles el Banco Agrario informó que la cartera vencida en el Huila se había disparado, ¿cómo afecta esta situación al sistema financiero?
En términos generales, tener una porción de la cartera vencida es uno de los síntomas de riesgo porque lo que quiere decir es que los préstamos que están otorgando los bancos no se le están pagando de regreso. La sostenibilidad del sistema y su capacidad de empujar el crecimiento dependen fundamentalmente de que aquellos créditos que se otorguen sean pagados para que luego se puedan colocar recursos a otros proyectos. Sin embargo, en términos generales cuando uno mira en agregado el sistema financiero no vemos niveles preocupantes de mora, todavía estamos en niveles muy bajos.
A propósito de las políticas implementadas por el gobierno para el sector agropecuario en cuanto a refinanciación de deudas y subsidios, ¿qué impactos generan en la economía del país?
No tengo conocimiento de un estudio que se haya hecho para mirar cuál ha sido el impacto, sin embargo es difícil pensar que temas de corto plazo puedan producir un efecto de largo plazo en las economías y en su productividad. Lo que se requiere son desarrollos tecnológicos y sostenibles que nos hagan más competitivos y cualquier cosa que no vaya en esa dirección no va a ser sostenible en el largo plazo.
Finalmente, ¿qué opina de la condonación de las deudas que buscaban los campesinos en los paros recientes?
El problema de fomentar ese tipo de políticas en lugar de trabajar en proyectos que sean rentables y sostenibles es que con el tiempo, si sistemáticamente entramos en un mundo en el que condonamos deudas, se restringe más el acceso de esta población (campesinos) al sistema financiero, los deja en las manos del crédito informal -que es infinitamente más costoso-. Así que es preferible trabajar en la reestructuración de las deudas que pensar en la condonación.