sábado, 13 de septiembre de 2025
Economía/ Creado el: 2015-07-31 09:57

“Le estamos proponiendo al Estado que no privatice a Saludcoop”

ECONOMÍA & FINANZAS publica la entrevista completa con Carlos Ernesto Acero Sánchez, presidente de la Confederación de Cooperativas de Colombia (Confecoop), quien estuvo en Neiva socializando la propuesta del sector ante el Gobierno Nacional para finalizar la intervención de Saludcoop y que no “sea expropiada a sus dueños legítimos”.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | julio 31 de 2015

¿Cuál es la propuesta del cooperativismo para recuperar a Saludcoop?

El movimiento cooperativo y solidario le ha hecho una propuesta al Gobierno Nacional para buscar una salida a semejante problema estructural, que es el problema del sistema de salud en Colombia. Queremos mostrar cómo el modelo cooperativo y solidario aspira a continuar participando a través de una nueva estructura, de una nueva organización y una participación cada vez más democrática de muchas personas en diferentes tipos de cooperativas en la prestación del sistema de aseguramiento, del sistema de atención y en la prestación de servicios logísticos, en un nuevo esquema integral de salud en el país para los próximos años.

 

Cuando el gobierno de Uribe vendió Megabanco, al sector le quedaron unos recursos y logró el fortalecimiento de Coopcentral, que hoy en día ya es un banco. ¿Quieren replicar esa experiencia?

Sí, es un buen punto de referencia y es oportuno traerlo a colación. Ese es el propósito nuestro, cumplir con el sexto principio cooperativo, que se llama “Cooperación entre cooperativas”. El tema tiene aristas diferentes: en aquella ocasión se ordenó la venta del Megabanco con la favorable sorpresa que hubo un importante remanente. Como los excedentes de las cooperativas no se reparten, sino que se reinvierten para fortalecer las empresas, se recibió ese dinero y se puso al servicio de una causa superior.

Se alimentó el patrimonio de la entonces entidad de segundo grado, llamada Coopcentral, y hoy en día es el banco cooperativo que hoy en día es propiedad de más de 700 organizaciones cooperativas y de la economía solidaria.

Eso es lo que hacemos las cooperativas. Fortalecemos los circuitos económicos y financieros para prestar más y mejores servicios a toda nuestra gente.

 

¿Volviendo a Saludcoop, lo que ustedes proponen es que los tres ámbitos del sistema de salud sean prestados por entidades solidarias distintas?

En el caso de la reestructuración del servicio de salud hacia adelante, tomando como punto de partida lo que se reestructure de Saludcoop, lo que va a permitir es una propuesta en donde habrá que prestar el aseguramiento; por aparte, no las mismas entidades solidarias, el servicio de salud a través de IPS, y otro grupo de cooperativas estarían encargadas de la prestación de los servicios de apoyo, logísticos, administrativos, entre otros.

 

De Saludcoop se criticó la integración vertical, ¿este modelo que ustedes proponen está de acuerdo con la ley?

Con esto estamos cumpliendo cabalmente con las prescripciones de la ley estatutaria y de toda la normatividad cooperativa y además estamos dando una enorme oportunidad para que a este tipo de servicio puedan entrar más cooperativas, de las que ya están en el sector, que han probado su capacidad para ofrecer y prestar con calidad estos servicios y nuevas organizaciones cooperativas y mutuales que pueden ser organizadas por los profesionales de la salud, que también pueden ser conformadas, y debería ser así, por los usuarios de la salud.

 

¿Entonces los mismos trabajadores y empleados harían parte de las cooperativas que prestarían los servicios?

Estos modelos de participación de los usuarios son muy comunes en los servicios de salud de Estados Unidos, Canadá y Europa y queremos que también se pueda movilizar acá e involucrar a los más de 33.000 trabajadores que hoy hacen parte de Saludcoop para que a través de estas estructuras cooperativas, solidarias, mutuales, puedan hacerse partícipes no solamente del trabajo sino de la propiedad de nuevas u otras organizaciones cooperativas que van a prestar en cualquiera de los tres ámbitos que he señalado: aseguramiento, prestación del servicio y apoyo logístico.

 

¿Qué les ha dicho el Gobierno?

El Estado ha propuesto que hay que acabar lo que había, hay que reformarlo. Nosotros estamos de acuerdo, pero que seamos nosotros los primeros, los auténticos dueños. Lo que nos parece sorprendente es que el Estado esté tratando de definir la suerte de nuestra empresa cooperativa y solidaria excluyendo al sector. Nosotros fuimos los que construimos este patrimonio, fuimos quienes desarrollamos una infraestructura que está hoy al servicio de los colombianos.

 

¿Qué se puede rescatar del trabajo de la EPS Saludcoop en más de 15 años de trabajo?

El Gobierno y las personas que critican a Saludcoop deberían preguntarse ¿qué hubiera pasado si Saludcoop hubiera operado con la misma lógica de las demás empresas de capital que están en el sector de la salud? Ellos no reinvirtieron las ganancias, sino que las distribuyeron entre los inversionistas. Eso es legítimo, pero no construyeron infraestructura o lo hicieron en menor magnitud.

Saludcoop invirtió total y sagradamente sus excedentes durante todo el tiempo que estuvo en manos de sus legítimos propietarios y con base en eso logró construir un sistema que brindó al país 3000 camas hospitalarias en el mismo tiempo en que el Estado cerraba hospitales públicos por toda la geografía nacional. Creamos más de 300 centros especializados para la atención de las personas, no están concentrados en las grandes capitales del país.

 

¿Cuál fue la estrategia de la empresa para llegar más a los municipios que a las grandes ciudades?

La única infraestructura que hoy está en más de 1000 municipios del país es Saludcoop porque la estrategia de la empresa, basada en el modelo cooperativo, era llegar a las personas en igualdad de condiciones y permitirles el acceso digno, decente y oportuno.

A pesar de las dificultades propias del servicio, las cifras de la Superintendencia de Salud siempre pusieron a Saludcoop en los primeros lugares en prestación del servicio. Eso desapareció desde el momento que se intervino a la EPS cooperativa.

 

¿Entonces, la interventoría ha “desmantelado” a la empresa?

Hoy no solamente se ha destruido el patrimonio de todos, porque no era de uno, ni de dos, ni de los directivos, era de toda la sociedad colombiana. Los patrimonios cooperativos, que son patrimonios sociales e irrepartibles, tienen esa vocación, inclusive, al terminarse la empresa no retornan a los dueños, sino que quedan al servicio de la sociedad.

Eso que construimos durante 16 años desapareció en los últimos 4 a consecuencia de la intervención; la calidad del servicio se deterioró; la infraestructura física carece de un mantenimiento adecuado; no hubo la renovación de los equipos médicos. Inclusive, está en juego hasta el ingreso digno de los trabajadores de la EPS, cuando en la época en que lo operaba el sector cooperativo nunca se incumplieron ese tipo de acciones o de obligaciones.

 

Si las cosas estaban bien en Saludcoop, ¿por qué el Gobierno decidió intervenirla y hasta la fecha no la ha entregado?

Sobre Saludcoop se tendió un manto oscuro. Se dijo, incluso, que toda la culpa de la corrupción de este país se llamaba a Saludcoop y detrás de eso les quedó muy fácil debilitar a la empresa, entrar en un proceso de marchitamiento, destruir su patrimonio y ahora el propósito es salir y rematar la empresa, cuando no expropiarla. Eso no puede ser así.

Ahora va a terminar, una empresa que es propiedad de más de 3’500.000 personas en manos de dos o tres, uno de ellos es un reconocido inversionista extranjero. Así no se puede. Cuando el gobierno está mandando mensajes de que hay que construir una sociedad equitativa, incluyente, en donde hay que luchar contra las brechas de desigualdad terribles que hay en esta sociedad, entonces al ejemplo más exitoso le endilgan una serie de circunstancias delictivas que no ocurrieron, la debilitan, la marchitan, la desaparecen y se la entregan a la propiedad de unos pocos.

 

Usted se refiere a “un reconocido inversionista” que está detrás de Saludcoop, ¿quiénes están interesados en la EPS?

Más de individualizar posibles pretendientes, lo que a uno lo sorprende es que el Gobierno diga que la solución al tema de Saludcoop pasa por crear muchas sociedades de capital o sociedades por acciones para, a través de ellas, entregar la operación y los servicios. Nosotros decimos que por qué no utilizamos un mecanismo jurídico probado hasta la saciedad, no solo en Colombia sino en el mundo entero, que es el modelo de empresas cooperativas y mutuales de salud. La connotación de entidades sin ánimo de lucro hace que este tipo de organizaciones reinvierta todo su excedente para mejorar su capacidad y prestar más y mejor servicio.

 

¿Cuál es, entonces, la diferencia entre unas empresas de capital que prestan servicios de salud y unas entidades solidarias que llevan a cabo una labor similar?

En la lógica de las empresas de capital, que es legítima, la ganancia es del inversionista, él tiene el derecho de llevárselas y de hacer lo que a bien tenga; también puede reinvertir, pero eso no ha ocurrido dentro de los 16 años anteriores en donde las utilidades no fueron reinvertidas. ¿Dónde están las clínicas de las EPS privadas? ¿Dónde está el mejoramiento de la calidad del servicio? Ellos, legítimamente, aplicaron su modelo.

El modelo de nosotros es de empresas que crean riqueza, solo que nuestra vocación de retorno es la que no tiene ánimo de lucro. Entonces reinvertimos todo ese excedente, eso nos permite fortalecer nuestra presencia, crear esta enorme empresa al servicio de los colombianos.

 

¿No hay en el país una EPS con una cobertura similar a la de Saludcoop, que asuma sus funciones?

Ni siquiera la Nueva EPS tiene una cobertura como la de Saludcoop. Es tan importante la infraestructura y la cobertura de servicios de la EPS cooperativa que ninguna hoy podría asumir la operación y como sabemos que ninguna lo puede hacer le estamos proponiendo al Estado que no la privatice. El Gobierno ha dicho en varias oportunidades que con los antiguos dueños no va a hablar, entonces no queremos que nos expropien, no hemos sido ni oídos ni vencidos en juicio, no nos han quitado la propiedad, no nos la han extinguido.

 

¿El Gobierno Nacional los va a expropiar?

El mensaje que nos han querido dar es que nos van a expropiar. Sin embargo, no queremos entrar en la contención, ni en debates. Lo que queremos que el Gobierno conozca es que hay una salida al problema estructural de la salud y las formas cooperativas y solidarias de propiedad, trabajadores, prestadores, sector cooperativo, afiliados, se convierte en una poderosa alternativa para superar este agudo problema, que es la prestación del servicio de salud que no es otra cosa que garantizar el derecho a la vida y al bienestar de todos los colombianos.

 

En ese sentido, el Gobierno ha sido ambiguo con el sector solidario. Lo digo por el caso de Saludcoop y ahora con la comisión de sabios que busca que las entidades sin ánimo de lucro empiecen a tributar.

Entre más avanza la misión tributaria, más creo que lo que ha habido es una profunda desinformación, un desconocimiento de lo que las auténticas organizaciones no lucrativas hacen por la sociedad. Hace quince días en un encuentro cooperativo que hubo en Bogotá, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, reiteró algo que hemos venido diciendo desde hace muchos años en el gremio y es que el régimen tributario especial es una forma, una decisión de política pública del Estado para promover que existan, se mantengan y se consoliden en el tiempo este tipo de organizaciones porque es evidente, y en Colombia tenemos miles de demostraciones de esto, que una cooperativa, un fondo de empleados o una asociación mutual auténtica no solamente genera desarrollo social y económico, sino que es generadora permanente de bienes públicos: democracia, participación, organización, formación de liderazgo, institucionalidad, entre otras.

Eso no lo podría hacer el Estado porque no le alcanzan los recursos, porque siempre serán escasos, y tampoco le interesa a las empresas de capital porque no les genera rentabilidad o retorno financiero y entonces para ellos termina no siendo un negocio.

Las cooperativas actuamos para resolver esos problemas: unimos a la gente, les resolvemos los problemas, activamos y servimos de escenario de desarrollo. El ministro de Hacienda dijo que no se trataba de hacer tributar a las cooperativas o a las demás entidades sin ánimo de lucro, de lo que se trata es de controlar que las auténticas puedan seguir teniendo ese régimen y que quienes de manera indebida y de pronto hasta ilegal, han abusado de la figura, que tributen. Eso lo hemos dicho en Confecoop desde hace muchísimos años.