Los nuevos retos de la ganadería tras la Agenda Interna de Competitividad
En la más reciente actualización de la Agenda Interna - Plan Regional de Competitividad del Huila, la ganadería no ocupó una posición representativa dentro de las apuestas productivas pese a que el sector venía solicitando su inclusión desde que la agenda fuera creada en 2005.

Diez años después de la creación de la Agenda Interna de Competitividad del Huila para establecer las principales apuestas productivas de la región, la más reciente actualización del documento que la soporta, hecha por el Gobierno Departamental, estableció cambios para algunos renglones económicos en el Huila, pero también definió retos y caminos para gremios como el de la ganadería, el cual no consiguió establecerse como apuesta productiva, contrario a la agroindustria de base tecnológica de la cual hacen parte los cárnicos y lácteos como subsector.
Pese a que el Comité de Ganaderos del Huila instó al despacho competente del gobierno a realizar un estudio para valorar las apuestas que fueron creadas después de diez años, los ganaderos no quedaron conformes con el resultado de la actualización, pese a que se priorizó el sector de agroindustria de base tecnológica, el cual guarda el subsector de cárnicos y lácteos.
“Aquí lo que el gremio siempre pidió fue dejar el renglón de la ganadería, de carne y leche dentro de la apuesta. Cuando manifestamos nuestro inconformismo el día de la socialización del estudio, el gremio sustentó por qué después de una década el sector que se debe priorizar es el de la ganadería y no la agroindustria de base tecnológica. Porque para llegar a agroindustria de cárnicos y lácteos necesitamos la materia prima y evolucionar en la producción primaria”, indicó Luceni Muñoz Bermeo, directora ejecutiva de esa organización gremial.
La titular de la agremiación manifestó también que previo al proceso de actualización del plan, fue entregada una serie de soportes para sustentar porqué la ganadería debía quedar como renglón priorizado en las apuestas.
“Después de analizar todos estos temas, el grupo consultor define que en la actualización de las apuestas hay unos sectores que salen, como por ejemplo el tabaco, y que hay otros que son nuevos y que proyectan componentes interesantes, y son el tema de cárnicos y lácteos dentro de la apuesta de agroindustria de base tecnológica”, dijo Muñoz Bermeo.
Y es que el sector ganadero del Huila viene solicitando a los gobiernos departamentales que han pasado en los últimos diez años, ser incluido como apuesta productiva de la región, teniendo en cuenta factores como la generación de leche y carne no solo para el autoconsumo, sino como garantía para la seguridad alimentaria de todo un departamento.
Según las cifras del comité, la ganadería en el Huila representa casi el 70 por ciento del PIB pecuario departamental y le genera a la región alrededor de 90.000 empleos directos, lo cual se convierte en una importante participación para la dinámica de empleabilidad en la región.
Lácticos y cárnicos, en transición
Aun cuando la ganadería no fue considerada como apuesta productiva de la región, la actualización del plan de competitividad contempló a la agroindustria de base tecnológica como un importante sector, dentro del cual se hallan lácteos y cárnicos.
“La connotación adicional que vemos es que este subsector de lácteos y cárnicos queda en transición, es decir en observación”, indicó Muñoz Bermeo, y añadió que “tenemos que partir de una evolución y de una proyección del sector primario en el caso del Huila, leche y carne, y no dentro de agroindustria de base tecnológica. Además, la actividad ganadera como actividad primaria es un sector por el que no podemos registrar resultados a corto plazo, lo que puede hacer por ejemplo, el sector de los cereales. El tema de haber sido considerados en transición nos obliga a que el sector de lácteos y cárnicos sea evaluado en dos años a diferencia de los otros sectores que serán evaluados a cinco años”.
En este sentido, la titular indicó también que desde el sector ganadero se hará un trabajo articulado desde todos los eslabones de la cadena, como un reto complejo, destacando a su vez la presencia de plantas ganaderas con muy altos niveles de cumplimiento de estas en materia jurídica.
“A dos años veo muy difícil el tema de avanzar en agroindustria. Contamos con una planta como es Ceagrodex, para el procesamiento de los cárnicos, con muy altos niveles de cumplimiento, porque fácilmente puede ser una planta en un mediano plazo categorizada como especial para exportar, eso es una bondad que tenemos como agroindustria cárnica”, dijo la dirigente gremial.
Asimismo, en materia empresarial y de agroindustria, Muñoz Bermeo resaltó la visión de ciertos emprendimientos de la región. “Contamos con empresarios huilenses muy visionarios y que tienen un avance interesante en el tema, a lo que debemos sumarle los consumidores primarios, para garantizar así una carne de buena calidad y es la Salsamentaría Las Brisas. Ellos son unos empresarios que están manejando agroindustria cárnica y ahora podemos decir que hemos avanzado con ellos en ese tema”.
Y es que, pese a que el Gobierno Departamental ha desconocido a la ganadería como apuesta productiva, la presencia de una agroindustria que ha visto la evolución de empresas huilenses, permitió sustentar la inclusión de la ganadería en la agenda, así fuera en lácticos y cárnicos.
“Tenemos unas plantas regionales que vienen haciendo unos grandes esfuerzos con la leche pese a que esta tiene unos precios más sensibles que la propia carne. Pero tenemos unas plantas como El Trébol, Surcolac; en el sur la empresa Reyma de Tarqui que tiene unos mercados bien posicionados en la región y algunas ya han salido a captar mercado en otros departamentos del país”, puntualizó Muñoz Bermeo.
Para la ganadería huilense, la actualización de la agenda fue determinante. “El reto será contribuir desde el gremio y la producción primaria para poderle dar condiciones a ellos en leche y carne de buena calidad y llegar por supuesto a esta industria de base tecnológica”, concluyó la directora ejecutiva del Comité.