Fedecacao pretende renovar hasta quinientas hectáreas en el Huila
La Federación Nacional de Cacaoteros pretende frenar el declive en producción cacaotera en el Huila de los últimos años y que se intensificó por la pérdida de cerca de mil hectáreas cultivadas en la zona de influencia del proyecto hidroeléctrico El Quimbo. DIARIO DEL HUILA conversó con Eduard Baquero López, presidente ejecutivo de la institución gremial.

¿Cuáles son las cifras reales del área de cultivos de cacao que se perdieron en el Huila por la construcción del proyecto hidroeléctrico El Quimbo?
La pérdida de área cacaotera está cercana a las mil hectáreas que va a tener un efecto negativo en la producción. Hemos analizado esta situación de rebaja en el Huila de los últimos años que empeorará por esa construcción.
¿Eran áreas altamente productivas?
Eran de agricultura tradicional. En algunos casos se aplicaban algunos conceptos de tecnología pero no significaban alta productividad. Sin embargo, las consecuencias no dejan de ser complejas.
Gigante, municipio líder en producción y donde se fundó la Federación, es uno de los principales afectados, ¿qué se va a hacer desde la Federación para mitigar ese panorama?
Sí, en 1962 nació Fedecacao en Gigante. Hay algunas presiones de mucha gente que nos han exigido que demos apertura a una oficina en este municipio. Estamos buscando alternativas, porque es un ícono no solo para la institución sino también para el país cacaotero, para ver cómo rehabilitamos esas plantaciones y la posibilidad de nuevas áreas con las condiciones propicias para mantener el cultivo. El cacao en Gigante y el Huila es un asunto cultural. La gente lo aprecia y así lo hemos visto desde la Federación.
¿Por qué cree que el Huila ha perdido posiciones en la producción de cacao a nivel nacional?
El departamento del Huila viene descendiendo en su producción y queremos que esa curva se detenga y empiece un crecimiento que reactive la actividad cacaotera. En los últimos años han llegado otros cultivos como los frutales o el arroz que la han desplazado y la situación se agravó por el proyecto El Quimbo.
¿Cuáles son los indicadores de productividad de Colombia y del departamento del Huila?
La productividad en Colombia está sobre los 360 kilogramos por hectárea al año y el Huila puede estar en esa misma tónica. Queremos continuar con los proyectos de investigación y de nuevas plantaciones. Allí trabajamos con el Ministerio de Agricultura. Además, estamos identificando áreas con condiciones adecuadas para el establecimiento de nuevas áreas de siembra. En el Huila la preocupación es el requerimiento de riego.
¿Tienen calculado cuánto se va a renovar en el Huila durante 2015?
Con los recursos prometidos por el Ministerio de Agricultura para renovación la idea es intervenir entre trescientas y quinientas hectáreas. Lo estamos negociando y es el punto de partida para iniciar.
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2014: Participación y recursos logrados
¿Cuáles fueron los logros de la cacaocultura en el 2014?
Tenemos un balance muy positivo y hay muchas cosas para destacar del año anterior. Una de las principales fue la realización de las elecciones del gremio en todo el país. La participación superó el 150% comparado con las del año 2010. Esto representa la democracia que existe en la Federación Nacional de Cacaoteros.
¿Cómo les fue en el Congreso Nacional Cacaotero?
Tuvimos 61 delegados de todo el país, cuatro eran del Huila. Resaltamos que después de casi veinte años, participó el Ministerio de Agricultura, en este caso, en cabeza de Aurelio Iragorri. Él escuchó a viva voz los avances que hemos logrado e hizo el anuncio de renovación de plantaciones en todo el país, con una inversión de 20.000 millones de pesos a través de la Federación.
Cumplió usted un año en la Presidencia Ejecutiva, ¿cómo evalúa ese lapso de trabajo en la Federación Nacional de Cacaoteros?
La administración que iniciamos en diciembre de 2013 ha estado encaminada a escuchar a los productores, en aclarar muchas cifras. Sobre todo rumores malintencionados acerca de los recursos que recauda la Federación. A todos les dijimos los retos y lo que hacemos en realidad. También hemos hecho reuniones y al Huila lo visité en cuatro ocasiones para hablar con los comités municipales y departamentales.
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Fedecacao exportó a Europa de manera directa en 2014
La Federación por primera vez hizo exportaciones de manera directa, ¿cuáles son las cifras?
Sí, es un gran avance. Por primera vez la Federación logró exportar directamente a Europa trescientas toneladas de cacao. La importancia es que el cacao colombiano es fino de sabor y aroma y queremos consolidarlo en el mundo. Empezamos en el Viejo Continente al enviar a España, Holanda y Alemania y eso significa conseguir mejores condiciones de precio para los productores.
¿Cuál es el mecanismo de exportación?
Es una venta externa de Fedecacao cuyo proyecto piloto es en el departamento de Santander. Por ahora tenemos unos puestos de compra allá y les compramos a los productores un material de calidad, con buena fermentación y secado. Este año vamos a hacer lo mismo en otras regiones como en el Huila, donde aspiramos tener un puesto de compra antes de finalizar el año.
¿Y en la comercialización local cuáles fueron los resultados?
A nivel local logramos iniciar compras de cacao que vendimos a la industria nacional con una calidad adicional. El objetivo siempre es llevarle más ingresos a los cacaocultores. Sin embargo, es importante aclarar que los precios no dependen de Fedecacao ni de las empresas sino un mercado de oferta y demanda que define el mundo, principalmente en África.
¿Cómo afecta el monopolio de grandes compañías en el precio pagado a los productores?
Hablar de monopolio es un poco arriesgado. En el país hay cerca de treinta empresas que compran cacao, dos industrias muy grandes que también hacen lo mismo. En materia de precios tenemos una situación favorable, los que se están pagando en el Huila por ejemplo, están alrededor de los seis mil pesos por kilogramo, en cualquier municipio.
¿Precisamente cómo evalúa el mercado actual en el mundo?
Lo que dicen los analistas es que el precio va a estar por encima de los cinco mil pesos por kilogramo. De ese modo, llamamos la atención de los productores a que, si bien el precio es bueno, los cultivos de tardío rendimiento van a tener también momentos de bajos valores que no puede controlar nadie. La intención es tener una mayor productividad por unidad de área para favorecerse en cualquier situación.
¿Cómo se ha avanzado en ese sentido?
Hay una tecnología aplicada por muchos que representa productividades por encima de mil kilogramos de cacao. Esas personas son las que aprovechan las condiciones actuales. Tenemos que producir más. En el 2014 liberamos ocho clones de cacao con la aprobación del Instituto Colombiano Agropecuario- ICA- que serán usados para las nuevas plantaciones con una especial tolerancia a las principales plagas, una altísima productividad y adaptación al medio. Es un logro histórico para la Federación y fueron entregados a los productores.