sábado, 13 de septiembre de 2025
Economía/ Creado el: 2015-09-23 08:37

En el Huila se dijo que éramos los seres del mal: DANE

Censistas a lomo de caballo o en lancha, mitos y un mar de datos es una enumeración posible sobre el Censo Nacional Agropecuario. Mauricio Perfetti del Corral, director del Departamento Administrativo Nacional de Estadística -DANE- realizó ayer en Neiva el Tercer Foro de Socialización del Tercer Censo Nacional Agropecuario. DIARIO DEL HUILA dialogó con él sobre lo que fue realizar este estudio. El departamento les generó ciertas preocupaciones.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | septiembre 23 de 2015

Mauricio Perfetti del Corral, director del Departamento Administrativo Nacional de Estadística -DANE- visitó el Huila una vez más. En esta ocasión no vino a persuadir sobre la importancia del Censo Nacional Agropecuario para llamar la atención de los campesinos huilenses que tenían recelos a la hora de recibir a los censistas. Calificó el estudio como un patrimonio estadístico de Colombia. DIARIO DEL HUILA habló con él.

En esta fase de entrega de resultados, ¿cuál es el balance que hace del Censo Nacional Agropecuario?

Lo más importante es que Colombia tiene ya un tercer Censo Nacional Agropecuario realizado con información que se viene entregando al país semana sobre los temas más importantes y que 45 años después del último censo, se puede decir que cuenta con un estudio que alcanzó una cobertura cercana al 99% luego de haber recorrido más de 110 millones de hectáreas y que muestra claramente qué hay y qué necesita el campo colombiano. 

¿Qué tantos obstáculos se presentaron en esa tarea de recorrer la Colombia rural?

El día que presentamos el reporte preliminar, el presidente de la República dijo que se tuvo mucha paciencia, que él era testigo de eso, y coraje para haber hecho el Censo. El clima, la geografía del país, los medios de transporte, hay muchas anécdotas. Desde el helicóptero se veía a los censistas del DANE por unas lomas que parecen increíbles.

Algunas de esas anécdotas…

Unas censistas en Santander recorrieron a caballo todo un municipio durante más de un mes porque no había otra manera de poder llegar a los sitios más recónditos. En alguna ocasión algunos medios hicieron unos comentarios de que los perros eran la mayor dificultad del Censo Agropecuario, pues hubo un censista perseguido por un avestruz en el campo colombiano. En el litoral Pacífico en el Cauca se nos volteó una lancha con el personal sin que pasara nada, por fortuna. Muchos padecieron chikunguña.

¿En seguridad?

Nosotros definimos una coordinación con las autoridades civiles, policiales y militares y se cumplió a cabalidad. En los sitios en los que había hacerlo se tomaron las medidas necesarias, no hubo dificultades y prueba de eso es que llegamos a casi todo el país.

Hubo mucha prevención frente al Censo Nacional Agropecuario…

Al Huila me tocó venir muchas veces porque aquí había personas que empezaron a rodar la historia de que el Censo era para cobrar impuestos, para aumentar los impuestos catastrales, que el DANE venía a llevarse las semillas de los campesinos, que éramos los seres del mal. Una cantidad de historias. 

¿Cómo manejaron esas prevenciones, mitos, sobre el Censo?

Como dijo el presidente, con paciencia y muchas venidas mías al Huila a sentarme en las radios comunitarias, a hablar de la importancia del Censo, a decir que no era para eso sino para poder hacer una política de desarrollo rural y agropecuario apropiado respecto a las cosas que hoy pasan en el campo nacional. Persistir fue lo que hicimos. 

¿Ocurrió lo mismo en otros departamentos de Colombia??

Lo del Huila fue un caso particular donde hubo ese tipo de situaciones. No sabría decir cuáles fueron las razones.

En lo personal, ¿cuál es la satisfacción que le deja haber realizado este Censo Nacional Agropecuario?

Me deja, primero, un inmenso agradecimiento con los 25.000 censistas hombres y mujeres que participaron, sin ellos esto hubiera sido imposible de hacer; también al gran equipo humano del Dane del nivel central, de todas las subsedes y territoriales tanto en la fase pre censal, como la operativa y lo que estamos haciendo ahora. Es una gran satisfacción como DANE de haberle cumplido al país, a las zonas rurales y al presidente, quien específicamente el día de mi posesión me encomendó esa labor.

***

El trabajo continúa para “los hacedores de política”

Ya con esos resultados que se han ido entregando, ¿cuáles han sido las respuestas y las reacciones?

Creo que cuando son presentaciones de más de dos horas, a mí me llama la atención que la gente se sienta, va siguiendo todo este mundo tan grande de información, de perspectivas y atienden, miran, preguntan. A nosotros nos corresponde hacer el Censo y entregar los resultados, los hacedores de política les concierne hacer uso de esta información para poder contribuir a mejorar esas condiciones de desarrollo rural y agropecuario del país.

Van cuatro entregas de informes, ¿qué falta?

Nos faltan ocho entregas en las que se abordan los temas étnico,  los detalles sobre maquinaria e infraestructura, la mujer rural- un ítem muy importante-, lo ambiental, la producción y los productores, los Parques Nacionales Naturales y todas las actividades no agropecuarias. Son grandes asuntos y toda una gran tarea por hacer. Estamos muy contentos de entregar al país y a las regiones, todo este patrimonio estadístico que es el Censo Nacional Agropecuario.

Algunos indicadores para reflexionar…

Los resultados que estamos mostrando indican que hay menor población residente en el área rural dispersa respecto al censo de 2005, que hay un proceso de envejecimiento, unos grupos de jóvenes que ya no están- sobre todo hombres-. Y allí se debe pensar en qué hacer con esta situación.  Hay departamentos que tienen un índice de envejecimiento supera el 70, una cifra muy alta y el relevo generacional se debe hacer para que las oportunidades retengan a esos jóvenes en el campo y aprovechar las potencialidades del país.