Agro en alerta por El Niño
En diferentes comunicados, sectores agropecuarios del país han manifestado su preocupación por los efectos del fenómeno de El Niño y las estrategias que tienen para enfrentarlo. También hay oportunidades de “aprovecharlo”.

El sector agrario expresa su preocupación por la temporada seca provocada por el fenómeno de El Niño y evalúan estrategias para mitigar los efectos del mismo. Los ganaderos pondrán a disposición bodegas de alimentos; los cerealistas prendieron la alerta por “la peor crisis de los últimos años” y académicos consideran que los próximos meses también serán la oportunidad para desarrollar obras.
Dos bodegas en el Huila
La Federación Colombiana de Ganaderos -Fedegán- y el Fondo Nacional del Ganado-FNG-, con recursos del Ministerio de Agricultura, pondrán a disposición 5435 toneladas de suplementos que serán repartidos en diferentes lugares del país. En el Huila se adecuarán dos bodegas, una en Neiva y otra en Garzón.
La estrategia tiene como objetivo que los ganaderos en diferentes zonas del territorio nacional afectadas por la sequía cuenten con suplementos alimenticios a precios inferiores a los del mercado (vea tabla de precios y topes). El monto designado para la ejecución de esta iniciativa es de $2450 millones. Melaza, heno, silo de maíz, sal mineralizada, Mezclagán y semilla de algodón estarán disponibles en los sitios de acopio.
Las cincuenta bodegas se abrirán en los departamentos de Antioquia, Arauca, Atlántico, Bolívar, Boyacá, Caldas, Casanare, Cauca, Cesar, Córdoba, Cundinamarca, Huila, La Guajira, Magdalena, Nariño, Norte de Santander, Putumayo, Santander, Sucre y Tolima. “Las bodegas se establecerán en los sitios donde hay mayor afectación climática por la sequía. 27 son principales y 23 satélites”, indicó Marceliano Acosta Pérez, gerente de Proyectos Estratégicos de Fedegán.
“La peor crisis de los últimos años”
En una carta enviada por la Federación Nacional de Cultivadores de Cereales y Leguminosas - Fenalce- al ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Rubén Darío Lizarralde Montoya, manifestaron que “Al terminar el primer semestre del presente año, el subsector maicero colombiano se enfrenta a la peor crisis de los últimos años por la estruendosa caída de los precios internacionales y la acentuada sequía en Córdoba, en los valles del río Magdalena y el valle geográfico del río Cauca, la zona andina, los santanderes, La Guajira y el sur del Cesar”.
El panorama es tan complejo que indican que han optado por hacer de sus lotes, espacios para la producción pecuaria. “Una situación tan extraordinariamente grave no nos permite comprometernos con su invitación a estructurar un modelo de ‘negocio-país’ para alcanzar la siembra de un millón de hectáreas en maíz y soya, nos obliga a encender las alarmas e invocar de los diferentes estamentos la solidaridad y solicitar del gobierno medidas extraordinarias que nos permitan al menos salvar los costos de la inversión agrícola, defender el trabajo y la producción nacional de maíz”, exhortaron al alto funcionario en la misiva.
Ante esta coyuntura, la junta directiva de Fenalce aplazó hasta nueva orden su congreso gremial nacional programado para finales de agosto y van a dedicarse a trabajar junto con el gobierno central, los departamentos y municipios afectados, “para que se le preste la debida atención a esta problemática social y agroalimentaria del maíz”.
Una oportunidad para construir
Por otra parte, Emel Vega, meteorólogo y profesor de la Universidad Nacional, afirma que con la temperatura superficial del mar a 2 °C por encima de la norma durante más de cuatro meses consecutivos, se considera la existencia de un evento de El Niño. Si bien afectará los sectores productivos también es visto como una oportunidad para construir vías, pistas aéreas y otras obras de infraestructura.
El experto explicó que “se puede aprovechar este tiempo para construir obras civiles como la extracción de los sedimentos de ríos, arroyos y canales para que tengan mayor capacidad durante los eventos de lluvias; y el fortalecimiento o construcción de muros de contención y jarillones sobre los ríos Magdalena y Cauca. Al mismo tiempo, se pueden construir reservas de agua en aquellas zonas donde la agroindustria sea extensiva o donde las sequías son muy extensas y desarrollar proyectos de infraestructura vial”.
Pronósticos del Ideam
De acuerdo a los últimos modelos proyectados, existe una probabilidad del 70% de que a comienzos del segundo semestre del año (julio-agosto-septiembre) se den condiciones para el desarrollo de la fase inicial de un evento de El Niño y de 80% de que su fase de desarrollo se presente en octubre, noviembre y diciembre.
La actual temporada semiseca del año, unida a la segunda temporada de lluvias de octubre, noviembre y diciembre, con valores por debajo de lo normal, se unirá con los del primer trimestre de 2015, serán los de máximo impacto de El Niño, es decir el fenómeno de variabilidad climática se une con la temporada seca habitual de los meses de enero, febrero y marzo.
* Fuente: Ideam
Características y consecuencias de El Niño
- Se caracteriza por un aumento generalizado en la temperatura del mar desde el centro del océano hasta las costas de Sudamérica.
- Ocasiona alteraciones oceanográficas, meteorológicas y biológicas. Ejerce una influencia destacada en el comportamiento climático del país.
- Su influencia se manifiesta en que si se forma el fenómeno de El Niño, las temporadas secas se acentúan y las húmedas podrían ser deficitarias particularmente en las regiones Caribe y Andina.
- Su proceso se presenta en cuatro fases: inicio-desarrollo-madurez-debilitamiento.
- Su nombre lo establecieron los pescadores peruanos que observaban que se producía a finales de diciembre, en el periodo de Navidad, por asociación con la venida de El Niño Jesús.
*Fuente: Ideam
Sectores que sufrirán las consecuencias de El Niño
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales -Ideam- llamó la atención a diversos sectores que se afectarían por el fenómeno de El Niño. “El impacto está más relacionado con la vulnerabilidad de los recursos naturales y de las diferentes actividades y regiones del país, así como de los sectores productivos nacionales y locales”, explica. Quienes deben tomar medidas urgentes son:
- Sector abastecimiento de agua para consumo humano: reducción oferta hídrica.
- Sector ambiental: Incremento de incendios forestales.
- Sector agropecuario: déficit hídrico.
- Sector salud: incremento de enfermedades tropicales.
- Sector hidroenergético: sistemas hidrográficos de Colombia donde se encuentran los embalses se reducen.
*Fuente: Ideam