Detecte a tiempo las enfermedades auditivas
Ruta de promoción y mantenimiento de la salud garantiza valoración con tecnología blanda de la salud auditiva y comunicativa para todos los niños.

Bajo el lema "Que la pérdida auditiva no te limite" ayer se conmemoró en Colombia el Día Mundial de la Audición, un llamado a la prevención y detección temprana de un elemento que se convierte en la cuarta causa de discapacidad a nivel mundial.
Según los datos tomados del Registro Individual de Prestación de Servicios de Salud –RIPS-, Colombia presentó en 2018 un incremento en el número de personas atendidas por eventos del oído, audición y comunicación.
Entre el 2011 al 2018 se registró un aumento en el número de diagnósticos de hipoacusia neurosensorial bilateral como la primera causa de enfermedad del oído y de la apófisis mastoides. Las personas que más consultan por esta causa se encuentran en el rango de 19 a los 26 años, seguidas de niños de 1 a 5 años y los adultos entre 27 y 44 años.
La Organización Mundial de la Salud estima que a 2050, si no se toman medidas, el número de personas con pérdida auditiva a nivel mundial podría duplicarse.
La mayoría de los adolescentes y adultos jóvenes escuchan música (a través de sistemas de audio personales) de una manera que los pone en riesgo de pérdida auditiva. Tal afectación es muy preocupante ya que es irreversible, mientras que su prevención se puede dar mediante una escucha segura. Este es, para nuestro país, uno de los principales retos a afrontar.
En Colombia, a través de la Ley 1980 de 2019 se creó el programa de tamizaje neonatal en Colombia, que incluye la valoración auditiva que corresponde a la detección de recién nacidos con alteraciones que pueden llevar a hipoacusia, afectar su capacidad auditiva y de esta forma, amenazar el desarrollo integral del niño o la niña en el curso de la vida.
Además, dentro de los avances en nuestro país, está la inclusión en la ruta de promoción y mantenimiento de la salud que contempla la valoración con tecnología blanda de la salud auditiva y comunicativa para todos los niños en primera infancia.
Recomendaciones
El volumen recomendado de cualquier sonido está por debajo de los 85 decibeles para una duración máxima de ocho horas al día.
Respetar los niveles seguros de exposición al ruido. Determine el volumen exento de riesgos en su aparato de audio personal ajustándolo a un nivel cómodo en un ambiente tranquilo, de modo que no supere el 60% del volumen máximo.
En lugares ruidosos manténgase lo más lejos posible de fuentes de sonido como los altavoces. Trasladarse a lugares más silenciosos dentro de un local puede reducir el nivel de exposición.
Limitar el tiempo diario de utilización de los aparatos de audio personales. Aunque es importante mantener el volumen bajo, la limitación de su uso a menos de una hora al día contribuirá enormemente a reducir la exposición al sonido.
Acuda a un profesional especializado en salud auditiva en caso de dificultad para oír sonidos agudos como el timbre, el teléfono o el despertador; para entender el habla, sobre todo por teléfono; o para seguir conversaciones en ambientes ruidosos, como restaurantes o reuniones sociales.
Recuadro:::
Las patologías más comunes
Es frecuente que algunas ocasiones, a causa de agentes externos suframos enfermedades temporales en nuestros oídos. La mayoría de las veces son como consecuencia de factores que no podemos evitar, por eso si en algún caso sufres alguna de estas cinco patologías auditivas que mencionamos abajo, no te asustes. Solo tienes que ir a un especialista si los síntomas se agravan.
Conoce las patologías comunes del oído:
Hipoacusia
La hipoacusia es una patología del oído que produce sordera parcial o una acusada pérdida auditiva. Generalmente los síntomas se manifiestan de diferentes maneras. Pueden percibirse sonidos más fuertes de lo que realmente son, dificultad para seguir el hilo de la conversación cuando hay varios interlocutores, mayor dificultad para entender voces femeninas que voces masculinas, difícil distinción de sonidos agudos o voces que se emiten entre dientes… Existen también otros síntomas algo más complejos como perder el equilibrio o sentirse mareado (más común en un neuroma acústico), presión en el oído o acúfenos.
Actualmente, existen diferentes tipos de hipoacusia: la hipoacusia neurosensorial, conductiva o mixta. La primera se produce en el oído interno y la segunda es una enfermedad del oído externo y oído medio.
Cuando se produce en una etapa prelingual, es decir, antes de que el bebé comience a hablar, puede no presentar ninguna sintomatología. Sin embargo, en algunos casos pueden producirse síntomas alarmantes, como que el bebé no reaccione ante ruidos o que no pueda alertar de algo mediante balbuceos. Por norma, todo recién nacido debe someterse a un estudio auditivo para detectar problemas de este tipo. Pero si no se observan hasta más tarde, entonces habrá que consultar con un pediatra, y deberá realizar una audiometría tonal, una logoaudiometría, y una impedanciometría.
En ningún caso, esta patología forma parte de las enfermedades raras del oído.
Pérdida auditiva bilateral
Esta patología se produce cuando hay una pérdida auditiva en ambos oídos a la vez y en el mismo grado. Puede producirse por varios motivos, pero los más comunes son la exposición excesiva a una fuente de sonido muy elevada, el paso de la edad o también por factores genéticos. En este caso, el tratamiento más frecuente es el uso de audífonos en ambos oídos, dependiendo del grado de sordera. Otro tratamiento común sería la cirugía.
El diagnóstico para la pérdida auditiva bilateral
Para poder implantar un audífono en el oído de la persona con pérdida de audición, se hace necesario haber practicado una revisión de oído previa para determinar el grado de pérdida. Si la pérdida auditiva es muy severa, el otro tratamiento común a tener en cuenta sería la cirugía.
Enfermedad de Ménière
Es razonablemente común. Se produce cuando el líquido de los laberintos, situados en el oído interno, tiene una presión demasiado alta. Estos laberintos, junto con otro nervio del cráneo ayudan al cuerpo a mantener el equilibrio.
Cuando aparece la enfermedad de Ménière se sintomatiza de diversas maneras, pero la más común es la pérdida de equilibrio o los molestos vértigos. También es muy frecuente que se presente hipoacusia variable o acúfenos. Quizás el más molesto sea el vértigo, con los síntomas que ello conlleva: náuseas, vómitos, sensación permanente de mareo…
No se conoce un tratamiento eficaz para acabar con la Enfermedad de Ménière pero, tal y como recomienda el portal Medtronic, se ha comprobado que con la ingesta de diuréticos y alimentos bajos en sal se pueden aliviar considerablemente los síntomas.
Timpanoesclerosis
Esta afección se debe a secuelas de periodos de inflamación en el oído medio. Normalmente, con la timpanoesclerosis, se ve afectada la membrana timpánica, pero también pueden verse involucrados la ventana oval, la ventana redonda y los huesecillos.
Los síntomas pueden ir desde una hipoacusia leve a una hipoacusia severa. Dependiendo de la gravedad de la misma habrá que aplicar cirugía o no para tratarlo.
¿Cómo evitar la timpanoesclerosis?
Si la timpanoesclerosis ha sido tratada de forma tardía, los audífonos son una de las soluciones auditivas más eficaces para tratar esta enfermedad del oído y poder recuperar la capacidad auditiva.
Perforación timpánica
Agujero o rotura en el tímpano, también conocido como membrana timpánica que se produce por causas como un ruido muy fuerte cerca de los oídos, un objeto dentro del mismo, una lesión…
Se manifiesta con leve dolor, secreción, acúfenos y vértigos. Para su tratamiento, la mayoría de las veces, si la perforación es pequeña, puede cicatrizar solo. En caso de que la lesión sea más grave habría que ayudarse de parches en la membrana timpánica o colocando un gel en la misma.
Cuando estas dolencias sean más graves o comiencen a ser muy dolorosas, tendrá que acudir a un especialista que pueda tratar más de cerca la patología en cuestión.