lunes, 21 de julio de 2025
Cultura/ Creado el: 2015-11-20 11:16

San Agustín, 225 años de ser la casa universal de la cultura agustiniana

De acuerdo con documentos históricos, el municipio se fundó tres veces.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | noviembre 20 de 2015

El poblado de San Agustín se fundó entre los años 1608 y 1612, con los indios Mulale y Laculata por Pedro Sáenz de la Guía, quien cumplía órdenes del gobernador de Neiva y Timaná, Don Pedro de Velazco. En 1928, San Agustín tenía ya una vieja iglesia de bahareque con techo pajizo. (Arch. 3, c, IV, 892).

Esta primera fundación fue destruida por los andakíes en la primera mitad del siglo
XVIII, siendo reconstruida en 1796 con indios llevados de la provincia de Almaguer, probablemente en el mismo lugar que ocupara antes.

Los habitantes del Alto Magdalena, al igual que sus vecinos y aliados los Páez y Guanacas, no vivían en pueblos compactos sino en viviendas aisladas, dispersas en la región. Lo demuestran las numerosas plataformas de habitación que en diferentes tamaños están diseminados en las vertientes de la cordillera oriental, todos los bohíos eran de techo pajizo.

Con base en las investigaciones, que acerca del tema ha realizado Luis Duque Gómez (1964: 23) en un documento inédito que se conserva en el Archivo Nacional de Bogotá y que lleva por título “Indios de Timaná”, contiene datos interesantes acerca de la primitiva fundación, la cual coincide con los datos presentados por Friede cuando expresa que esta primera fundación de San Agustín fue destruida por indios andakíes, complementando esta información con el siguiente dato:

Con el traslado de los pocos habitantes que habían quedado en San Agustín, hacia Timaná y Naranjal, la zona quedó despoblada por un largo tiempo, motivo por el cual quedaron en calidad de realengas, situación que aprovechó el doctor Mauricio Valderrama, (alcalde ordinario de la Villa de Timaná en ese tiempo) para pedirlas como parte de su propiedad.

Las tierras de San Agustín fueron adjudicadas al doctor Mauricio Valderrama por el capitán Don Diego de Higuerón Ponce de León, juez visitador de tierras y posiciones en el año de 1722.

Años más tarde, en 1749, el doctor de Valderrama dona las tierras de San Agustín a Alejandro Astudillo, su esposa e hijos, con el propósito de que poblasen esta área, motivo por el cual se intenta una segunda fundación del poblado.

Segunda fundación de San Agustín

La segunda fundación de San Agustín se inicia con la donación que de estas tierras hace el doctor de Valderrama al señor Alejandro Astudillo y familia, originarios de Almaguer.

Esta donación, se constituye en el inicio de un largo pleito por las tierras de San Agustín entre el doctor Mauricio de Valderrama y los indios venidos de Almaguer, puesto que un año antes de 1751, los indios habían pedido al rey directamente la adjudicación de dichas tierras, lo cual disgustó profundamente al doctor de Valderrama, quien declara en sus memorias que había donado un pedazo de tierra únicamente a Alejo Astudillo y su familia sin que esto fuera a perjudicarlo pero, en vista de que el mencionado señor quería traer más gente para poblar la zona, él se retracta de lo dicho y decide no donar tierra alguna al señor Astudillo.

Aparentemente, el pleito sostenido por el doctor Valderrama y los primitivos habitantes, el indio Alejandro Astudillo y compañeros del pueblo, falló a favor de estos últimos, puesto que la Real Audiencia del Nuevo Reino de Granada, el 28 de Febrero de 1753 expide el siguiente decreto:

“Concédase licencia a Alejandro Astudillo y demás compañeros para que puedan poblar el sitio de San Agustín, su antiguo pueblo… con tal de que procedan a hacer primero y ante todas, la Iglesia con ornamentos y cosas necesarias para el culto divino…”.

Ante tal desamparo de los indios. el Alcalde de Timaná se traslada a San Agustín para dar posesión por tercera vez a los indios sobre mencionadas tierras, esto sucede hacia el año de 1765, o sea, cincuenta años después de iniciado el pleito de tierras.

Desdichadamente, el nuevo dueño de las tierras, Don Francisco Jerónimo de Torres entabló un pleito que duró cinco años hasta (1770), pleito que falló a favor de los indios; apelando de nuevo don Jerónimo de Torres y saliendo ganador, puesto que el tribunal lo declaró dueño absoluto de las tierras citadas anteriormente; y les exige a los indios sean entregadas las tierras ya que no existe un motivo válido para que en dichas tierras sea erigido un pueblo.

Ganando el pleito don Jerónimo de Torres y utilizando sus poderosas influencias sobre la iglesia local, el 20 de julio de 1771, el obispo de Popayán ordena sean arrojados los indios de la zona agustiniana y sea quemada la iglesia una vez desocupado el lugar, al igual que la destrucción de las chozas.

De esta manera, queda destruido por segunda vez el pueblo de San Agustín, el cual llevaba más de cincuenta años de existencia.

Es así como en 1789, el pueblo figura en los registros oficiales como dependiente de la villa de Timaná, el cual cuenta con un cura doctrinero y alcalde de partido.

En estas condiciones, se inicia la tercera fundación del pueblo.

Tercera fundación del pueblo

La visita del doctor Lucas Erazo y Mendigaña -abogado de la Real Audiencia del Nuevo Reino de Granada- a San Agustín en el año de 1790, constituye un punto a favor de los indios ya que el mencionado señor manifiesta en su informe que los indios, durante más de diez años han sido asistidos espiritualmente por el doctor Fernando de la Vega, obispo de Popayán, quien los visita cada año para administrarles los sacramentos religiosos.

Por tanto, a él le parece justo que esta comunidad sea erguida como pueblo, ya que a pesar de todos los obstáculos puestos por el doctor Valderrama y por la violencia de don Jerónimo de Torres, su perseverancia no tuvo límites.

Es así como el 20 de noviembre, se dictó en Santa Fe de Bogotá el decreto que ordenaba la erección de San Agustín en pueblo, dándose paso a un libre asentamiento en el poblado de los indígenas anteriormente expulsados, y que regresarán, tanto como otros vecinos.

El 4 de septiembre de 1792 se nombró a don Cristóbal de Cuéllar como teniente corregidor. El 10 de junio de 1794 fue designado como cura interino del poblado el doctor Jacinto Victoria. Se mantiene entonces un dinámico poblamiento en la zona; en el siguiente registro de documento, nos sitúa en el año 1825, en el cual San Agustín empieza a figurar como aldea, perteneciente a la jurisdicción de Timaná, en 1888 como corregimiento de Pitalito, hasta que finalmente, en 1926, por ordenanza número 24 de 8 de abril, fue erigido como municipio del departamento del Huila.

Pareciera entonces, que a partir de la tercera fundación de San Agustín, el poblado se mantiene hasta hoy con distintas circunscripciones administrativas.

Hoy, San Agustín ha logrado la adecuada conservación de las reliquias arqueológicas que allí se encuentran, a la vez, sus habitantes han conseguido buenas vías de comunicación, hoteles de turismo, hospital, establecimientos de educación, entre otros beneficios.