Cadena perpetua para violadores, en manos de Senado
Esperanza Andrade, senadora del Partido Conservador, ha sido siempre defensora de la mujer y la niñez.

Antes del 20 de junio, cuando termina la legislatura de primer semestre del año, el Senado deberá aprobar en dos últimos debates el proyecto de reforma constitucional que aplica la cadena perpetua a violadores de menores de edad en Colombia. A la iniciativa la está cogiendo el tiempo, pero la senadora Esperanza Andrade, ponente del proyecto, está convencida de que hay el tiempo suficiente para la aprobación total y definitiva.
“En Senado terminaremos la tarea”, dijo la congresista del Partido Conservador, defensora de la iniciativa, porque no vamos a permitir más impunidad para los verdugos de nuestros niños y niñas.
El Estado y sus autoridades tiene el deber de proteger los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes, y hacer todo lo que pueda y sea necesario para hacer y cumplir ese propósito, agregó.
Herramienta válida
Podría ser el único proyecto clave que termine siendo aprobado antes de que finalice el Congreso sesiones ordinarias, que han estado marcadas por la baja productividad parlamentaria debido a la pandemia.
Respecto a lo aprobado mayoritariamente en Cámara, Andrade Serrano respondió que se hizo un gran trabajo. “El texto aprobado desarrolla y define claramente los límites y circunstancias en que se aplica la pena de prisión perpetua”.
Sobre si sirve de herramienta para la lucha contra la violencia sexual infantil, señaló que “como mujer, madre y abuela me duele cada caso. Es una oportunidad de oro para ponerle un freno a esta situación que por años nos ha traído tragedias y dolor. El proyecto contempla una pena fuerte, rígida y ejemplar”.
En atención a cometarios que descalifican en proyecto por populista, respondió que no tienen fundamento. Es tratar de tapar su verdadera y genuina importancia, la de proteger la vida e integridad de nuestros niños y adolescentes.
“Nuestra responsabilidad como legisladores debe ser establecer penas más duras y que rompan paradigmas como el simple aumento de penas en años. Lo que se busca con la cadena perpetua es que asesinos y violadores de niños y niñas puedan recibir un castigo acorde con su delito”, dijo la senadora Andrade.
Concluyó recordando que quienes defienden que a los perpetradores de delitos graves contra menores de edad se les impongan condenas de cárcel de por vida sostienen que está comprobado que estos delincuentes difícilmente pueden ser resocializados, por lo que permitir su libertad a mediano o largo plazos implica un riesgo alto de reincidencia en violaciones, plagios o asesinatos de niños.