Arrendadores y arrendatarios, un drama de doble vía
En esta crisis del coronavirus, muchos colombianos se han visto con dificultades para pagar sus arriendos. Su tragedia se deriva de la pérdida de ingresos que tienen miles de familias y negocios en esta pandemia. Pero hay otra cara de ese drama: los que han dejado de recibir esos pagos.

Por Rolando Monje
El coronavirus no solo llegó arrasando con la vida de muchas personas, sino que además destapó muchos dramas que no estaban previstos en ningún panorama.
Uno de estos es el que han tenido que vivir las personas que derivan su sustento diario del alquiler de un inmueble, pero que por cuenta de la pandemia han tenido que vivir muchas situaciones difíciles: entrega del inmueble en plena cuarentena, el no pago del canon de arrendamiento por parte de los inquilinos, servicios públicos atrasados y ahora que la propagación del covid-19 ha disminuido, el drama no es mejor.
De acuerdo con datos del Ministerio de Vivienda, el 85% de los hogares que reciben arriendos están en los estratos 1,2 y 3 y en su mayoría son personas de la tercera edad que no tienen una pensión. El 34% de las viviendas están habitadas bajo la modalidad de alquiler, siendo la cifra más alta de Latinoamérica e incluso de Norteamérica donde el promedio es 21%.
Si bien durante los meses de confinamiento fueron muchos los inquilinos que no pudieron cumplir con el pago de los arriendos porque en muchos casos perdieron sus empleos, sus ingresos disminuyeron o sus negocios dejaron de producir, los dueños de los inmuebles tuvieron que aceptar la situación y vivir su propio drama.
Doña Elsa González aseguró que en este momento no tiene un sustento fijo por cuenta de la emergencia sanitaria. “Tengo una casa y vivo del arriendo de dos apartamentos. Cuando inició la cuarentena, los inquilinos me entregaron la vivienda y me quedé en ese momento sin ingresos. Sin embargo, llegan los recibos del agua, la luz y el gas, así sean pagos mínimos debe uno estar al día", dijo.
Elsa González.
Agregó que el gobierno "siempre habló a favor de quienes pagaban el arriendo y no podían, pero no tuvo en cuenta a quienes vivimos de ello”, afirmó.
Margarita Castro aseguró también que es muy angustiante saber que no se está recibiendo ingresos por el arriendo de los inmuebles. “Tengo dos apartamentos en arriendo. En este momento no me han podido pagar y esas son mis únicas entradas. Me he visto bastante afectada, algunos de los servicios los han cancelado los inquilinos y otros no. El Gobierno ha habló sobre beneficios para los inquilinos, pero para quienes arrendamos nada", indicó.
Pero un problema adicional hoy es que, aunque el gobierno no autorizó el incremento del valor de los arrendamientos, hoy para devengar algo muchos debieron rebajar el precio que cobraban antes de la cuarentena, porque mucha gente perdió su trabajo y los ingresos se redujeron.
Contrario a lo que muchos piensan, quienes arriendan no son los más adinerados del país. En un contexto como el actual, no solo están en grave riesgo económico quienes viven en arriendo, sino también aquellos que viven del arriendo. En las cifras estudiadas por el Ministerio de Vivienda para diseñar las medidas de choque hay una estadística que sorprende. El 85 por ciento de los hogares que reciben ingresos por arrendamientos están en los estratos 1, 2 y 3. Esos núcleos familiares recaudan entre 300.000 y 800.000 pesos por esa vía, lo que representa alrededor del 30 por ciento de sus ingresos totales.
Margarita Castro.
Datos de interés
Risaralda, con 44%; Bogotá con el 43,4%; Meta con el 43,1%; Quindío, 39,8%; Cundinamarca, 39,5%; Valle del Cauca, Antioquia, 37,3; 36,9%; Caldas, 38%; Casanare, 29,5% y Santander,35,8% son los departamentos donde más concentración de arriendos hay. Los arriendos se concentran en donde hay más zona urbana y la suma total de las rentas mensuales llegan a 2,2 billones de pesos.
Así mismo, el canon promedio, los estratos 2, 3 y 4 concentran la mayoría de la oferta. El estrato 3 tiene el 46,4% de las viviendas en arriendo, en el estrato 2, el 41,8% de las viviendas están en arriendo; y el 36,6% de los bienes residenciales de estrato 4 se arriendan. En contraste, el estrato 6 con 22,9% y el estrato 1 con 24,3% de las viviendas se mantienen alquiladas.
En cuanto al valor del canon, en promedio una familia de estrato 1 paga 239.283 mientras una de estrato 2 cancela 345.581 pesos y una de estrato 3, 525.348 pesos. Mientras tanto, en el estrato 6 se paga 1’591.209; en estrato 5, 1’130.690; y en estrato 4, 854.910 pesos.
Por cada 100 viviendas que se construyen, 18 se destinan al arrendamiento (12 nuevas y 6 usadas). De ahí que calculamos que este año entrarán 32.500 viviendas formales al mercado de los arrendamientos.