La historia del arte robado de Hitler
George Clooney lleva al cine este episodio. El 21 de febrero se estrena "Operación Monumento", película que explora un tema poco común de la Segunda Guerra Mundial.

George Clooney se vuelve a sentar en la silla del director con "Monuments Men", un homenaje a los héroes anónimos de la Segunda Guerra Mundial que arriesgaron su vida para rescatar las obras de arte europeas robadas por el régimen de Hitler.
"Operación Monumento", basada en el libro homónimo de Robert M. Edsel y Bret Witter, se estrena mañana en Estados Unidos y el 21 de febrero en Colombia.
Con un elenco de lujo (Matt Damon, John Goodman, Bill Murray y Jean Dujardin), es el quinto filme que dirige Clooney tras "Confesiones de una mente peligrosa" (2002), "Buenas noches y buena suerte" (2005), "Leatherheads" (2008) y "The Ides of March" (2011).
La cinta narra la historia verdadera de un grupo de expertos, curadores, galeristas y artistas que fueron enviados a Europa por el presidente Franklin D. Roosevelt para recuperar cientos de miles de obras de arte robadas por los nazis, además de proteger miles de piezas amenazadas por los bombardeos aliados.
"No estamos muy familiarizados con esta historia, lo cual es extraño viniendo de una película sobre la Segunda Guerra Mundial. Generalmente, uno supone que ya lo ha visto todo" sobre esa época, dijo Clooney en una conferencia de prensa en Beverly Hills.
El centenar de hombres que recorrieron Europa durante el operativo tenían la tarea de localizar y recuperar las obras que Adolf Hitler había robado a las familias judías y a los grandes museos europeos para crear su megalómano museo de arte de Linz.
"Era un grupo de hombres que uno jamás habría imaginado en una zona de guerra", dijo Grant Heslov, productor y coguionista del film, además de cercano colaborador de Clooney en el proyecto. "Ni eran jóvenes ni estaban hechos para la batalla o el heroísmo".
Crear conciencia
La seriedad del tema no impide que la película adopte un tono ligero y divertido, reivindicado por los autores. "Es el tono que George y yo queríamos", precisó Heslov.
"Queríamos hacer una película que nos recordara el tipo de cintas de guerra que veíamos en nuestra juventud. Había algo de humor en ellas", dijo. "Sabíamos que no íbamos a hacer ′La lista de Schindler′ o ′Salvando al soldado Ryan′. Esas son películas excelentes, pero con una perspectiva totalmente distinta sobre la guerra".