sábado, 13 de septiembre de 2025
Actualidad/ Creado el: 2015-03-10 08:30

130 millones de personas viven en la pobreza crónica en América Latina

El estudio del Banco Mundial denominado “Los olvidados: pobreza crónica en América Latina y el Caribe”, destaca que en la última década más de 70 millones de latinos dejaron la pobreza para ubicarse en la clase media o emergente.

Escrito por: Redacción Diario del Huila | marzo 10 de 2015

130 millones de personas, habitantes en América Latina y el Caribe, viven en la pobreza extrema subsistiendo con menos de 4 dólares al día.
Así lo advirtió el Banco Mundial en el estudio denominado “Los olvidados: pobreza crónica en América Latina y el Caribe”, donde si bien se destacan adelantos, se revela la abultada cifra que nos deja lejos de la erradicación de este flagelo que no es otra cosa que atraso y hambre.

El estudio evaluó el periodo comprendido entre 2004 y 2012 y por primera vez se enfoca solo en el sector más desfavorecido, sin considerar a quienes tuvieron una movilidad baja o se volvieron pobres tras haber contado con ingresos más altos.

Un dato destacado del estudio revela que en 2004 el porcentaje de pobres en Latinoamérica ascendía a 44,9%, mientras que en 2012 bajó a 25,7%, es decir que en la última década más de 70 millones de personas dejaron de ser pobres extremos para ubicarse en lo que se conoce como clase media o emergente.

“Un mejor entendimiento de la gente atrapada en tales ingresos mínimos ayuda a enfocar mejor los programas de ayuda. Y es aún más importante ahora que los esfuerzos por la reducción de la pobreza en la región se están frenando ante un crecimiento económico más débil”, indica el informe.

PIB creciente

El estudio del Banco Mundial, en uno de sus apartes resalta que el producto bruto interno (PBI) en América Latina crecerá este año 1,7%, cuando en 2010 llegó al 6%, lo que significa que nos alejamos del cumplimiento de la meta de erradicar la pobreza extrema, es decir, que pese a lo logrado, la región ahora vivirá un estancamiento.
Y la situación se torna más precaria en la medida que el auge económico que tanto contribuyó a reducir la pobreza en estos años comienza a menguar. El crecimiento del PIB regional se redujo desde un 6 por ciento en 2010 al 0,8 por ciento estimado para 2014. Esta contracción de tajo elimina uno de los principales motores que contribuyó a bajar los índices de pobreza. Lo que se calcula es que la coyuntura económica difícil por la que está pasando el mundo, no ayuda mucho en este proceso de sacar a más seres humanos de la miseria.

Otro aspecto de destacar es que de los 130 millones de habitantes que viven en condición de pobreza crónica, la gran mayoría se encuentran en áreas urbanas, en los llamados cordones de miseria, para el caso de Colombia debido al desplazamiento del campo a las ciudades y en otros casos debido a que las oportunidades –así está claro- se dan más fácil en las ciudades que en el sector rural.

“La movilidad genera que en ciudades de Chile, Brasil, México, Colombia y República Dominicana haya, entre 2004 y 2012, mayores tasas de pobres crónicos en ciudades que en el campo”, dice el informe.
En cifras indica el estudio del Banco Mundial que en Guatemala la pobreza es del 50% de la población, lo que contrasta con Uruguay donde apenas el 7,8% es pobre. Argentina y Chile tampoco pasan del 10%. Curiosa e infortunadamente, la ciudad brasileña de Ceará registra una tasa que duplica a la del resto del país en pobreza, destaca el análisis.

Pobreza y problemas sicológicos

En las conclusiones del estudio elaborado por el Banco Mundial durante dos años y en el que intervinieron profesionales de múltiples disciplinas como la sociología, la sicología y la economía, entre otras, destaca que un motivo que lleva a que muchas personas no salgan de este estado de pobreza extrema, además de la falta de educación y servicios de salud, es el factor psicológico. “La pobreza te puede dejar en un estado mental complicado, y ese estado puede hacer más difícil escapar de ella”.

“Creo que la región está (…) moviéndose más allá de la transferencia condicional de dinero. No han alcanzado a sacar a mucha de la gente de la pobreza”, concluye.

Este completo informe del Banco Mundial, Los olvidados, pobreza crónica en América Latina y el Caribe, analiza más de cerca a los pobres crónicos de la región, quiénes son y dónde están, y cómo las políticas y el modo de pensar tendrán que cambiar para poder asistirlos de manera más efectiva.

"La pobreza existe y persiste debido a limitaciones tanto dentro como fuera del hogar, desde la falta de motivación y destrezas adecuadas hasta la falta de servicios básicos como agua potable", dijo Jorge Familiar, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe. "En otras palabras, apoyar a los individuos es necesario aunque no suficiente. También es crucial contar con un contexto propicio que proporcione servicios adecuados. Por lo tanto las políticas sociales y el desarrollo regional deben ir de la mano", conforme una nota enviada a Diario Libre.

Pero, ¿quiénes son los pobres crónicos? Tradicionalmente no ha sido fácil responder a esta pregunta debido a la falta de datos que hacen seguimiento a los pobres en el tiempo. El informe del Banco Mundial, sin embargo, emplea una nueva metodología para arrojar luz en torno a aquellos que han permanecido siendo pobres en América Latina.

 Algunos datos relevantes del informe del Banco Mundial

- Existen variaciones significativas entre países. Uruguay, Argentina y Chile exhiben las menores tasas de pobreza crónica, con cifras en torno al 10 por ciento. En el otro extremo, Nicaragua, Honduras y Guatemala detentan tasas de pobreza crónica significativamente más altas que el promedio regional de 21 por ciento, variando de 37 por ciento en Nicaragua a 50 por ciento en Guatemala.

- Existen variaciones significativas dentro de los países. Dentro de un mismo país, algunas regiones exhiben tasas de incidencia hasta ocho veces más elevadas que la mínima. En Brasil, por ejemplo, Santa Catarina tiene una tasa de pobreza crónica de 5 por ciento, mientras que en Ceará es de casi 40 por ciento.

- El tema es tanto rural como urbano. A pesar de que las áreas rurales exhiben tasas de pobreza crónica mucho más elevadas, dicha pobreza es un fenómeno tanto urbano como rural. De hecho, y teniendo en cuenta números absolutos, las áreas urbanas de muchos países, incluidos Chile, Brasil, México, Colombia y la República Dominicana, exhibieron un número mayor de pobres crónicos entre 2004 y 2012 que sus áreas rurales.

- A futuro, los diseñadores de políticas de América Latina tendrán motivos para repensar el enfoque de sus programas de reducción de la pobreza, haciendo uso de este nuevo análisis para entender mejor quiénes son los pobres crónicos y dónde residen.

- Será imperativo mejorar la coordinación entre diferentes programas sociales y económicos, así como enfrentar el costo mental y emocional que la pobreza impone en los pobres y en su capacidad de mejorar sus vidas. Solo así se podrá forjar un mejor camino de escape de la pobreza para los 130 millones de pobres crónicos de América Latina.