“No se debe castigar a los países por tener muchos casos”
El director de emergencias de la Organización aseguró que se debe felicitar a los países que están haciendo más pruebas, y no castigarlos porque reporten un mayor número de casos.

“Si creamos una situación en la que reaccionamos negativamente al aumento de los casos, esto se convierte en un incentivo para dejar de hacer test”, dijo Mike Ryan.
Ryan aclaró que también se deben tomar en cuenta las tasas con respecto a toda la población, cuántas pruebas se han hecho, y cuántos han sido negativos o positivos.
“Esto nos da una mejor idea del impacto de la enfermedad. Cuando vemos estos números que están creciendo, parte de ese crecimiento es un aumento de los esfuerzos de detección debido a mejores esfuerzos de rastreo y testeo”, afirmó.
"Cuantas más pruebs hacemos, más va a aumentar el número de casos. Puede ser apabullante, pero hay que conocer los casos. Con medidas agresivas de test, aislamiento y tratamiento, cuarentena de contactos se pueden reducir. Esto es lo que funciona”, agregó la doctora María Vankerkhove.
Los países ricos deben trabajar juntos y ayudar al resto del mundo
El doctor Tedros informó que se había dirigido al G20 y les pidió que echen a andar todo su poder industrial y de innovación para producir y distribuir las herramientas necesarias para salvar vidas.
“También debemos hacer una promesa a las generaciones futuras: nunca más. Los brotes virales son un hecho de la vida, pero la cantidad de daño que hacen es algo en lo que tenemos influencia”, dijo.
Actualmente hay una escasez mundial crónica de equipos de protección personal para los trabajadores de salud, lo que representa una de las amenazas más urgentes para la capacidad colectiva de salvar vidas.
La Organización Mundial de la Salud ha enviado casi dos millones de artículos individuales de equipo de protección a 74 países que más lo necesitan, y se está preparando para enviar una cantidad similar a otros 60 países.
“Pero se necesita mucho más. Este problema solo puede resolverse con la cooperación y la solidaridad internacionales. Cuando los trabajadores de la salud están en riesgo, todos estamos en riesgo. Los trabajadores de la salud en los países de ingresos bajos y medianos merecen la misma protección que los de los países más ricos”, recalcó.
Tedros afirmó además que para respaldar el llamado a todos los países para que realicen pruebas y casos agresivos, también están trabajando con urgencia para aumentar masivamente la producción y la capacidad de pruebas en todo el mundo.
El virus afecta a niños y jóvenes: algo que se puede olvidar
La doctora María Vanhkerkhove recordó que el virus es capaz de causar infección y enfermedad severa en personas de todas las edades.
“La mayoría de los niños tienen una enfermedad leve, pero hay también casos de enfermos graves”, aseguró, añadiendo que la Organización Mundial de la Salud ha lanzado un protocolo para que los países puedan reportar los datos demográficos de los pacientes para aclarar más el panorama.
“No hay duda de que los más afectados son los ancianos y aquellos con otras condiciones, pero por ejemplo en Corea, el 15% de los casos en cuidados intensivos, eran de personas menores de 60 años “, afirmó el doctor Mike Ryan.
Los especialistas recordaron que cada infección es una oportunidad de transmisión, y que los jóvenes no son inmunes, y si no se cuidan y se enferman ponen en riesgo a otras poblaciones más vulnerables.
“Del 10 al 20% de los menores de 50 años tendrán COVID-19 con síntomas moderados, está cada vez más claro es que, aunque no suele ser fatal en los jóvenes, puede causar una enfermedad grave”, recordó Ryan.